Las apuestas estaban hechas para que la ganadora de la noche de los Globos de Oro 2019 fuera Nace una estrella, pero a pesar de los pronósticos, todo se vino abajo cuando Nicole Kidman anunció que la gran triunfadora era Bohemian Rhapsody.
El largometraje que toma la vida del vocalista de Queen, Freddie Mercury, como eje principal, sigue arrasando en taquilla y en la preferencia del público, pero su producción accidentada salió a colación justo con la premiación que organiza la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA, por sus siglas en inglés).
Tanto en el discurso de Rami Malek, cuando subió a recoger el Globo de Oro a Mejor Actuación Masculina en una Película Dramática por su interpretación de Mercury, como cuando la cinta se llevó el máximo galardón y los productores dieron su discurso de agradecimiento, nadie hizo mención del director del filme, Bryan Singer.
Y es que el cineasta, que es recordado por Sospechosos comunes (1995) e iniciar la primer trilogía de X-Men en el 2000, fue despedido a dos semanas de terminar el rodaje de la cinta biográfica. En su momento se dijo que había sido por diferencias creativas con Malek y 20th Century Fox, además de que lo acusaban de ausentismo laboral; él explicó que se debía a que un familiar tenía problemas de salud.
Todo ese escándalo se dio justo en un momento en el que el efecto Weinstein cobraba fuerza, y Singer fue señalado por, presuntamente, haber acosado sexualmente a Cesar Sanchez-Guzman, en 2003, cuando la víctima tenía 17 años de edad.
Aunque Singer se desmarcó de las acusaciones, su relación con la Película de Queen trató de ocultarse, ya que a pesar de contar con el crédito final en pantalla, nadie relacionado con la cinta quiere hablar de ello.
Cuando el productor Graham King fue cuestionado en la sala de prensa de los Globos de Oro sobre el cineasta y su relación con la cinta, el inversionista sólo dijo que “eso es algo de lo que no deberíamos hablar esta noche”.
Las críticas no se hicieron esperar en Twitter, donde la comunidad artística y los reporteros cuestionaron el triunfo de Bohemian Rhapsody sin que importara el movimiento #MeToo o que se ignorara por completo la dirección de Singer.
Por su lado, Singer publicó en su cuenta de Instagram una imagen donde se le aprecia de espalda, sentado en la silla de director y filmando una escena de la cinta de Mercury, en la que sencillamente escribió: “Que honor, gracias #HollywoodForeignPress”.
Más allá de las acusaciones contra Singer, su profesionalismo en la industria del entretenimiento habla por él. Muestra de ello es que tiene dos proyectos en pre producción en puerta, una serie titulada World War III y la adaptación del cómic Red Sonja.
Además de esta controversia que marcó la noche, hubo discursos que resaltaron a las minorías o que también causaron revuelo, pero a diferencia de otros años, este 2019 la crítica política estuvo fuera de los Globos de Oro.
Exaltando a los ignorados
Basada en un fragmento de la vida del jazzista afroamericano Don Shirley, el director de Green Book, Peter Farrelly, habló en el podio cuando ganó su cinta como Mejor Película Cómica en torno a cómo es que este músico era discriminado
También, recordó que Tony Vallelonga, quien acompañó a Shirley como su chofer y guardaespaldas, era un hombre de familia inmigrante de italianos en el Bronx, en una cultura que no daba cabida a la diversidad e individualidad.
“Esta historia cuando la escuché me dio esperanza y quería compartir eso con ustedes, porque aún vivimos tiempos divididos, tal vez más que nunca y para eso es esta película, para todos, porque si Don y Tony encontraron un interés mutuo, todos podemos”, continuó el cineasta.
El efecto Satán
Christian Bale puso de su cosecha cuando en su discurso agradeció a Satán la inspiración para interpretar al político Dick Cheney, en la cinta biográfica El vicepresidente, acto que después repercutió en Internet.
La hija del vicepresidente que estuvo en funciones durante el mandato de George W. Bush, no ha estado conforme con la película y tras las declaraciones de Bale, lanzó un tuit donde rescató un artículo en el que el actor fue arrestado por atacar a su madre y hermana en 2008.
“Satán probablemente lo inspiró a hacer esto también”, tuiteó la congresista Liz Cheney, junto al artículo publicado por el diario The Independent.
Quienes también aprovecharon para subirse a este acontecimiento fueron los miembros de la Iglesia de Satán, que publicaron en la red del pájaro azul el apremio de Bale por hacer mención del ser diabólico.
“Para nosotros, Satanás es un símbolo de orgullo, libertad e individualismo, y sirve como una proyección metafórica externa de nuestro potencial personal más elevado. Como el talento y la habilidad del propio Sr. Bale le ganaron el premio, esto es apropiado. ¡Salve Christian! ¡Salve Satanás!”, escribió la congregación.
Las mujeres arriba
Glenn Close, al ganar como Mejor Actriz en una Película Dramática, confesó que pensó en el sufrimiento de su madre, quien se dedicó a su vida de esposa y sintió que no tuvo ningún logro personal.
“Eso no estaba bien para nada y siento que lo que he aprendido de esta experiencia es que las mujeres somos cuidadoras y eso es lo que se espera de nosotras, tenemos a nuestros hijos, a nuestros esposos, si tenemos la suerte, y a nuestras parejas. Pero tenemos que encontrar satisfacción personal. Seguir nuestros sueños. Decir ‘puedo hacer eso, y se me debe pemitir hacerlo”, comentó.
Visibilizar la diversidad
Rami Malek fue enérgico al tomar el micrófono en los Globos de Oro y hablar de cómo el cuarteto británico abrió la brecha para la inclusión de la diversidad sexual, lo cual fue aplaudido por los presentes mientras sostenía el galardón a Mejor Actuación en una Película Dramática.
“Pero sobre todo (gracias) a Queen, a ti Brian May, Roger Taylor, por asegurar que la autenticidad y la inclusión puedan existir en la música, en el mundo y en todos nosotros. Gracias a Freddie Mercury por darme la alegría de esta vida, te amo hermoso hombre, esto es para y por ti”, dijo el actor.