La Ciudad de México ya tiene quien la gobierne tras 18 días de estar acéfala.
El nuevo Jefe de Gobierno sustituto es José Ramón Amieva, quien reemplazará a Miguel Ángel Mancera luego de que este dejara el cargo para ir por una senaduría plurinominal por el PAN.
Aunque Mancera pidió licencia definitiva el 29 de marzo, esta surtió efecto el 30 de marzo, pero Amieva no había podido ser ratificado en el Pleno de la Asamblea Legislativa (ALDF) por falta de consensos entre las distintas bancadas.
Sin embargo, ayer la designación fue incluida en la orden del día de la sesión ordinaria en el apartado de los dictámenes y finalmente se llevó a cabo de manera unánime con 52 votos a favor de los distintos grupos parlamentarios.
Leonel Luna, presidente de la Comisión de Gobierno en la Asamblea Legislativa, señaló durante la lectura del dictamen que Amieva cumplía con los requisitos para el cargo y agradeció a las distintas bancadas para lograr el consenso.
Dijo que con la aprobación del dictamen se dio cumplimiento a la designación del Jefe de Gobierno, quien será el responsable de la administración pública de la Ciudad.
“Sobre todo, nuestro deseo de que al frente de este gobierno de la Ciudad de México, esta ciudad siga en el desarrollo que ha venido generando”, dijo.
César Cravioto, coordinador de la bancada de Morena en la ALDF, señaló que su voto a favor fue porque se necesita una cabeza y por el perfil de Amieva al haber trabajado en las últimas 3 administraciones.
“Siempre tuvimos comunicación fluida con él y demostró que puede realizar su trabajo sin tintes partidistas, así nos lo hizo saber en las múltiples asuntos que tratamos con él, creemos como grupo parlamentario que cumple con el perfil para cerrar con esta administración.
El morenista también demandó al nuevo gobierno de la Ciudad de México no interferir en el proceso electoral ni hacer uso de los trabajadores ni de los integrantes del gabinete para operar, así como apertura a los grupos de oposición.
“Su antecesor precisamente no fue alguien que tuvo esa vocación, nunca tuvo las puertas abiertas para dialogar con la oposición”, agregó.
Por su parte, el diputado Mauricio Toledo, a nombre del PRD, pidió que castigar a quienes estuvieron involucrados en autorizar permisos y licencias en escuelas y construcciones, ya sea por comisión u omisión y rechazó que el gobierno del ex Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, haya tenido las puertas cerradas.
En su discurso de protesta, el nuevo ejecutivo de gobierno de la Ciudad de México agradeció las distintas bancadas por su nombramiento y prometió concluir de manera eficiente el programa de gobierno iniciado por Miguel Ángel Mancera, a quien calificó como su amigo y jefe.
José Ramón dijo que dará seguimiento a temas como el de la seguridad pública.
Una nueva era
Por Laura islas
José Ramón Amieva comenzó con el pie derecho su era como Jefe de Gobierno.
Desde antes de su llegada al recinto de la Asamblea Legislativa (ALDF), decenas de personas acarreadas de diversos puntos de la ciudad lo esperaban y vitoreaban en las calles aledañas, donde incluso había hombres en motonetas.
“¡Amieva, amigo, el pueblo está contigo!”, era la consigna que practicaban en lo que llegaba.
Mientras tanto, personal de la ALDF custodiaba las entradas del inmueble y hacía cadenas humanas por el camino que recorrería. Para cruzar había que estar acreditado.
Luego de casi una hora y media después de la hora acordada, Amieva hizo acto de presencia, apareció arropado por diputados como Leonel Luna, quienes salieron exclusivamente a encontrarlo. Los gritos y las consignas se intensificaron, algunas banderas amarillas ondearon.
A pie de la escalera y antes de entrar, quien fuera el secretario de gobierno de Miguel Ángel Mancera volteó y saludó a las personas que habían acudido. Luego ingresó para esperar su designación como Jefe de Gobierno sustituto, la cual se retrasó más de dos semanas.
Ahí también la suerte le sonrió. Tuvo 52 votos a favor y ninguno en contra para ser ratificado como el nuevo ejecutivo de gobierno. Todos los grupos parlamentarios lo aprobaron, incluso Morena. César Cravioto, el coordinador de esa bancada, resaltó su trayectoria y le pidió no involucrarse en el proceso electoral. Hubo quien dijo que el morenista fue muy blando.
Entre aplausos y fotografías, con el respaldo de todos los legisladores de los distintos partidos políticos, finalmente Amieva llegó a la tribuna donde rindió protesta y dijo sus primeras palabras como Jefe de Gobierno.
Tras agradecer los consensos de las distintas bancadas, llamó amigo y jefe a Mancera, quien no estuvo presente. “Soy un hombre de instituciones, de leyes, de valores, pero sobre todo soy un hombre de corazón y de convicciones”, dijo casi al final de su discurso.
Luego recorrió cada uno de los curules y saludó a los diputados presentes de mano, mientras decenas de reporteros y cámaras lo seguían. Finalmente convocó a su primera conferencia de prensa con los integrantes del gabinete.
Ahí expresó que uno de los puntos prioritarios serían la seguridad pública y la procuración de justicia, por lo que han tenido reuniones con mandos y con los titulares de las 16 delegaciones.
“Quienes habitamos en esta ciudad no debemos de sentir miedo y la percepción va encaminada a que no se tenga temor, que se tenga conocimiento de que los cuerpos policiacos, de procuración de justicia están al tanto de la persona, su integridad, su patrimonio y sus actividades”, dijo.
A 7 meses del sismo del 19 de septiembre señaló como una prioridad la reconstrucción.