Una vez más los centros nocturnos de la ciudad de Monterrey están bajo alerta de las autoridades por la disputa de venta de drogas, luego de que diversos actos violentos, en varios puntos de la capital de Nuevo León, provocaron la muerte de 12 personas la semana pasada.
Los bares, antros y cantinas de la zona conurbada de Nuevo León volvieron a ser escenario de matanzas la madrugada del 9 de julio, debido a que se reportaron al menos seis ataques de manera simultánea por comandos armados. Además de las personas que fueron asesinadas, también se reportaron nueve que resultaron lesionadas por los eventos violentos.
Versiones extraoficiales señalan que los asesinatos se debieron a una disputa entre los cárteles del Noreste y del Golfo, los cuales buscan mantener el control en los antros de la zona de Monterrey que a su vez fungen como puntos de venta de droga.
Por los hechos, las autoridades estatales no han informado de avances en las investigaciones y tampoco se han dado detalles de personas responsables detenidas.
Tras los ataques, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, pidió a los alcaldes a que se atrevan a cerrar los establecimientos problemáticos, en donde se han suscitado asesinatos.
Rodríguez Calderón también enfatizó en entrevista con medios de comunicación que se debe de reforzar el trabajo en conjunto de las autoridades estatales con las municpales a fin de que los lugares en los que se generan situaciones violentas sean clausurados.
Al respecto, el titular de la Secretaría de Seguridad de Nuevo León, Bernardo González, informó la semana pasada que el Comité de Alcoholes evaluará a todos los centros nocturnos, y que se comenzarán a retirar las licencias a aquellos lugares que no cumplan con las normas, entre las que se encuentran vender bebidas alcohólicas adulteradas o comerciarlas después del horario permitido.
Choque de versiones
Los ataques ocurridos en el área metropolitana de Nuevo León provocaron que tanto el secretario de Seguridad Pública (SSP) de Monterrey, Bernardo González, y el titular de la Fiscalía General de Justicia del estado, Gustavo Adolfo Guerrero, emitieran diferentes versiones de lo ocurrido hace dos fines de semana en los centros nocturnos de Monterrey y sus alrededores.
Por su parte, Bernardo González, titular de la Secretaría de Seguridad refirió que el tema de las muertes registradas por ataques de grupos armados en distintos antros de la ciudad fue originado por un presunto cobro de piso por parte de grupos de delincuencia organizada a los dueños de los establecimientos.
“Creemos que esto puede ser relacionado con supuesto cobro de piso (…) la reflexión es seguir coordinando los esfuerzos con los distintos operativos que se han tenido”, declaró González a un medio nacional.
Sin embargo, la versión de Bernardo González, fue contraria a la que informó el titular de la Fiscalía estatal, Gustavo Guerrero, quien afirmó que los actos violentos suscitados en los centros nocturnos tienen relación con una disputa por el control de puntos de venta de droga, aunque no descartó que también estuviera involucrado un tema de cobro de piso.
“Traemos varias líneas de investigación, como se ha mencionado el cobro de piso, pero también puede ser alguna situación de que quieran colocar alguna mercancía ilícita”, detalló Gustavo Guerrero en entrevista con un medio nacional.
Responde el crimen con narcomantas
Días después de los ataques en los antros de la zona conurbada nuevoleonesa, diversas narcomantas aparecieron colgadas en diferentes puntos de la urbe en las que grupos de la delincuencia organizada se deslindaron de ataques o del cobro de piso, hipótesis que había informado el titular de la SSP del estado, Bernardo González.
El 10 de julio diversos medios de comunicación informaron del hallazgo de una serie de narcomantas en las que el Cartel del Noreste se deslindó de los asesinatos registrados la madrugada del 9 de julio en Monterrey y municipios aledaños como Guadalupe y Juárez.
En los mensajes colocados en al menos tres puntos de la capital regiomontana, se acusó a una agente ministerial por el supuesto cobro de piso en diversos centros y hacerlo a nombre del dicho cartel.
Por su parte, Santiago Roel considera que la violencia en Nuevo León se recrudece, sobre todo en centros nocturnos, lo que hace recordar a la matanza en el Bar Sabino Gordo en 2011, donde se reportaron más de 20 personas muertas o al ataque en el Bar Matehuala en 2012, en el que resultaron 9 víctimas mortales.
“Se nos ha complicado estos grupos a nivel nacional y no se diga en Nuevo León, donde iempre está la tentación de una guerra, y se nos está subiendo el numero de ejecuciones en el país y en el estado no es la excepción”, concluye el director de Semáforo Delictivo.