La violencia del narcotráfico está invadiendo las aulas de las escuelas de Jalisco.
Y es que el caso de los dos menores desaparecidos el 21 de junio pasado en la Plaza Ciudadela en Zapopan, Jalisco, esconde un móvil que demuestra la retórica violenta que está tomando el acoso escolar.
La información apunta a que ambos fueron asesinados por “molestar” a un joven, hijo del capo José Ángel Carrasco Coronel “El Changel”, sobrino de Ignacio “Nacho” Coronel.
Ayer, elementos de la Fiscalía General del Estado de Jalisco (FGE) localizaron en el predio Las Cebadas, del bosque La Primavera, los cuerpos de Andrés Barba Olivas y Luis Antonio Ortiz Guerra.
Desde su desaparición se había iniciado una intensa búsqueda de parte de sus familiares en toda la ciudad, con mantas, volantes y por las redes sociales en Internet.
El joven “Isaac” de 17 años (se reserva el nombre real por tratarse de un menor) está detenido, pues él fue el que se reunió con Barba Olivas y Ortiz Guerra en la plaza, donde otro joven de nombre Andrés Vega (prófugo) los enganchó con el pretexto de que los ayudaría a formar parte de un grupo criminal.
En rueda de prensa realizada ayer, el fiscal general del estado Luis Carlos Nájera Gutiérrez de Velasco confirmó el resultado de las investigaciones que iniciaron el sábado 29 de junio en el bosque La Primavera.
“Este joven que hoy tenemos detenido nos dicen que maltrataron y se burlaron de un hijo de José Ángel Carrasco Coronel conocido como ‘El Changel’, el cual está detenido en la Ciudad de México, eran compañeros de este joven; y que por eso tanto Andrés Vega como uno de los hijos de este delincuente, maquinaron y elaboraron todo este cuento para jalar tanto a Luis como Andrés a la plaza comercial y sabemos que con estos engaños se lleva a este lugar y en el lugar conocido como La Cebada, en uno de los domicilios, son privados de la vida”, indicó el fiscal del estado.
