Taylor Swift ¿racista?
El nuevo sencillo de Taylor Swift se aleja del estilo usual de la cantante. Para empezar, el ritmo es más acelerado, la melodía es más vivaz y la letra no se trata sobre el amor o los amigos, sino sobre dejar ir los comentarios negativos, ignorarlos y seguir con su vida.
Se llama “Shake it off”, y su video muestra a la cantante intentando –y fallando– participar en numerosos estilos de baile: desde el ballet hasta la danza interpretativa.
Ana Paulina ValenciaEl nuevo sencillo de Taylor Swift se aleja del estilo usual de la cantante. Para empezar, el ritmo es más acelerado, la melodía es más vivaz y la letra no se trata sobre el amor o los amigos, sino sobre dejar ir los comentarios negativos, ignorarlos y seguir con su vida.
Se llama “Shake it off”, y su video muestra a la cantante intentando –y fallando– participar en numerosos estilos de baile: desde el ballet hasta la danza interpretativa.
Durante cuatro minutos, Taylor demuestra que bailará a su propio ritmo sin importar los comentarios de los haters, y el video comunica efectivamente el mensaje. Sin embargo, una parte de él ha recibido críticas.
Uno de los pasos de baile que la cantante intenta es el “twerking”, y la acompañan varias bailarinas profesionales –definitivamente con más gracia que Taylor para este tipo de danza.
La cantautora de 24 años aparece vestida con unos shorts diminutos y una sudadera con estampado de leopardo y, para algunos, su indumentaria e intento de “twerkear” fueron “inherentemente ofensivos y finalmente dañinos”.
Earl Sweatshirt, miembro de la banda de Hip-Hop Odd Future, expresó su preocupación con esas palabras en Twitter. A pesar de asegurar que no ha visto el video, dijo que no necesita hacerlo para saber que ayuda a “perpetuar estereotipos sobre los negros a las chicas blancas que ocultan sus prejuicios diciendo que aman nuestra cultura”.
Al cierre de esta edición, representantes de Taylor no habían respondido a las acusaciones, que podrían ser consecuencia de una controversia similar que ocurrió hace un año, tras la ahora legendaria presentación de Miley Cyrus en los Video Music Awards.
Además que usar bailarinas afroamericanas como “accesorios” durante la presentación, la cantante dijo en entrevistas que quería que álbum tuviera un sonido más “negro”, y usó el término “urbano” como sinónimo.
La opinión más popular sobre su nueva apariencia, música y actitud es que era una apropiación y explotación de una cultura distinta a la de la originaria de Nashville, Tennessee.
El video de “Shake it off”
