El gobierno de la Ciudad de México ordenó este lunes retirar las placas conmemorativas donde aparezca el nombre del expresidente Gustavo Díaz Ordaz, quien hace 50 años autorizó la matanza de estudiantes en Tlatelolco.
La acción fue bien recibida por usuarios en redes sociales, sin embargo, otro sector reprobó la acción; no por defender el legado de Díaz Ordaz, sino por intentar borrar uno de los pasajes más oscuros en la historia del país.
El académico de la UNAM, Raúl Trejo Delarbre, lamentó el retiro de las placas, pues dijo la historia no debe modificarse, sino debatirse.
“El @GobCDMX manda retirar placas con el nombre de Gustavo Díaz Ordaz. Con el mismo espíritu Stalin mandaba borrar los rostros de sus adversarios en cuadros y fotografías. La historia no se modifica por decreto, ni tachando sus testimonios. La historia se explica y discute”, tuiteó.
El @GobCDMX manda retirar placas con el nombre de Gustavo Díaz Ordaz. Con el mismo espíritu Stalin mandaba borrar los rostros de sus adversarios en cuadros y fotografías.
La historia no se modifica por decreto, ni tachando sus testimonios. La historia se explica y discute. https://t.co/gk1lYA2vQX— Raúl Trejo Delarbre (@ciberfan) 1 de octubre de 2018
Mientras que el periodista Pascal Beltrán del Río dijo que no por retirar las placas, la matanza del 2 de octubre de 1968 dejará formar parte de la historia de México.
“La historia no es maniquea, de blancos y negros. Hay que respetarla. Los mexicanos tienen derecho a la memoria”, escribió.
No por quitar las placas con el nombre de Gustavo Díaz Ordaz de las estaciones del Metro dejará de ser un hecho histórico que el SCT fue construido en ese sexenio. La historia no es maniquea, de blancos y negros. Hay que respetarla. Los mexicanos tienen derecho a la memoria.
— Pascal BeltrandelRio (@beltrandelrio) 1 de octubre de 2018
Otros usuarios señalaron que el retiro de las placas atenta con el derecho a la memoria histórica; incluso sugirieron dejarlas, pero colocar debajo de éstas una explicación de quién fue Díaz Ordaz y cuál fue su participación en la matanza estudiantil.
El retiro de placas donde está inscrito el nombre de Gustavo Díaz Ordaz, es una buena oportunidad para retirar la amplísima nomenclatura de políticos mañosos que tienen nombre de calle.
— Arturo Rodríguez (@Arturo_Rdgz) 1 de octubre de 2018
Sin embargo, muchas personas pidieron que el nombre del expresidente no sólo sea retirado en la Ciudad de México, sino que se replique la acción en cualquier espacio público del país.
Aquí otras de las reacciones:
No quitas las placas. LE PONES OTRA ABAJO donde explicas quién diablos es Díaz Ordaz. No quitas las placas, @MetroCDMX. No se trata de borrar memoria, sino ampliarla con la perspectiva y relato de quienes fueron excluidos u oprimidos por ella. No quitas las placas. Urgh. https://t.co/mtRpjDpwc3
— Ignacio Lanzagorta (@Jicito) 1 de octubre de 2018
Tengo la peor opinión de Gustavo Díaz Ordaz, pero coincido contigo, Pascal. Es muy peligroso purificar la historia a gusto del poder en turno. ¿Quién será el próximo borrado? Saludos https://t.co/KiPLiYU1AR
— Fernando Belaunzarán (@ferbelaunzaran) 1 de octubre de 2018
Solo a alguien muy estúpido se le ocurre pensar que criticar el retiro de las placas que mencionan que Díaz Ordaz inauguró el Metro es una defensa de Díaz Ordaz y no de la memoria histórica.
Lo peor es que ese alguien muy entupido existe.
?— Héctor de Mauleón (@hdemauleon) 2 de octubre de 2018
