Una manifestación convocada ayer en Guerrero para protestar por la desaparición de los 43 estudiantes normalistas vivió un enfrentamiento violento con policías estatales y el bloqueo del Aeropuerto Internacional de Acapulco.
La protesta fue encabezada por maestros del CETEG, normalistas, organizaciones a la Asamblea Nacional Popular y familiares de los estudiantes normalistas desaparecidos hace más de 40 días en la ciudad de Iguala.
El bloqueo de la terminal aérea del puerto de Guerrero se prolongó durante más de tres horas, tiempo en que los manifestantes realizaron un mitin para exigir la aparición con vida de los normalistas.
Felipe de la Cruz, padre de uno de los estudiantes desaparecidos, explicó que se acordó con los directivos del aeropuerto una toma pacífica de la terminal aérea durante tres horas como un acto de protesta por la tragedia de Iguala.
Los manifestantes bloquearon los accesos al aeropuerto para impedir que viajeros y turistas pudieran tomar sus vuelos y que los que llegaban no pudieran salir de las instalaciones.
También realizaron pintas en las instalaciones del aeropuerto de Acapulco en contra del gobierno federal.
En la marcha previa hacia al bloqueo del aeropuerto, los manifestantes chocaron con elementos de la Policía Estatal de Guerrero que intentaron impedir su paso por el Bulevar de las Naciones hacia la terminal aérea.
En el enfrentamiento entre los estudiantes y los elementos antimotines resultaron heridos una docena de policías y también manifestantes.
Algunos de los manifestantes iban encapuchados y armados con palos y bombas molotov, que lanzaron en contra de los granaderos.
La Policía Federal tuvo que intervenir y montó un filtro sobre el Bulevar de las Naciones para impedir que los estudiantes llegaran al aeropuerto, pero tras un diálogo con ellos, se acordó una protesta pacífica.
El bloqueo de la terminal aérea terminó después de las 3 de la tarde sin mayores incidentes.
La empresa OMA, que opera el aeropuerto, informó que por el bloqueo hubo cuatro vuelos cancelados por las aerolíneas Aeroméxico e Interjet.
El gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, pidió ayer a los manifestantes no llevar a cabo actos violentos en sus protestas en este estado porque destruyen la economía del puerto.
Ortega aseguró que las últimas protestas están dañando la imagen turística del puerto de Acapulco y la vida económica de este centro turístico.
“Entiendo el sufrimiento que están viviendo los familiares de los jóvenes desaparecidos, pero no se vale que al amparo de este dolor se realicen acciones de violencia y vandalismo. Eso no ayuda a Guerrero”, declaró Ortega Martínez en conferencia de prensa.
El día ayer en la Ciudad de México, en la terminal 2 del Aeropuerto capitalino, también se llevó a cabo una manifestación por la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa.