En el estado frontera de California no sólo se votó por llevar a Hillary Clinton o Donald Trump hasta la Casa Blanca, también se dio el voto a la salubridad y el blindaje lubricado y con condón a la entidad que más pornografía produce en todo Estados Unidos.
A través de la Propuesta 60 los californianos dieron el sufragio a favor y en contra para con la iniciativa, obligar a que todos los actores de películas con penetración anal o vaginal utilicen condón en el set de filmación.
Como antecedente ante esta propuesta estatal, en las elecciones del 2012 se aprobó la Medida B en el condado de Los Ángeles, la cual imponía el mismo estatuto, además de obligar a los productores de películas para adultos a pagar una tarifa anual al departamento de salud pública del condado más poblado de California.
De aquella elección, un millón 617 mil 866 votantes dieron el sí, representando el 56.96 por ciento y un millón 222 mil 681 personas especificaron la negativa, siendo el 43.04 por ciento.
Ante la iniciativa postulada ahora a todo el estado, la industria pornográfica ha expresado un rotundo no desde que se dio a conocer la Propuesta 60, ¿su argumento? Que esta medida atenta contra la libertad de expresión de un comercio pujante y repleto de ganancias hasta el tope.
“Ellos han perseguido la pornografía fuera de California”, expresó el actor Ron Jeremy de las autoridades estatales para el Hollywood Reporter el 3 de noviembre. “Su pérdida es una ganancia en
Las Vegas”, agregó Jeremy argumentando que ahora las producciones se mueven al estado de Nevada.
La comunidad actoral de filmes para adultos se pronunció en Twitter de manera desfavorable ante la propuesta con los hashtags #NoProp60 y #NoOn60.
La campaña del NO
Medios periodísticos, organizaciones sin fines de lucro e inclusive los partidos demócrata, republicano y liberal apoyan la negativa de esta votación.
En el diario británico Huffington Post, el actor gay porno Jesse Jackman contribuyó con su opinión titulada “Siempre uso condones en mis películas, pero como quiera me opongo a la Proposición 60” (I Always Use Condoms in My Films, But I Still Oppose Proposition 60), donde expone que esta medida es condescendiente ya que “parece que no podemos decidir de cómo salvaguardar nuestra propia salud”.
“No se trata sólo de condones”, dijo Carter Cruise, actriz de 25 años que también pronunció su opinión en contra en el sitio Nylon.com, argumentando que “imagina que estás teniendo sexo con tu pareja cuando de repente un hombre de aspecto sombrío abre la puerta de tu habitación y dice ‘ven conmigo estás siendo demandada por no usar condón’”.
La campaña en negación a la iniciativa tuvo un poderoso alcance en Twitter, sin embargo su financiamiento fue deficiente, ya que apenas con 545 mil dólares se financió la oposición apoyada por el periódico Los Angeles Times.
El irreversible SI
Ante quienes apoyaron económicamente la negativa, el financiamiento para dar la afirmación tuvo casi cinco millones de dólares para convencer al electorado de California.
AIDS Healthcare Foundation, fue la organización que patrocinó las campañas de la afirmativa, siendo Michael Weinstein –presidente de la fundación– el mayor promotor de este movimiento.
“¡Nadie debe tener riesgos de salud para seguir manteniendo sus trabajos!”, explica parte de los argumentos expuestos de los simpatizantes del condón en las producciones porno.
“El costo vitalicio para tratar el VIH asciende a casi medio millón de dólares por persona y esta industria le ha costado a los contribuyentes de California cerca de 10 millones en gastos solamente de VIH”, pronunciaba el documento expuesto para los votantes del día de ayer.
De aprobarse la iniciativa, se gastarían alrededor de un millón de dólares anuales de los impuestos para prevención de enfermedades de transmisión sexual, pero el inconformismo dominaría para los productores porno y sus actores que no ven beneficios.
Últimas noticias
Hasta ayer a las 11 de la noche, sondeos publicados por Los Angeles Times daban el No a la Proposición 60 con el 13 por ciento de las boletas contadas, siendo mayoría de 53.4 por ciento con la negativa.
Un millón 85 mil 932 votos se perfilaron por la negativa, según The New York Times, dando a la industria porno el gane que tanto pedían en las urnas.
La actriz de filmes para adultos Tara Lynn Foxx celebró desde su cuenta de Twitter el revés hacia la afirmativa.
Por qué SI
• Mayor seguridad y prevención en enfermedades de transmisión sexual (ETS).
• La propuesta sólo responsabiliza a productores, directores y agentes de películas para adultos, no a los actores.
• Se ahorraría dinero de los contribuyentes de tratamientos costosos de enfermedades de transmisión sexual pagadas por el sector de salud pública.
Por qué NO
• La iniciativa crea un nuevo derecho a los 38 millones de residentes de California a presentar demandas directas contra aquellos que producen o distribuyen contenido para adultos, incluyendo actores.
• Empleados del Estado tendrán que revisar los filmes para adultos.
• La propuesta podría forzar a actores de la industria porno a publicar su información privada, como nombres reales y direcciones particulares.