CEDHJ, la última parada
El organismo estatal de derechos humanos ha sido utilizado como un lugar en el que a través de acuerdos funcionarios logran alcanzar puestos de alto rango para obtener después jugosas pensiones
Jonathan ÁvilaEn los últimos años la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) se ha convertido en un botín político.
Funcionarios han utilizado al organismo como un lugar para incrementar sus cotizaciones y luego de un periodo considerable jubilarse con una buena pensión. El periodo con más casos registrados es el del extitular Felipe de Jesús Álvarez Cibrián (2007-2017).
Una de las particularidades del legado del exombudsman fue la utilización de puestos públicos del organismo autónomo de defensa de los derechos humanos como moneda de cambio para seguir perpetuando su presidencia a partir de acuerdos con figuras de la clase política.
Así fue en el caso de Lydia Ávila Valdez, quien a finales de 2015 ingresó a la comisión bajo la figura de sexta visitadora. Este puesto había sido creado deliberadamente, ya que significaba un acuerdo entre el entonces defensor de los derechos humanos y el magistrado Espartaco Cedeño Muñoz, cónyuge de Lydia Ávila.
De esa forma fue sencillo que con la negociación entre el Poder Judicial y la CEDHJ, Ávila Valdez resultara beneficiada con un puesto cuyo sueldo mensual llegó a ser de hasta 84 mil 238 pesos mensuales, luego de haber fungido como encargada de la Dirección de Asuntos Internos y Auditoría Preventiva en la entonces Fiscalía General del Estado, con Luis Carlos Nájera como titular.
Pero la CEDHJ fue solo un paso, ya que su puesto en la sexta visitaduría le ayudó a incrementar su monto de cotización y el Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco aumentó su pensión cuando se retiró en 2017, según señalan fuentes consultadas por Reporte Índigo.
Entonces ya era presidente Alfonso Hernández Barrón, actual titular del organismo. Tras la salida de Lydia Ávila, el titular determinó desaparecer la visitaduría creada para la antigua servidora pública. Con esto se cerraron dos de éstas y el argumento fue que las funciones serían absorbidas por las cuatro aún en funciones.
Sin embargo, a mediados de 2018 llegó María Isabel Gallaga González para ocupar el puesto como tercera visitadora con el mismo sueldo mensual que el de Lydia Ávila Valdez. Gallaga Ingresó con un equipo propio para ejercer sus funciones pero pronto advirtió que su paso por la CEDHJ también será efímero, ya que está pronta a jubilarse.
Gallaga González había sido la encargada del Centro de Justicia de la Mujer y entró a la dependencia de derechos humanos por recomendación del entonces secretario general de Gobierno, Roberto López Lara, según señalan las fuentes. Y aunque ejerce funciones como segunda visitadora, en el organigrama de 2019 disponible en la página de la CEDHJ no aparece su nombre.
Su historia se liga con otros casos en los que figuras cercanas al priismo han influido para que los servidores públicos entren a la comisión. Al igual que ella, Krystian Felype Luis Navarro llegó por recomendación del exsecretario general de Gobierno, incluso las fuentes refieren que ambos ostentan una relación cercana.
Luis Navarro llegó en 2018, a un cargo de segundo nivel. Pero los documentos disponibles en la página de la propia CEDHJ hablan de puestos distintos.
En el organigrama aparece como encargado del despacho en la Segunda Visitaduría, mientras que en la nómina se le registra como visitador general adjunto.
Cabe destacar que previo a su ingreso en la CEDHJ, Krystian Luis Navarro había fungido como titular de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas, dependencia subordinada a la Secretaría General del Gobierno de Jalisco, y por ende, a López Lara en la anterior administración.
Por otro lado, dentro de la dependencia también se encuentra laborando Verónica Narváez Martínez como asistente de vinculación en la Secretaría Técnica de la CEDHJ, según aparece en la nómina del organismo.
Su nombramiento resalta ya que es hija de Verónica Martínez Espinoza, senadora suplente de Jalisco en el periodo de 2012 a 2015 con Arturo Zamora.
En su momento se cuestionó que su hermano, Edgar Misael Hernández Barrón, y la cuñada de éste, Aileen Meza Moreno, fueran parte de los servidores públicos del organismo. Días después el presidente se comprometió a separar de su cargo a Edgar Misael.
Modus operandi recurrente
Las prácticas de contratación a personas cercanas no han sido del todo eliminada, ya que recientemente se nombró como encargado del área de diseño gráfico de la Dirección de Comunicación Social a Oscar González Delgado, cuñado de la secretaria particular del presidente, Sofía Gómez Rodríguez.
Como defensa de sus acciones el presidente de la Comisión ha declarado a otros medios que algunos de los casos evidenciados han sido de personas que estuvieron incluso antes de su administración.
Y uno de sus principales movimientos tras su llegada ha sido la reestructuración del personal y algunos cambios significativos en la gestión, pues ahí se concentran las viejas prácticas y compromisos políticos del anterior titular y que difícilmente han podido ser rotos para contrarrestar el peso o injerencia en el actual periodo.
Incluso algunos críticos y analistas del titular en funciones han señalado que su último informe evidenció algunas intenciones de Hernández Barrón por formar sus propios acuerdos con la clase política y la nueva administración estatal. Reporte Índigo buscó a la CEDHJ para que diera su versión de los señalamientos recogidos, pero al cierre de esta edición no hubo respuesta.