Al viejo estilo del Partido Revolucionario Institucional, este lunes por la noche se destapó a quien será el precandidato, único o de unidad, a la gubernatura del estado de Jalisco. Aunque resultó ser una de las cartas menos posicionadas en el tema, bajo el pronóstico de que los ungidos serían Eduardo Almaguer Ramírez, con el respaldo del grupo local, o Arturo Zamora, quien fue apuntado como un enviado de la dirigencia central.
A través de su cuenta personal en Twitter, el dirigente nacional del tricolor, Enrique Ochoa Reza, publicó una fotografía acompañado de un mensaje en el cual dejó claro que quien será la carta del partido para hacerle frente a Enrique Alfaro, el mejor posicionado a la gubernatura, será el exsecretario de Desarrollo e Integración Social, Miguel Castro Reynoso.
Castro Reynoso agradeció, también vía redes sociales, el apoyo de su partido y expresó:
No hizo falta la vieja usanza de desviar la atención y mantener al “tapado” fuera de los reflectores. Hasta hace unos días, el pasado fin de semana, el dirigente estatal del PRI Jalisco, Héctor Pizano Ramos, señaló públicamente que la contienda local para el candidato al gobierno se encontraba cerrada en las figuras de Arturo Zamora y Eduardo Almaguer Ramírez, este último, los primeros días de este mes todavía sostenía que su carrera era ir por la gubernatura.
“Su servidor no va a participar en el proceso de la candidatura a Gobierno del Estado y esperaré la resolución de quienes hasta este momento aspiran y pudieran ser los abanderados, como es el caso del maestro Arturo Zamora y Eduardo Almaguer”, expresó Pizano a medios locales.
Su apuesta era Guadalajara
La sorpresiva declaración de que Miguel Castro será el gallo del tricolor viene matizado, pues aunque no aparecía como el mejor posicionado, en las últimas semanas dejó abierta la puerta a una candidatura al gobierno.
“No me descarten en el tema de la candidatura al Gobierno de Jalisco”, solicitó el 21 de noviembre pasado, tras pedir licencia a su cargo en la Sedis.
Todavía el pasado 28 de noviembre, Castro Reynoso dijo en una estación de radio local que en la perspectiva del 2018 se sentía preparado para ocupar el cargo de alcalde en Guadalajara.
“Estoy preparado para lo que venga; tengo la total intención de ser candidato a la Presidencia Municipal de Guadalajara –y para más– si mi partido me lo permite, de lo contrario sabré trabajar en equipo en cualquier frente que se me requiera dentro del Revolucionario Institucional”, declaró Miguel Castro en el Canal 58 de AM, una estación local.
Ese mismo día había tomado protesta en un cargo difuso, pero relevante para la cúpula local. Fue designado como secretario adjunto de la presidencia estatal del PRI Jalisco, donde la misma dirigencia expresó su apoyo para que el exsecretario aprovechara su capacidad y experiencia en los temas sociales.
El camino no parece sencillo, sobre todo cuando los análisis locales hablan de que el panorama para el PRI en la entidad ya está cantado para el líder factico del partido Movimiento Ciudadano y su tácita negociación con el tricolor para allanarle el camino en busca de que la alianza evite la persecución de la actual administración.
Lo que sí queda claro es que la unidad, al menos en el discurso, quedó asentada. Ya que luego del anuncio Arturo Zamora envió un mensaje vía redes para dar su total respaldo al extitular de la Sedis.
Además de que la publicación de Ochoa Reza en Twitter incluye una fotografía en donde aparecen los principales contendientes al lado de Castro Reynoso, es decir, en la fotografía se impone el respaldo de Almaguer, Zamora y Pizano, como dirigente local.
Reto gris y complicado
El panorama no es sencillo, como señalan diversos análisis locales que le pronostican un difícil camino a Miguel Castro Reynoso como candidato del tricolor al gobierno.
Así lo considera, por ejemplo, el analista Julio César Hernández en su blog de Marcatextos, con su columna “El futuro político de Miguel Castro ya estaba escrito”, publicada el mismo lunes por la noche.
“No será tarea fácil la de Castro el enfrentarse a quien las encuestas colocan como el favorito para ganar las elecciones en 2018, Enrique Alfaro Ramírez, pero nadie puede dudar que en su momento se puso como meta ser candidato a la gubernatura y a lo largo de los últimos años, cuando concluyó por segunda vez su gestión como alcalde de Tlaquepaque, comenzó a trabajar para eso”, escribió Hernández en Marcatextos.
Para el columnista Jorge O. Navarro, Jonás, en su columna del diario local El Informador, el exsecretario parece ser el candidato menos ideal en un panorama donde no se contemplaba.
“Para Miguel Castro, ahora ungido, el reto es más que gris, oscuro. Además de que se enfrenta a un rival que se antoja invencible en la estadística, carga con un estigma que le dificultará más las cosas: su asunción a candidato significa la negociación de la derrota, la aceptación de que Jalisco está perdido para el PRI.
“O, ¿cómo explicar que no hagan candidato al más rentable en las encuestas (Zamora) ni al más decidido en la contienda (Almaguer)?”, señaló el analista en su columna de este martes.