Geovanna Angulo Ramos fue localizada sin vida en un barranco en Santiago Suchilquitongo, Valle de Etla. La joven, perteneciente a la comunidad transexual, desapareció desde el 25 de noviembre.
Geovanna, de 27 años, fue vista por última vez en San Agustín Etla y localizada el 30 de noviembre, luego de que vecinos reportaran un cuerpo al fondo de un barranco en un paraje conocido como El Campanario.
Policías comunitarios acudieron al lugar, donde encontraron un cadáver en estado de putrefacción avanzado y con huellas hemáticas provocadas por golpes.
Tras el hallazgo, dieron aviso a la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO), quien determinó que las características correspondían a las de Geovanna.
Comunidad LGBT+ protesta por el transfeminicidio
Familiares, amigos, conocidos y miembros de la comunidad transexual condenaron el transfeminicidio de Geovanna.
Melissa Mijangos Boijseauneau, abogada perteneciente a la comunidad, envió ayer una misiva al fiscal Rubén Vasconcelos Méndez, donde exige el esclarecimiento del asesinato y se castigue a los responsables.
“Considero lamentable este hecho, un acto más, resultado de la transfobia que permea aún en la sociedad, condeno categóricamente este terrible acto y pido se castigue a quien resulte responsable”.
Aunque las autoridades aún no revelan el móvil del delito, la abogada asegura que el asesinato e Geovanna se trata de un crimen de género:
“Tengo la certeza de que en conjunto sociedad y autoridad, se unirán en un acto de solidaridad, al llamado de justicia, que garantice una vida libre de violencia, basada en el respeto a nuestra preferencia u orientación sexual, pensamiento e ideología”.
Ella era Geovanna
Geovis, como le decían sus seres queridos, era originaria de la comunidad de San Agustín, Etla, Oaxaca y se dedicaba a la danza.
La mujer participó en varios certámenes de belleza y danza en Oaxaca, donde resultó ganadora en concursos como “Miss Simpatía 2019” y fue finalista del “Global Universe México 2019”.
“Me encanta el baile. Es a lo que siempre me he dedicado, es lo que mejor hago. Trabajo con niños, nunca ha sido problema mi transición o la manera en cómo me acerco ante ellos”, compartió en 2016 para un documental del Centro de las Artes de San Agustín.
Geovanna comenzó a bailar en el grupo de danza de su comunidad desde los siete años. En ese momento supo que, aunque en el espejo veía a un varón, por dentro sabía que era una niña.
A nivel mundial, México es el segundo país con más asesinatos de personas trans, de acuerdo con la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex para América Latina y el Caribe (ILGA-LAC).
Del 1 de enero al 30 de junio de 2020, se reportaron 69 crímenes de odio donde la orientación sexual, identidad o expresión de género fueron utilizados como pretexto para la vulneración de derechos, según el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio LGBT+.
Del total de las víctimas reportadas por el Observatorio, 78 por ciento corresponden a mujeres trans (travestis, transexuales y trasngéneros); seguidas por varones gays, mujeres lesbianas y finalmente varones trans.