Actúan como burócratas
Por una parte hay falta de voluntad política y por otra hay deficiencias en la ley.
Lo cierto es que el IFE no se ha preocupado en los recientes procesos electorales por establecer mecanismos de prevención respecto a la compra y coacción del voto, asegura el exconsejero electoral Jaime Cárdenas Gracia.
Como parte de su política de educación cívica y de capacitación este organismo debería establecer un programa muy amplio para prevenir la compra y coacción del voto, asegura.
Predeterminado del sitioPor una parte hay falta de voluntad política y por otra hay deficiencias en la ley.
Lo cierto es que el IFE no se ha preocupado en los recientes procesos electorales por establecer mecanismos de prevención respecto a la compra y coacción del voto, asegura el exconsejero electoral Jaime Cárdenas Gracia.
Como parte de su política de educación cívica y de capacitación este organismo debería establecer un programa muy amplio para prevenir la compra y coacción del voto, asegura.
En el marco de la reciente polémica que suscitó la denuncia del PAN sobre la presunta red para condicionar el voto en Veracruz a favor del PRI, Leonardo Valdés Zurita aseguró que el IFE estará a disposición de las autoridades judiciales para colaborar y coadyuvar en las investigaciones que se lleven a cabo.
Parece “una burla”, dice Cárdenas. Valdés Zurita no da un análisis preciso de lo que debiera hacerse para prevenir la coacción del voto y blindar los programas sociales.
Con sus declaraciones deja de manifiesto que no existe un protocolo detallado para tal prevención.
Las atribuciones se limitan a su competencia “a posteriori”, cuando los hechos ya se consumaron y todo termina con el pase de bola a la Fiscalía Especializada de Delitos Electorales (Fepade).
“Y no se trata de eso, de ser reactivo y actuar cuando ya ocurrieron las cosas sino de ser proactivo.
“En la planeación de un programa consistente para prevenir la compra y coacción del voto, el IFE ha hecho muy poco. Contestan como burócratas y no como autoridad electoral”, asegura.
Normas escasas
El IFE en tiempos recientes ha decidido que todo lo relativo a la compra y coacción de voto es competencia de la Fepade.
Dado que en el título 24 del Código Penal Federal la compra y coacción se califican como delitos electorales suele pasarle el balón a esta fiscalía.
Sin embargo, sí tiene algún tipo de competencia en la ley. De acuerdo con el exdiputado petista ésta se refiere a conocer la coacción al voto.
No obstante, las normas que se refieren a ella en el Código Federal de Procedimientos Electorales (Cofipe) son escasas. Se cuenta solo con tres artículos y poco desarrollados:
Un párrafo del artículo 4o. que señala las características del voto (libre, secreto y universal) donde se menciona no puede haber presión o coacción del mismo.
El artículo 105 donde se menciona que el IFE debe salvaguardar la autenticidad del sufragio.
Y, en la parte de responsabilidades del Cofipe, se habla de que los servidores públicos pueden ser sancionados si coaccionan o presionan el voto.
Eso es todo lo que dice la ley electoral respecto al tema.
¿Qué hacer?
Se puede evitar que se sigan usando los programas sociales con fines electorales si…
1. Se celebran convenios con la ASF y las auditorías de las entidades federativas, la Sedesol y secretarías equivalentes que manejan programas sociales, para obligar a las autoridades a hacer públicos en periodos electorales los padrones de beneficiarios.
2. Se establece que los programas no se van a usar para comprar y coaccionar el voto.
3. Se solicita a la ASF elaborar un programa de auditoría para fiscalizar el destino de los programas sociales.
4. Se pide a las contralorías estatales y la del DF, así como a la Secretaría de la Función Públic,a establecer programas concomitantes para fiscalizar el gasto público de carácter social.
5. Se difunde en tiempos del Estado campañas sobre que el voto no se debe dar a cambio de programas sociales.
6. Se arman talleres de discusión sobre la importancia del voto libre.
7. Si el IFE propone reformar al Cofipe en la material de compra y coacción del voto para fortalecer sus competencias legales y poder intervenir de una manera mucho más clara.
8. Se da segumiento a las funciones de los vocales; es decir, se monitorea permanentemene a los funcionarios electorales.