2021: El año de la recuperación económica
Las expectativas para que la economía mexicana se fortalezca durante los próximos meses son altas, pero este avance estará sujeto a las medidas que implemente el gobierno y a que la vacuna contra el COVID-19 no falte en el país
Eduardo BuendiaEl pronóstico para la economía mexicana durante el 2021 es más alentador en contraste con el año que terminó, pero la recuperación será lenta por diversos factores internos y externos.
A nivel local la reactivación económica estará sujeta a las políticas que implemente el Gobierno federal para incentivar las inversiones privadas y con ello garantizar un verdadero Estado de derecho, el cual exigen los empresarios nacionales y extranjeros desde que el presidente López Obrador comenzó su administración.
Entre los factores externos que intervendrán para que México crezca este año se encuentran las variaciones del SARS-CoV-2 que se han detectado en Reino Unido, Sudáfrica y Nigeria.
La última actualización de las Perspectivas Económicas Mundiales que elabora el Fondo Monetario Internacional (FMI) muestra que el PIB de México crecerá 3.5 por ciento este año, desde su anterior estimación de 3.3 por ciento.
En su Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2020, la Cepal prevé que el PIB de México aumentará un 3.8 por ciento al cierre del 2021, debido principalmente a una recuperación gradual de la actividad económica.
Sin embargo, también advierte que una lenta disponibilidad de la vacuna contra el COVID-19 en el país ocasionaría un retroceso en la economía.
La comisión pronostica que la inflación se ubicará en 3.5 por ciento y la tasa de desempleo será de 4.8 por ciento.
Otro de los desafíos que debe enfrentar el Gobierno federal es recuperar la confianza de las calificadoras, pues a mediados del año pasado las principales firmas internacionales ajustaron a la baja la nota de México
Discusión pendiente para la recuperación
Dentro de la agenda económica y financiera en el país habrá un tema que volverá a cobrar relevancia por las implicaciones de su posible aprobación: el proyecto de reforma a la Ley del Banco de México (Banxico).
La iniciativa se promovió desde el bloque de Morena en el Senado con el objetivo de que los dólares que no puedan ser repatriados o colocados en el mercado local sean adquiridos por el banco central y pasen a formar parte de las reservas internacionales.
Ante el descontento de los banqueros, Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara alta, manifestó que el proyecto no vulnera la autonomía de Banxico e informó que la discusión se posponía hasta febrero.
Si no se llega a un acuerdo y el Legislativo avala la propuesta, diversos especialistas coinciden en que esto afectará a la recuperación, aún más, la nota crediticia de México y terminará por dañar la confianza de los inversionistas nacionales y extranjeros.
Configuración política
A cinco meses de que se celebren las elecciones intermedias en el país, los partidos políticos perfilan sus alianzas y precandidatos a los cargos federales y locales que estarán en juego en las urnas.
A nivel federal, el PAN, PRI y PRD registraron la coalición Va por México que concursará en 180 de los 300 distritos federales para la elección de los 500 legisladores que integran la Cámara de Diputados.
“La intención es ir coaligados en 180 distritos electorales federales. Hoy se registran 171, donde 57 serían para el PAN, 60 para el PRI y 54 para el PRD”, informó Acción Nacional en un comunicado difundido el 23 de diciembre, día en el que se registró la alianza.
Los tres partidos, que forman parte de la oposición a Morena y al Gobierno federal, tienen la intención de arrebatar la mayoría al bloque oficialista liderado por el partido guinda y han acusado al presidente de atacar a los integrantes de Va por México.
López Obrador está queriendo generar las condiciones para que haya una elección de Estado, orquestada directamente por él y su partido. Ese es el gran riesgo y por ello busca someter al juez en la materia, que es el Tribunal Electoral
Aunque en primera instancia se resistió a opinar sobre la coalición de los partidos opositores, el titular del Ejecutivo declaró durante su conferencia del 30 de diciembre que el PAN, PRI y PRD engañaron a la ciudadanía por hacerle creer que eran diferentes, cuando siempre han sido parte de un solo bloque que tomaba decisiones desde las cúpulas.
“Ese grupo oligarca utilizaba a un partido o a otro de acuerdo a lo que le convenía. Si un partido se desgastaba, recurría al otro para que se aparentara que había cambios. Era lo que se llama gatopardismo, eso que consiste en que las cosas en apariencia cambian para seguir igual; ese truco lo usaron durante mucho tiempo”, recalcó López Obrador.
Con respecto a las coaliciones, el Movimiento Regeneración Nacional apostará por la fórmula que lo llevó a ganar la Presidencia y las dos cámaras del Congreso de la Unión en la elección federal pasada, ya que contenderá junto al Partido del Trabajo y se integrará el Verde Ecologista (PVEM).
La unión entre Morena, el PT y el PVEM concursará en alrededor de 150 diputaciones federales.
“Vamos por la mayoría de los distritos, buscaremos alcanzar la mayoría en la Cámara de Diputados, para seguir impulsando iniciativas de ley cuyo principal objetivo sea beneficiar a todos los ciudadanos y sacar adelante los retos que enfrenta el país, por ello es que vamos unidos y sin confrontaciones”, expresó Karen Castrejón Trujillo, dirigente nacional del Verde, cuando se concretó la alianza con los otros dos institutos políticos.