Los automóviles que se conducen a sí mismos sin emitir contaminantes, mientras que entretienen a sus pasajeros con películas y medios sociales, acaparan buena parte de la atención en la Feria Automovilística de Tokio.
En el evento, que inició ayer y finalizará el 8 de noviembre, figuran algunos prototipos de este segmento producidos por firmas japonesas como Honda y Toyota.
En tanto, otros productores como General Motors, BMW, Mercedes y Tesla están trabajando en tecnología de conducción autónoma, al igual que lo hacen firmas ajenas a la industria, como Google y Uber.
Experiencia diferente
En lugar de tratar de aventurarse por carreteras y otras vías públicas, esos vehículos están diseñados para ambientes controlados, restringidos a transportar a personas a lugares predeterminados.
Un reto grande para los coches autónomos es ganar aceptación social. Tendrán que compartir las calles y carreteras con automóviles convencionales, además de peatones, animales y objetos inesperados.
“Tendremos que ver”, dijo el presidente de Honda, Fumihiko Ike, sobre cuándo los vehículos autónomos se volverán algo común. “La respuesta final vendrá de la sociedad”.
(Con información de AP)