AMLO quiere ser juez y parte; Jesús Zambrano

Aunque alguna vez fueron compañeros de lucha, Jesús Zambrano califica al presidente López Obrador de ‘autoritario’ y advierte que el político tabasqueño buscará intervenir en las elecciones para beneficiar a su partido
Noemí Gutiérrez Noemí Gutiérrez Publicado el
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De cara a los comicios más grandes en la historia del país, el dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano Grijalva, es contundente y acusa al presidente Andrés Manuel López Obrador de querer ser juez y parte en las elecciones del próximo 6 de junio.

Advierte que el primer mandatario incumplirá su Acuerdo Nacional por la Democracia, que firmó con los gobernadores de todos los partidos, para no intervenir en la elección.

En entrevista con Reporte Índigo reprocha que a dicho acuerdo no se haya invitado a la autoridad electoral y que los mandatarios desconocieran el contenido de lo que firmaban.

Jesús Zambrano reveló que candidatos de sus partidos han renunciado a sus aspiraciones tras ser intimidados por la delincuencia organizada en algunas regiones de Tamaulipas, Guerrero, Michoacán y Chihuahua

“El centro de la estrategia de López Obrador está en ser él el juez y parte. Él se asume como árbitro, un árbitro que quiere jugar para beneficiar a su partido, para golpear a la oposición”, recalca.

En sus oficinas en la sede nacional del sol azteca, externa su desconfianza a la imparcialidad del tabasqueño porque días después de la firma del pacto descalificaba al Instituto Nacional Electoral (INE) por la decisión en la asignación de diputados de representación proporcional y por la pérdida de registro de las candidaturas de Félix Salgado Macedonio en Guerrero y Raúl Morón en Michoacán.

Aunque alguna vez fueron compañeros de lucha —en 2006 y 2012, el PRD respaldó los señalamientos del tabasqueño contra la autoridad electoral— Jesús Zambrano Grijalva cuestiona actualmente a López Obrador.

“Nosotros criticamos las actuaciones del INE porque desde nuestro punto de vista no actuaron conforme a lo que las disposiciones legales le exigían. Y el propio López Obrador cuestionó, incluso llegó a desconocer los resultados electorales de 2006 y 2012. Hoy que se cuestiona desde el poder, no desde la oposición, las decisiones y resoluciones del INE resultan que están apegadas a lo que dice la Constitución y la ley electoral”, argumenta.

“Destituir al INE, como están pretendiendo hacer, desaparecerlo, sería un golpe de Estado técnico, sería un golpe de muerte a la democracia en este momento y eso aquí y en todas partes se llama dictadura”, manifiesta.

Ante un cuadro de Benito Juárez, detalla las diferencias del político Andrés Manuel López Obrador de 2006 y 2012, al presidente de México.

“Un Andrés Manuel que acentuó sus signos y sus comportamientos autoritarios de desconocer a las instituciones. En 2006 gritó ‘al diablo las instituciones’ cuando decidió tomar el Zócalo y bloquear todo Reforma lo hizo por decisión personalísima de él sin consultar”, explica.

> ¿Lo ves con rasgos autoritarios?, se le pregunta.

-Absolutamente, dice

> La diferencia clara entre el Andrés Manuel opositor y Andrés Manuel en el gobierno, ¿cuál es?

-No tenía el poder en aquel entonces, hoy sí lo tiene, agrega

> ¿Cómo definirías a Andrés Manuel?

-Con tentaciones y actitudes claramente dictatoriales, de sentirse dueño del país, de pensar que puede manejar el presupuesto de la nación a su antojo, responde.

Jesús Zambrano Grijalva asegura que lucharán para que sea una contienda con piso parejo defendiendo a la autoridad electoral.

También considera que el INE debe emitir medidas precautorias para que las “mañaneras” se suspendan durante el tiempo que duran las campañas.

Suspenda también sus mañaneras presidente, aplíquese usted, lo que le gritó a Fox en el 2006 cuando se estaba metiendo indebidamente en el proceso electoral, ‘cállate ya chachalaca’ pues aplíquese usted presidente, deje las mañaneras
Jesús ZambranoPresidente del PRD

Advierte que los principales riesgos en la elección son que se quiera “torcer” la voluntad del electorado con los programas sociales a favor de un partido como lo hizo el PRI; “descarrilar” el proceso al tratar de destituir a los integrantes del Consejo General del INE y la violencia política para frenar a la oposición con agresiones letales o utilizando al Ministerio Público para acusarlos de cualquier delito.

Admite que candidatos de su partido han renunciado tras ser intimidados por la delincuencia organizada en algunas regiones de Tamaulipas, Guerrero, Michoacán y Chihuahua.

Lamenta que en este proceso han asesinado a sus compañeros como ocurrió el 30 de marzo en Apaseo El Grande, Guanajuato, cuando balearon a Alejandro Galicia y Juan Ignacio de la Cruz, candidato a regidor y delegado del comité estatal, respectivamente.

No tiene confianza de que sea eficaz el protocolo de protección que presentó el Gobierno federal para proteger a candidatos que estén en zonas de riesgo.

Jesús Zambrano busca nuevas alianzas

Zambrano justifica que en esta elección compitan con el PRI y el PAN en la coalición Va por México, “por el riesgo tan grande” al que se enfrentan, para defender las instituciones y la libertad.

Vamos a ganar la mayoría de la Cámara de Diputados, vamos a ganar la mayoría de las 15 gubernaturas que están en disputa y vamos a cambiar la coordinación de fuerzas
Jesús ZambranoPresidente del PRD

Reconoce que han perdido músculo, pero aclara que tienen cuadros para competir en la elección más grande en la historia del país.

El dos veces dirigente nacional del PRD asegura que el sol azteca se consolidará porque es un partido que regresó “a las grandes ligas”.

“La izquierda verdadera y democrática se llama P-R-D, así estamos resurgiendo y así nos vamos a fortalecer”, presume.

“Cuando estuve en la primera ocasión al frente del PRD éramos un PRD que teníamos alrededor del 20 por ciento de la votación nacional, ahora tenemos el 5.5 por ciento. Teníamos un PRD que contaba con algunas figuras carismáticas, hoy no las tenemos, pero tenemos decenas de miles de cuadros nacionales, estatales y municipales que traen la camiseta del PRD pegada a la piel”, comenta.

El exlegislador también reflexiona sobre la vida interna del partido. Rechaza que la corriente Nueva Izquierda —conocida como “los chuchos” de la que forma parte— fuera la responsable del declive.

Admite que del sol azteca salieron cuadros que ahora están en Morena, el partido a vencer en la elección.

“Aprendimos de nuestros errores, de no volver a consecuentar cosas que contravengan disposiciones estatutarias, decían, se acuñó la vieja frase de que ‘acuerdo político mata estatuto’, no hay que regresar a eso”, señala.

Finalmente, califica a Morena como un partido de Estado, sin ideologías, sin claridad programática en la institución y al servicio del presidente de la República.

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