Carrera por la sucesión en rectoría de la UNAM
Con la publicación de la convocatoria, la UNAM comienza el proceso para elegir a la persona titular de Rectoría para 2019-2023; hasta el momento, Enrique Graue ya hizo públicas sus intenciones de ampliar su gestión por cuatro años más
Luz RangelLa Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) comienza formalmente el proceso para elegir a la persona encargada de Rectoría para el periodo 2019- 2023: la Junta de Gobierno publicó la convocatoria el jueves 26 de septiembre.
Si bien este 2019 la Máxima Casa de Estudios celebra 90 años de autonomía, el cambio de gobierno y de partido político con la llegada de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a la Presidencia de la República influye en la sucesión del jefe nato de la universidad.
Enrique Graue, rector desde 2015, termina su gestión el 17 de noviembre de 2019. Pero ya confirmó sus intenciones de reelegirse, después de la ceremonia de investidura de doctores honoris causa.
“Con vehemencia y con toda intensidad decirles que sí voy a procurar llegar a la Rectoría por un segundo periodo. La siguiente semana estaré presentando ante la Junta de Gobierno el proyecto de trabajo y ponerlo a consideración de los universitarios”, respondió
La Junta de Gobierno deberá designar internamente a quien será el representante legal y presidente del Consejo Universitario por los siguientes cuatro años. Los 15 miembros académicos elegirán entre quienes se autoproclamen candidatos y los que postule la comunidad universitaria del 27 de septiembre al 31 de octubre para citarlos a comparecer a partir del 4 de noviembre.
Los integrantes tomarán en cuenta requisitos contemplados en el artículo 32 del Estatuto General, como ser mexicano por nacimiento, tener entre 35 y 70 años; poseer un grado universitario superior al bachillerato; tener cuando menos 10 años de docencia o investigación en la universidad y distinciones en su especialidad.
El aspirante que obtenga 10 de los 15 votos posibles podrá ocupar el cargo de rector de la UNAM. De hecho, el artículo 30 del Estatuto General de la UNAM establece que durará en su cargo cuatro años y podrá ser reelecto una vez, por lo que estará máximo ocho años al frente de la universidad.
Sin embargo, la Central de Estudiantes Universitarios (CEU) solicitó una reforma para democratizar el proceso con voto universal, directo y secreto.
“El procedimiento para designar al rector o rectora es excluyente. La Junta de Gobierno, conformada por 15 notables, impone su decisión a una comunidad conformada por 356 mil estudiantes, 41 mil académicos y 27 mil trabajadores”, señala el pronunciamiento presentado en conferencia de prensa en el Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos).
El CEU también pidió la disolución de la autoridad universitaria a la que desde 1945 le corresponde nombrar al rector, según el artículo 6 de la Ley Orgánica.
En cambio, Graue manifestó que tendría que haber consenso para modificarla.
“La legislación está perfecta. Siempre han existido periódicamente este tipo de manifestaciones y eventualmente si hubiera una modificación tendría que tener un gran consenso de la UNAM”, afirmó.
El acercamiento de la rectoría con AMLO
En caso de que Enrique Graue sea rector por un segundo y último cuatrienio, el grupo de Medicina mantendrá el control de la UNAM. Tanto José Narro como Juan Ramón de la Fuente estuvieron en el cargo dos periodos, de 1999 a 2007 y de 2007 a 2015, respectivamente.
Su posible reelección llega en una administración donde nueve secretarios de estado son egresados de la Máxima Casa de Estudios, además del presidente López Obrador.
Fue el 7 de julio de 2018 cuando el entonces virtual presidente electo informó que el rector Graue lo visitó para platicar sobre la importancia de la educación superior y reforzar el Plan Nacional de Desarrollo.
Luego del encuentro, el mandatario externó que no habrá rechazados de las universidades y el funcionario de la UNAM adelantó una próxima cita para hablar de las posturas de la institución sobre 10 temas prioritarios.
Así, el 22 de agosto, Graue le entregó el documento “Hacia la Consolidación y Desarrollo de Políticas Públicas en Ciencia, Tecnología e Innovación: Objetivo Estratégico para una Política de Estado 2018-2024”.
“Un gusto y un honor estar presente en el bello Palacio de Minería en el primer acto público entre el presidente electo y el rector de la Máxima Casa de Estudios, doctor Enrique Graue”, consignó en su cuenta de Twitter John Ackerman, esposo de la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval.
Versiones periodísticas señalan a Ackerman como un posible candidato de Morena para suceder a Graue. Además de que no cumple con la nacionalidad mexicana por nacimiento, el propio director del Programa Universitario de Estudios sobre Democracia, Justicia y Sociedad (PUEDJS) e investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ), desmintió que buscará la Rectoría de la UNAM. Incluso, respondió en su cuenta de Twitter al columnista Julio Astillero que apoya a Enrique Graue.
“Gracias por la generosa atención pero estos chismes los hemos desmentido múltiples veces (…) El rector Enrique Graue ha hecho un gran trabajo y cuenta con TODO MI APOYO para su reelección”, publicó.
Cuando estudiantes del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Azcapotzalco se manifestaban frente a la Torre de Rectoría y fueron agredidos por un presunto grupo porril, el presidente se reunió con Graue el 10 de septiembre.
“No prosperará ningún intento de desestabilización”, consignó López Obrador en sus redes.
Meses después, el 19 de diciembre de 2018, la UNAM respaldó la política de austeridad con un programa y la devolución de una parte de los 177 mil 895 mensuales que percibe como salario, según Transparencia. El apoyo mutuo es claro.
