Kanye West lo declara el “principio del nuevo mundo”. Jay-Z dice que es lo que “todos querían pero todos temían”. Se trata de TIDAL, el servicio de música en streaming al que también se sumaron artistas como Daft Punk, Usher, Nicki Minaj, Arcade Fire, Beyoncé, Rihanna, entre otros.
Ellos se unieron al proyecto para devolver a los artistas el poder sobre su música y regalías, que supuestamente les roban compañías como Spotify.
Pero Jay-Z no fue el único que pagó por TIDAL, que originalmente era una compañía sueca llamada Aspiro. Tres grandes firmas, Sony Music Entertainment, Universal Music Group y Warner Music Group, también firmaron como dueños minoritarios, junto con otros que permanecen en el anonimato, según LA Times.
Desde hace años, los artistas han optado por ganar sus millones de dólares de giras, mercancía y otros negocios publicitarios. Pero los servicios de streaming pagan directamente a las grandes compañías y quienes publican la música, que a su vez deciden el porcentaje que destinarán a los cantantes.
Si estos contratos no los benefician, es porque los mismos escritores, productores e ingenieros de audio no tienen derecho sobre sus creaciones.
Entre otras cosas, TIDAL quiere lograr su objetivo atrayendo usuarios al prometerles contenido exclusivo. Para demostrarlo, Beyoncé lanzó una canción como su regalo de aniversario para Jay-Z.
“Die with you” va acompañada de un video, grabado en casa por el mismo rapero. Sin embargo, el material se filtró rápidamente en la redes y está disponible para quien quiera verlo y escucharlo de manera gratuita.
Aunque el servicio seguramente evolucionará con el tiempo para ofrecer mejorías, ya tiene detractores. Entre ellos está la cantante Lilly Allen, quien le tuiteó a Jay-Z advirtiéndole que al llevarse a los nombres más grandes de la industria, la piratería volvería a fortalecerse, lastimando de paso a los artistas emergentes que luchan por hacerse escuchar.
All about the sound
La supuesta carta fuerte de TIDAL es su sonido de calidad, llamado lossless. Pero para apreciarlo, además de pagar el doble en la suscripción mensual –20 dólares– es necesario un equipo de audio especial.
Lossless se reproduce en 1,411 kbps, mientras que el estándar que usa Spotify, por ejemplo, es de 320 kbps. Un álbum en audio lossless utilizaría en promedio 400 MB o medio GB, lo que representa una buena parte de los datos móviles de un celular con prepago.
TIDAL llama a la diferencia “detalles de perfección”, mismos que se omiten para convertir un archivo en mp3. “AAC (el estándar de Spotify) suena Ok. Lossless suena perfecto”, afirman.
“El sonido importa. Especialmente cuando disfrutas música en equipo de audio de calidad”, explican en su página, sin embargo esto no es verdad para la mayoría de los usuarios que escuchan su música en audífonos como los del iPhone o cualquier Android.
Pero TIDAL cuenta con que la versión lossless sea deseable, ya que si un usuario paga la versión básica, se obtienen más o menos las mismas regalías que ofrece Spotify, y obtendrían el doble si se pagan los 20 dólares al mes.
Mientras tanto, Spotify no cede ante la presión. La compañía, también sueca, ofrece su servicio sin anuncios por 9.99 dólares al mes, pero sus 30 millones de canciones pueden ser escuchadas de manera gratuita aunque interrumpida.
Contra los 45 millones de usuarios que no pagan por el servicio, hay otros 15 millones que sí lo hacen, es decir uno de cada cuatro. Pero para Spotify, las cuentas básicas con anuncios son un gancho necesario.
“Aquí está el hecho clave: más del 80 por ciento de nuestros suscriptores comenzaron como usuarios que no pagaban”, declaró el jefe ejecutivo Daniel Ek el año pasado.
Por el momento, TIDAL no ofrece nada que Spotify no haga ya. Su discurso del “arte por el arte” se ve ensombrecido por las cuentas millonarias de los artistas que lo promueven y, a menos que retiren todo su material de otros servicios streaming, no hay algo que los usuarios no puedan ver o escuchar gratis en YouTube y demás.
¿Qué ofrece TIDAL?
> 25
millones de canciones
> 75
mil videos
> 9.99
dólares cuesta la suscripción básica
> 19.99
dólares cuesta la suscripción de alta calidad
> 31
países tienen disponible la plataforma
Jack White, deadmau5, Jay-Z y otros han “curado” playlists para los usuarios.
Puede ser usado por un equipo en línea y tres offline de manera simultánea.
Está disponible en más de 31 países: la mayor parte de Europa, además de Estados Unidos, Australia, Canadá, Hong Kong, Singapur y Sudáfrica.
Por ser una compañía basada en Suecia, pueden existir cargos bancarios internacionales.