Arde la Tierra Caliente

La tensión crece en Tierra Caliente. Integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación Guerrero (CETEG) tomaron ayer de forma indefinida las oficinas administrativas de la Secretaría de Educación del Estado.

Por la mañana, una treintena de maestros cerraron con cadenas y candados las puertas de acceso a las instalaciones de dicha dependencia pública. 

Los educadores opositores a la reforma educativa solicitaron una respuesta a su pliego petitorio y descartaron sentarse a negociar con el gobernador Ángel Aguirre Rivero. 

43
días han pasado desde 
que se inició el conflicto
"Los síntomas autoritarios de Enrique Peña Nieto reprimiendo al magisterio no son la solución, nuestro país ya no está para los manotazos presidencialistas”
Alejandro Sánchez 
CamachoSecretario general del PRD
Una treintena de maestros cerraron ayer con cadenas y candados el acceso a las instalaciones de la Secretaría del Educación guerrerense

La tensión crece en Tierra Caliente. Integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación Guerrero (CETEG) tomaron ayer de forma indefinida las oficinas administrativas de la Secretaría de Educación del Estado.

Por la mañana, una treintena de maestros cerraron con cadenas y candados las puertas de acceso a las instalaciones de dicha dependencia pública. 

Los educadores opositores a la reforma educativa solicitaron una respuesta a su pliego petitorio y descartaron sentarse a negociar con el gobernador Ángel Aguirre Rivero. 

Según el vocero de la CETEG, Walter Añorve, el Ejecutivo estatal ha instrumentado acciones de “hostigamiento” en su contra.

“Hoy tenemos un movimiento fuerte, plural y que viene del pueblo, eso debe quedar claro”, dijo Añorve, quien asegura que el gobierno estatal ha intentado minimizar su fuerza política. 

En la marcha del Movimiento Popular Guerrerense participarán hoy los maestros de la CETEG, miembros de las policías comunitarias, así como civiles que montan guardias en distintos puntos del Estado, entre otros.

Lo que aquí está en juego es un tema trascendental para el país, como es la educación, que “no se puede resolver en las rodillas”, indica Alejandro Sánchez Camacho.

El secretario general del PRD afirma que fue grave en el origen no incorporar a los padres de familia y profesores en la concepción de la reforma educativa.

“Ahí están los resultados”, agrega refiriéndose a los conflictos en Guerrero y Oaxaca.

Sánchez Camacho dice a Reporte Indigo que las actuales circunstancias exigen rescatar el diálogo y la construcción de acuerdos.

“Los síntomas autoritarios de Enrique Peña Nieto reprimiendo al magisterio no son la solución, nuestro país ya no está para los manotazos presidencialistas”.

Aunque reconoce que el movimiento magisterial es autonómo en sus tácticas de lucha, el perredista considera que no es recomendable afectar a terceros.

Rechazan el diálogo

Los cerca de 30 mil docentes que conforman la CETEG rechazaron hablar con el secretario de Educación federal, Emilio Chuayffet. 

Aseguran que buscan establecer un diálogo directo con la Secretaría de Gobernación y con diputados locales y federales, para que consideren discutir otra vez su propuesta de reforma a la ley de educación estatal. 

Ésta fue rechazada el 2 de abril cuando el Congreso local frenó la llamada contrarreforma educativa promovida por el Ejecutivo local en consenso con los maestros disidentes. 

Posiciones encontradas

La Secretaría y la presidencia del PRD no forman un bloque compacto en cuanto a cómo lidiar con el actual conflicto magisterial.

El lunes se informó que el 95 por ciento de las escuelas guerrerenses reiniciaron sus actividades académicas. 

Al 5 por ciento restante, cerca de 59 escuelas, la administración estatal les pidió que se reincorporaran a sus labores. 

Se exhortó a que los maestros eviten que se inicien procesos administrativos que pongan en riesgo sus contratos. 

Los opositores respondieron con su retorno al campamento de disidentes, ubicado en la colonia Burócratas en Chilpancingo. 

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