Atentado contra bienestar animal en Nuevo León
Perros rescatados por el secretario de salud de Juárez, Teodoro Elizondo, fueron trasladados al Centro de Control Canino y Felino del municipio, donde su encargado, Reynaldo Siller Rojas, dijo que serían sacrificados
Jesús PadillaLa Secretaría de Salud, a cargo de Manuel de la O Cavazos, no procura el bienestar animal en Nuevo León. En esta dependencia del gabinete de Jaime Rodríguez no sólo hay denuncias por maltrato en Centros de Control Canino y Felino a su cargo, también existe la amenaza de sacrificar a varios perros.
El 30 noviembre, Teodoro Elizondo, secretario de Salud del Municipio de Juárez, salvó a 31 canes que estaban en malas condiciones en un domicilio, localizado sobre la calle Tamuín, en la colonia Terranova. Los animales fueron trasladados al Centro de Control Canino y Felino de Juárez, mientras conseguían un hogar temporal o dueños para entregarlos en adopción.
Pero tres días después, el encargado de este centro, Reynaldo Siller Rojas, lanzó un ultimátum a las autoridades municipales. Dijo que si no se encontraba un refugio los perros serían sacrificados.
En ese momento, Iris Flores, de la organización Funda Dog, junto con el alcalde de Juárez, Everardo Benavides, lograron acomodar de manera temporal a 21 de los 31 animales. No obstante, está vigente la amenaza contra 10 perros que podrían ser sacrificados, menciona en entrevista con Reporte Índigo, la diputada del Partido Verde Ecologista de México
En ese momento, Iris Flores, de la organización Funda Dog, junto con el alcalde de Juárez, Everardo Benavides, lograron acomodar de manera temporal a 21 de los 31 animales. No obstante, está vigente la amenaza contra 10 perros que podrían ser sacrificados, menciona en entrevista con Reporte Índigo, la diputada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Ivonne Bustos Paredes.
“La autoridad de Salud, a través del doctor Siller, los iba a dormir porque no los podía tener ahí. Ante la solicitud del alcalde y de la fundación, la autoridad se mantuvo en que los iban a dormir, con lo cual se consiguió un hogar temporal a las mascotas pero con la amenaza de que si no les encuentran un hogar definitivo y por alguna razón regresan al centro los van a sacrificar.
Esta no ha sido la única vez que la Secretaría de Salud muestra una indiferencia hacia los animales. En febrero de este año, un perro de nombre “Marino” iba a ser sacrificado por personal de esta dependencia estatal pero la legisladora intervino en ese proceso y logró que el animal regresara con sus dueños, quienes residen en Escobedo.
Pero el pasado mes de octubre, personal del Centro de Control Canino y Felino en el municipio de García fue exhibido a través de redes sociales por maltrato animal al tener sin agua, comida y encerrados en jaulas a varios perros. Esto viola la Ley de Protección y Bienestar Animal para la Sustentabilidad del Estado de Nuevo León.
Este centro, junto con los otros ubicados en diferentes municipios, debería de contar con un área de estancia adecuada para permitir el libre movimiento de los animales, así lo dicta el artículo 16 de esta Ley. Además, la diputada alertó que la Secretaría de Salud no ha cumplido este año con la esterilización de perros y gatos.
La obligación del Centro de Control en el bienestar animal
El Centro de Control Canino y Felino de la Secretaría de Salud en el municipio de Juárez tiene como obligación velar por el bienestar de los animales, más no sacrificarlos.
En enero de este año, los diputados del Congreso reformaron el artículo 74 de la Ley de Protección y Bienestar Animal para Sustentabilidad de Nuevo León, que establece que estos centros tendrían que alojar a las mascotas, ofrecer un buen trato y alimentarlos.
La única manera en que un perro o gato puede ser sacrificado es por el sufrimiento que le cause un accidente, enfermedad, incapacidad física o trastornos seniles, más no porque no encuentra un hogar este animal bajo resguardo.
“Los animales sin reporte de extravío serán alojados en el Centro de Control Canino y Felino por un plazo de hasta 10 días naturales. En el caso de los animales reportados como extraviados a la Secretaría, el lapso máximo de estancia dentro del Centro de Control Canino y Felino será de 20 días naturales a partir de la fecha de su ingreso al Centro para que su propietario, poseedor o encargado pase a recogerlos”, menciona la ley.
El artículo 74 también deja claro que bajo ninguna circunstancia podrá sacrificarse algún animal.
“Al cumplir el lapso, la disposición de estos animales se realizará conforme lo establecido en esta Ley y el marco jurídico aplicable, pero bajo ninguna circunstancia podrá sacrificarse al animal, salvo que se trate del caso estipulado en la fracción XLVI del artículo 3 de esta Ley”, dice el marco legal.
Esta fracción establece el sacrificio en razón de estar comprometido su bienestar por el sufrimiento que le cause un accidente, enfermedad, incapacidad física o trastornos seniles.