A la vez que el Instituto Mexicano para la Competitividad puso a Nuevo León en primer lugar, el Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE) bajó a la ciudad al séptimo sitio.
Acostumbrados los regios a los primeros lugares de competitividad, ahora el CIDE indica que la capital regia está por debajo de ciudades como San Luis Potosí y la vecina Saltillo, Coahuila.
Y deja claro que la razón de esta caída de Monterrey es debido fundamentalmente a la falta de seguridad, a la violencia que existe en cuanto al crimen organizado.
Incluso, el estudio del CIDE hace referencia a la Ciudad de México, que históricamente tenía problemas de inseguridad y donde uno de los delitos de mayor impacto, el secuestro, era una actividad ilícita muy frecuente.
Pero que hoy tiene un clima de seguridad que está por encima de la capital regia.
Por ello es que mientras la Ciudad de México avanzó hasta el primer lugar en sus factores de competitividad, Monterrey cayó hasta el séptimo lugar.
Esto, cuando apenas hace tres semanas el gobernador Rodrigo Medina estuvo difundiendo el primer lugar que el Instituto Mexicano para la Competitividad había otorgado a Nuevo León.
Carlos Arce García, coordinador de Proyectos Especiales del CIDE, presentó una conferencia en la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
Al concluir, dijo frente a los medios de comunicación que para la elaboración del estudio analizaron 56 variables, entre ellas, Monterrey cae en sus rubros institucional y urbano, principalmente.
Pero la caída está fundamentada porque para el análisis ahora el CIDE incluyó el factor seguridad, que en otros años no había sido parte del estudio, así que por ello la capital regia resultó muy afectada en su estatus.
“Combina con dos situaciones, con la situación de control de delincuencia en la ciudad de México, con el empeoramiento en la parte de delincuencia de Monterrey”, dijo Arce García.
Monterrey está por debajo de Guadalajara en la parte institucional y de la Ciudad de México económica.
El CIDE realiza este índice desde hace nueve años.
Arce García dijo que a diferencia de otros estudios similares, en éste no hay datos sobre la percepción, sino de datos duros.
