Reanuda vuelo solar
Después de cierta incertidumbre por la conveniencia de los vientos, el equipo del avión Solar Impulse 2 despegó de Hawái para iniciar otra etapa de su vuelta al mundo casi 10 meses después de llegar al estado.
El Solar Impulse 2 partió de Hawái ayer temprano con el objetivo de aterrizar en Mountain View, California, en unos tres días.
El avión solar aterrizó en Hawái en julio pero se vio obligado a permanecer en las islas después que el sistema de la batería sufrió daños en su viaje desde Japón.
Indigo StaffDespués de cierta incertidumbre por la conveniencia de los vientos, el equipo del avión Solar Impulse 2 despegó de Hawái para iniciar otra etapa de su vuelta al mundo casi 10 meses después de llegar al estado.
El Solar Impulse 2 partió de Hawái ayer temprano con el objetivo de aterrizar en Mountain View, California, en unos tres días.
El avión solar aterrizó en Hawái en julio pero se vio obligado a permanecer en las islas después que el sistema de la batería sufrió daños en su viaje desde Japón.
El aparato inició su viaje en marzo de 2015 desde Abu Dabi, la capital de Emiratos árabes Unidos, y después hizo escalas en Omán, Mianmar, China y Japón. Ahora está en la novena etapa de su circunnavegación.
El piloto Bertrand Piccard dijo que hace algunos años le asustaba la idea de cruzar el océano en un avión a energía solar, pero el jueves confió en hacer el trayecto. Afirmó que el avión aterrizará “en medio del espíritu pionero”.
Vencen adversidad
El equipo, conformado también por el copiloto Andre Borschberg, se demoró también en Asia. Cuando intentó por primera vez volar desde Nanking, en China, hasta Hawái, tuvo que poner fin al viaje pronto y regresar a Japón debido a un clima desfavorable y un ala averiada.
Un mes después, con las condiciones meteorológicas adecuadas, el avión despegó de un aeropuerto de Nagoya, Japón, rumbo a Hawái. Fue el tramo más riesgoso, ya que no había dónde aterrizar en caso de emergencia. Lo mismo ocurrirá en el tramo desde Hawái hasta Estados Unidos continental.
La velocidad ideal del avión es de 45 kilómetros por hora, aunque se puede duplicar cuando los rayos del Sol son más intensos. El aparato de fibra de carbón pesa 2 mil 275 kilogramos, lo mismo que una minifurgoneta o un camión mediano. Las alas, más largas que las de un Boeing 747, están equipadas con 17 mil celdas solares que impulsan los motores y cargan las baterías. Por la noche funciona con la energía almacenada. (AP)