A solo unos metros del puente que atraviesa la frontera entre México y Guatemala, sobre el río Suchiate, cientos de personas cruzan diariamente de forma ilegal la línea divisoria entre las dos naciones por medio de balsas construidas con dos cámaras de hule y una cama de tablas.
En esta travesía se embarcan migrantes, trabajadores transfronterizos y comerciantes con sus mercancías, quienes ante sus carencias y necesidades, están dispuestos a arriesgar hasta sus vidas con tal de llegar al otro lado.
El río Suchiate marca la frontera entre Ciudad Hidalgo, Chiapas y Ciudad Tecún Umán, Guatemala.
Grupo de migrantes provenientes de Haití utilizan el servicio de los balseros para llegar a territorio mexicano.
Los muelles han sido construidos improvisadamente por los locales para facilitar el abordaje.
Dese el puente fronterizo se pueden observar las balsas cruzando el río Suchiate
Este transporte ilegal es utilizado diariamente por ciudadanos de ambas naciones para hacer compras, visitar al médico o incluso ir a trabajar.
Además de personas, gran variedad de productos son cruzados por esta vía, principalmente de México a Guatemala.
