Durante las últimas navidades, ha circulado en redes sociales una imagen en la que se afirma que Jesús no es la única deidad cuya fecha de nacimiento está relacionada con el 25 de diciembre, pues supuestamente dioses de otras culturas nacieron el mismo día y en condiciones similares.
La imagen en concreto señala que personas como Hermes, Budha, Krishna, Horus, Heracles, Adonis, Dionisio, Zoroastro, Mithra y Tammuz habrían nacido un 25 de diciembre, decenas de años antes que Jesús, lo que intenta demostrar que la Navidad es una forma de aglutinar distintas creencias previas.
Sin embargo, dicha imagen no soporta la más mínima revisión histórica, pues en la mayoría de los casos se desconoce la fecha exacta en que habrían nacido dichas deidades y en otras se inventa una fecha distinta a la que las distintas culturas les atribuyen.
Por ejemplo, de Zoroastro se desconoce la fecha exacta de su nacimiento, sin embargo, el Nouruz, es decir el año nuevo de Irán, que se celebra el 21 de marzo del calendario occidental, está asociado con el Zoroastrismo, es decir, no hay ninguna referencia al 25 de diciembre.
El caso de Buda es muy similar, aunque se desconoce el día exacto de su nacimiento, en la India se piensa que Siddharta Gautama debió haber nacido en un día de luna llena en el mes de ‘Vaisaka’, es decir, entre abril y mayo del calendario occidental.
Dicha imagen no sólo tergiversa información, sino que engloba de manera arbitraria a dioses, semidioses y profetas, por igual, también olvida que las culturas grecorromanas, orientales y originarias de América tenían calendarios totalmente distintos.
¿Entonces Navidad es única?
La imagen tiene el claro objetivo de despotricar contra la Navidad, sin embargo, eso no significa que no haya una serie de festejos en distintas culturas que coincidan con día en el que presuntamente nació Jesús hace más de 2 mil años.
Desde hace cientos de años y en distintas partes del mundo se celebran festividades en los últimos y los primero días del año, esto se debe al solsticio de invierno, fecha sagrada para distintas culturas, por estas asociada al nacimiento del Sol.
Los romanos, por ejemplo, celebraban el 25 de diciembre la fiesta del ‘Natalis Solis Invicto’, Nacimiento del Sol invicto, pues a partir de esta fecha el Sol comenzaba a crecer y cada vez las horas de luz eran mayores, por eso se consideraba su nacimiento.
En la antigua Roma también se celebraba ‘Saturnalia’, la cual duraba cerca de una semana y coincidía con el solsticio de invierno. Para esta celebración, los romanos paraban la guerra y el comercio para celebrar a Saturno, dios de la agricultura y la cosecha.
Algunos historiadores coinciden que al desconocerse la fecha exacta en que habría nacido Jesús, se tomó estas fiestas romanas como punto de referencia, durante el siglo IV de nuestra era, para que las personas se convirtieran con mayor facilidad al cristianismo.
El solsticio en América
Los aztecas celebraban durante el invierno, la llegada de Huitzilopochitl, dios del Sol y la guerra, en el mes Panquetzaliztli, que equivaldría, en el calendario actual, al periodo comprendido entre el 7 y el 26 de diciembre.
Mientras que los Incas celebraban el renacimiento de Inti, el dios del Sol y la deidad más importante de esta cultura, la celebración corresponde al 23 de diciembre del calendario occidental contemporáneo.