Aeroméxico, volando bajo en la bancarrota
La compañía de transportación aérea necesita hacer reducción de personal, a más tardar el 31 de diciembre de este año, para cumplir con las cláusulas establecidas en su adhesión al proceso del capítulo 11 de la Ley de Bancarrota de Estados Unidos; fuentes al interior de la empresa, indican que los despidos están por iniciar el 6 de noviembre como liquidaciones voluntarias
Hidalgo NeiraEl caballero águila anda por los suelos. La crisis económica que azota mundialmente debido a la pandemia actual, está alcanzando repercusiones para empresas mexicanas que ya aquejaban problemas financieros desde 2018, tal como es el caso de Grupo Aeroméxico, que lleva aplicando un “plan de eficiencia”, para hacer recortes de personal y disminuir sus condiciones laborales en recontrataciones.
Ante la intención de “la compañía del Caballero Águila”, de adherirse al capítulo 11 de la ley de bancarrota de Estados Unidos, Reporte Índigo hizo públicos documentos al interior de Aeroméxico y el Sindicato de Trabajadores de la Industria Aeronáutica (STIA) que revelan parte del plan de liquidación a los sobrecargos, quienes pidieron que sea de manera voluntaria y se dio el plazo hasta el domingo 25 de octubre.
Según el documento liberado por el Tribunal de Bancarrota de Estados Unidos del distrito sur de Nueva York, solo Aeroméxico tendría que finiquitar a 616 auxiliares de vuelo en la compañía de una planta de dos mil 727 plazas y 150 sobrecargos de Aeroméxico Conect (AMC), cuya planilla completa es de 647.
Fuentes cuya identidad se reserva, del interior de Aeroméxico Connect (AMC), argumentan que después de ejercer presión a través de correos electrónicos, STIA se ha pronunciado con dos comunicados, uno empresarial y otro por parte del gremio, sin embargo, comunicaciones posteriores han sido a través de mensajes de redes sociales.
Desde iniciada la contingencia sanitaria, Grupo Aeroméxico, a través de los sindicatos, ha sugerido al personal operativo tomar permisos sin goce de sueldo sobre todo en el área de auxiliares de vuelo. A través de mensajes por WhatsApp, José Luis Martínez, encargado del departamento jurídico de STIA, respondió a las azafatas de AMC que si entran a la convocatoria de liquidaciones voluntarias los meses que se les deben a las empleadas quedarían en un limbo, sin una paga a futuro.
En una circular informativa por parte de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México (ASSA) fechada el 26 de octubre pasado, se expresa que a más tardar el 31 de diciembre del presente año se tiene que llegar a un acuerdo multianual que una vez pactado tendrá una revisión contractual hasta el 31 de mayo del 2025 para los auxiliares de vuelo de Aeroméxico, lo cual significa que durante este lustro ningún sobrecargo podrá aspirar a un incremento salarial.
“A mí lo que me llama mucho la atención, por ejemplo, es el planteamiento de la empresa de las jornadas, que son jornada ordinaria máxima asignable, jornada extraordinaria y todo lo que manejamos nosotros está muy por encima de lo que marca la Ley Federal del Trabajo, es una propuesta violatoria”, considera Ximena Garmendia, quien fue sobrecargo en Mexicana de Aviación y actualmente escribe de este tipo de incidentes en el blog Sobrecargo Informa.
STIA, comparsa de AMC
El Sindicato de Trabajadores de la Industria Aeronáutica (STIA) es considerado como un sindicato “blanco”, que va alineado a los intereses del empleador y no de los trabajadores, esto lo resalta “Bessie”, quien perteneció a Aeroméxico Connect (AMC) como sobrecargo por más de una década y también fue delegada sindical en el gremio mencionado.
Por su parte, Garmendia, quien fuera azafata en Mexicana de aviación, y que denuncia en su blog irregularidades al interior de Aerovías de México SA de CV, expresa que en STIA es bien sabido entre el gremio que incurre en malas prácticas con sus adscritos, siendo un sindicato que vela por los intereses de la compañía de viajes en lugar de su personal operativo.
“Los que conocemos de aviación sabemos de qué pié cojea el STIA, y no se caracteriza precisamente por ser un sindicato democrático, progresista, que está viendo en pro del beneficio de sus trabajadores, en este caso, sus sobrecargos”, agrega Garmendia.
Nepotismo con alas en Aeroméxico
Al analizar el organigrama de STIA, resalta inmediatamente que hay un apellido que resuena entre sus directivos, que alude a que ésta es una asociación familiar, y privilegiada solo para un núcleo reducido.
En documentos en poder de Reporte Índigo, se logra constatar que al 31 de diciembre del 2017 Rubén Romo Martínez era el secretario general del Comité Ejecutivo Nacional, después, a partir del 2018, él pasa a ser secretario general adjunto y se encuentran otras figuras como Jorge Romo Ceciliano, Patricia Romo Ceciliano y Rubén Romo Ceciliano, quienes son secretario general, secretaria del interior y secretario de trabajo y conflictos.
Tanto Garmendia, como el resto de fuentes consultadas por esta casa editorial, corroboran que Patricia, Rubén y Jorge Romo Ceciliano, son hijos de Rubén Romo Martínez, quien además figura como secretario general de otro gremio, el Sindicato Progresista Justo Sierra de Trabajadores de Servicios de la República Mexicana, presentando la misma dirección operativa que STIA, se observa en documentos en posesión de este medio informativo.