Todos los mexicanos, sin importar de qué estado sean, saben que los tacos son una de las comidas más emblemáticas del país, y no sólo por la tortilla de maíz, que junto a la carne forman ese primer bocado perfecto, sino por la salsa, el acompañamiento que no debe faltar en la gastronomía nacional.
En esta taquería, la cual se caracteriza por tener en su logo a una vaca envuelta en una tortilla, hay cinco tipos de salsas: pepino con limón, chile de árbol, chile tatemado, cilantro con limón y, la más exótica, yogurt natural con pepino.
Taquería Orinoco inició en Monterrey, quienes crearon este lugar de comida, en 2015, decidieron llevar el pastor chilango para sus tierras, ya que este tipo de carne en el norte del país es diferente a la que se conoce en la Ciudad de México (CDMX).
Estando en el lugar, además de ver a mexicanos comiendo tacos o gringas con papas sazonadas y tiras de cebolla en su mismo plato, se verán a múltiples extranjeros pidiendo la proteína de su preferencia, acompañando sus platillos con cerveza, refresco o agua helada.
En el menú de Orinoco, situado en Insurgentes Sur, 253, Roma Norte, la gente podrá encontrar también tacos especiales, los cuales tienen el doble de tamaño que una tortilla normal, acompañados de queso asadero, chips de maíz crujientes, cebolla, cilantro y aguacate.
Entre los tacos especiales entran las gringas, con carne de trompo; los pirata, con res; los campechanos, con res y carne de trompo, y los norteños, con chicharrón.
Además, y para cerrar con broche de oro, en Taquería Orinoco también hay postres, como los buñuelos hechos con tortilla de harina frita, leche quemada de Nuevo León, nuez quebrada y nieve de plátano; paleta de hielo de guayaba y obleas de leche quemada.