Ante la inexistencia de registros confiables sobre la cantidad de cuerpos que están inhumados en las fosas comunes del país, la Comisión Nacional de Búsqueda diagnosticó el estado que guardan estos espacios en seis cementerios, encontrando más de 5 mil 500 cadáveres con identidad desconocida, y más de 52 mil clasificados como conocidos pero no reclamados.
Precisamente este 17 de marzo de 2022, el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez, calificaba como “una omisión legal muy grave” por parte de las autoridades locales, la carencia de censos o información detallada sobre los cuerpos que están sepultados en las fosas comunes.
Este descontrol que persiste sobre la operación de las fosas comunes, explicaba el subsecretario federal aquel día, representa un obstáculo para las labores de búsqueda de las 98 mil 364 personas desaparecidas y no localizadas, que arroja actualmente el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas.
Ya en su “Reporte Semestral. 1 de enero al 30 junio, 2021”, la Subsecretaría de Encinas Rodríguez había informado que la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), en coordinación con las Comisiones Locales de Búsqueda (CLB), había comenzado a sistematizar los registros de inhumaciones en fosas comunes municipales, para conformar una base de datos homologada nacional.
Alejandro Encinas explicó que la falta de registro de las fosas comunes representa un obstáculo para las labores de búsqueda de las 98 mil 364 personas desaparecidas y no localizadas
En aquel reporte, la Subsecretaría expuso que la Comisión Nacional de Búsqueda había realizado los diagnósticos sobre el estado que guardan los registros y las fosas comunes de seis panteones, ubicados en la Ciudad de México, Sonora y Puebla, aunque no brindaba mayores detalles al respecto.
Sin embargo, mediante un informe obtenido vía transparencia (folio 0401600018421), la Comisión Nacional de Búsqueda precisó que los cementerios cuyas fosas comunes fueron estudiadas, son los siguientes: el Panteón Sahuaro, en Hermosillo, Sonora; el Panteón Municipal Norte, también en Hermosillo, Sonora; el Panteón Héroes Civiles de Guaymas, localizado en Guaymas, Sonora.
Así como el Panteón Municipal de Puebla, ubicado en Puebla, Puebla; el Panteón Municipal de Teziutlán, localizado en Teziutlán, en el estado de Puebla; y finalmente, el Panteón Civil de Dolores, localizado en la Ciudad de México.
Fue justamente en las fosas comunes de estos panteones, donde la Comisión Nacional de Búsqueda documentó la inhumación de 5 mil 592 cuerpos con identidad desconocida, y de otros 52 mil 724 que están clasificados como conocidos pero no reclamados.
Base de datos nacional de fosas comunes
En su respuesta, la CNB brinda detalles sobre el proceso que está siguiendo para conformar una base de datos nacional sobre las fosas comunes.
“El Módulo de Fosas Comunes (MFC) (así se llama la base de datos) está en constante alimentación, tanto mediante captura de datos extraídos de documentación física como mediante migración (…) de datos contenidos en bases de datos existentes, en los casos en que los panteones disponen de ellas”.
También expuso algunas de las dificultades que está enfrentando para poder crear este registro nacional.
“La CNB recopila y homologa la información de la que disponen los panteones (…), que, también, varía de panteón en panteón e incluso entre épocas distintas en un mismo panteón. El MFC especifica cuando la CNB cuenta con el respaldo documental y cuando no (por ejemplo, porque el panteón proporcionó la información rellenando una matriz, sin que la documentación de soporte haya sido exhibida…). En ocasiones la información de la que dispone el panteón sobre una inhumación está incompleta o es contradictoria. Por ejemplo, puede haber variaciones en la escritura del nombre de la persona inhumada”.
De igual forma, la CNB expuso los pasos que está siguiendo para elaborar los diagnósticos sobre las fosas comunes.
“La metodología del diagnóstico, que se realiza in situ, incluye entrevistas con sepultureros, administradores, inspección superficial de la fosa común y diagnóstico del registro maestro y del archivo. La metodología no incluye el empleo de técnicas invasivas en la fosa común, por lo que la información al respecto de las características no superficiales de las inhumaciones es la que las y los empleados proporcionan a la CNB durante las entrevistas”.
La metodología de la CNB Incluye entrevistas con sepultureros, administradores, inspección de la fosa y diagnóstico del archivo
Exhumaciones y búsquedas
Estos registros que ha comenzado a generar la Comisión Nacional de Búsqueda sobre las fosas comunes, representan un insumo necesario para la implementación del Programa Nacional de Exhumaciones e Identificación Forense, que debe elaborar la Fiscalía General de la República (FGR).
La Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas, señala en su Artículo 135, fracción IV: “La elaboración del Programa Nacional de Exhumaciones e Identificación Forense, a cargo de la Fiscalía, deberá contener (…) El listado de todos los panteones y cementerios del país, así como información sobre el número de cuerpos sin identificar inhumados en cada uno y las circunstancias y contextos correspondientes”.
Por eso, este 17 de marzo, Encinas Rodríguez dijo: “¿Cuáles son los principales problemas que ya estamos atendiendo en materia de rezago forense? Pues en primer lugar tener certeza del número de cuerpos no identificados que existen hoy en los servicios forenses o en las fosas comunes de los panteones del país”.
“No existe un censo sobre los cuerpos no identificados ni tampoco sobre los identificados y no reclamados en las fosas comunes. Esta es una omisión legal muy grave que involucra a distintos ámbitos de autoridades, desde las fiscalías, secretarías de salud o tribunales, hasta municipios por el manejo de las fosas comunes en los cementerios”
En su informe “La Crisis Forense en México: más de 52,000 personas sin identificar”, el Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México, señala que: “existen por lo menos 52 mil 004 personas fallecidas no identificadas en México”, y que: “En las fosas comunes hay 31 mil 488 personas fallecidas sin identificar (el 60 por ciento)”.
