Aunque aún no se superan los crímenes por homofobia y la discriminación contra lesbianas, gays, transgénero y travestis, en los último ocho años el Registro Civil de la Ciudad de México reporta 8 mil 639 matrimonios igualitarios, de cuales 4 mil 654 fueron entre hombre-hombre y 3 mil 985 entre mujer-mujer.
No obstante los años que lucharon para aterrizar legalmente su unión ante las autoridades, muchas de estas historias no tuvieron un final feliz, pues 442 matrimonios igualitarios decidieron disolver su unión a través del divorcio.
Al triunfo del matrimonio entre personas del mismo sexo le siguieron otros, pues en marzo de 2015 entró en vigor la nueva Ley de Identidad de Género con la cual miles de personas que se decían “atrapados” en un cuerpo y en un nombre equivocado podían cambiar su identidad sin necesidad de someterse a un peritaje físico que, en muchos casos, los humillaba.
A dos año y medio, la Consejería Jurídica y de Servicios Legales de la Ciudad de México ha llevado a cabo mil 923 cambios de identidad, en mayor proporción hombres que decidieron cambiarse a mujer con mil 294 casos, y otros 629 de mujeres que decidieron ser legalmente hombres.
La ley que se expidió fundamentalmente para los capitalinos que buscaban cambiar su identidad tuvo efectos en todo el país pues habitantes de la comunidad LGBTTTI vinieron desde Sinaloa, Guadalajara, Veracruz y Guerrero a realizar el trámite ante el Registro Civil.
En el nuevo documento que reciben se mantienen intactos los apellidos, nombres de padre y madre, así como lugar de nacimiento, mientras que el acta original se reserva en los archivos del Registro Civil como prueba inequívoca del individuo que fue registrado.
Entre cuentos y cartelones
La “revolución” de los nuevos modelos de familia obligó al Gobierno de la Ciudad de México a empujar estrategias para que la sociedad en conjunto, pero sobre todo los niños, pudieran familiarizarse con las nuevas parejas que ven en sus hogares, escuelas y en la calle.
A través de la Dirección de Igualdad y Diversidad Social, la Secretaría de Desarrollo Social (Sededo) explica a los pequeños el significado de tener papás homoparentales o abuelas que son lesbianas, y lo hace auxiliado en una colección de cinco cuentos infantiles ilustrados.
Así surge, por ejemplo, “Elena descubre que el amor tiene diferentes colores”, texto a partir del cual una pequeña de 9 años trata de entender cómo su hermana Natalia, siete años mayor que ella, tiene como novia a Paola, una compañera de su escuela.
“Ante todo esto me surgieron muchas dudas y le pregunté a Paola por qué quería a mi hermana”, se plantea el personaje.
“Ella me contestó que Natalia es generosa, inteligente, solidaria y amorosa. Yo creo que ellas tienen mucho en común, a ambas les gusta dibujar, disfrutan ir al cine y también a las dos les gusta mucho el helado, entre otras cosas”.
Otros cuentos que difunde la Sedeso son: “Julia y sus dos papás”, “Ernesto ya no tiene miedo a la oscuridad”, “La familia de Marina” y “Mi tío Carlos”; el objetivo central es que los menores entiendan la diversidad, acepten y amen a sus familias.
Otra de las estrategias para abrir camino en contra de la discriminación de la población LGBTTTI y reconocer las diferencias entre sus integrantes es una campaña de publicidad en el Sistema de Transporte Colectivo Metro, basada en la persona de “Alexis”, que por su físico igual se puede identificar con hombres o mujeres.
Alexis explica a través de carteles qué es un bisexual, un intersexual, gay, lesbiana o transexual.
Nueva vida
Cambio de identidad de género realizados en la Ciudad de México:
>> 2015
Mujer a hombre: 357
Hombre a mujer: 709
>> 2016
Mujer a hombre: 176
Hombre a mujer: 399
>> 2017
Mujer a hombre: 96
Hombre a mujer: 189
Total: 1,923
Fuente: Registro Civil. Consejería Jurídica y Servicios Legales
Del desfile a la violencia
Pero no todo es color de rosa, el director de Igualdad y Diversidad Social de la capital, Jesús Rodríguez, explica que muchas parejas de gays o lesbianas padecen de violencia física y sicológica por parte de sus compañeros.
De ahí la creación de una Red de Atención a la Violencia Familiar Especializada para la Población LGBTTTI, con oficina en la calle Lucas Alamán 122, en la colonia Obrera de la delegación Cuauhtémoc.
Ahí se atiende con diversos especialistas, como sicólogos y abogados, la problemática de esta población.
Actualmente este centro atiende a 120 personas que padecen discriminación y violencia.
Otro de los apoyos es el seguro contra la violencia que el gobierno otorgaba hasta hace un año exclusivamente a mujeres que viven en la capital. Sin embargo, a partir de enero de 2017 esta ayuda se ha entregado a 13 mujeres transgénero que reciben mil 500 pesos al mes mientras consiguen empleo, con un máximo de un año.
“En ocasiones atraviesan por una situación de vulnerabilidad muy alta al grado que no tienen dónde vivir o qué comer debido a la violencia o abandono de sus parejas, entonces se les apoya”, detalla Jesús Rodríguez.
Existe otra estrategia que a través de la organización Almas Cautivas y la Sedeso busca apoyar a mujeres trans y hombres gay que están en las cárceles de la capital, actualmente 50 personas en reclusión están respaldadas.
Luego de la marcha gay de este fin de semana en la que todo es baile, algarabía, atuendos y diversión, organizadores y autoridades coinciden que, aunque se ha avanzado, falta mucho por hacer.