A casi un año del sismo del 19 de septiembre, la Iglesia mexicana recordó que aún hay pérdidas materiales en los estados afectados que al parecer quedaron en el olvido, por lo que pidió a los interesados hacer algo al respecto.
“Muchas de las comunidades periféricas y con mayores necesidades, tanto de Puebla y Oaxaca, como de Morelos, Chiapas, Tabasco y la Ciudad de México, muestran un escenario que sigue siendo una fotografía de aquellos días”.
“Tal parece que en esas zonas el terremoto se hubiera registrado ayer y continuaran la fase de emergencia”, expuso en la editorial de este domingo publicada en el Sistema de Información de la Arquidiócesis.
En ese sentido, la Arquidiócesis llamó al gobierno, a las organizaciones sociales y a la sociedad en general a seguir trabajando por la reconstrucción.
“Los sismos de septiembre se seguirán sintiendo mientras no se levante el último escombro, mientras siga una sola familia viviendo en un campamento improvisado, mientras haya un grupo de niños tomando clases bajo árboles o carpas, y mientras continúe habiendo hambre o escasez de agua en la comunidad más alejada”, afirmó.
El terremoto de 7.1 grados cobró la vida de al menos 369 personas, dejó miles de damnificados y daños materiales elevados en edificios públicos, así como en inmuebles comerciales y particulares.
El sismo dejó sólo en la Ciudad de México un total de cinco mil 765 viviendas dañadas, de las cuales dos mil 273, casi el 40 por ciento sufrieron pérdida total. El resto, tres mil 492, sufrieron daños parciales.
En total, los dos temblores dejaron 180 mil 731 viviendas con daños en ocho estados, de las cuales 50 mil 610 registraron pérdida total, un 28 por ciento; mientras que 127 mil 497 casas tuvieron daños parciales, y se realizaron dos mil 642 reubicaciones
