Siendo que los usuarios normales son los principales afectados por las hostilidades entre bots de ambos bandos políticos, especialistas comentan a Reporte Índigo algunos consejos para detectarlos y destacan la importancia de no interactuar con estos, pues su objetivo y el de las empresas que los manejan es generar interacción que se traduce en ganancias.
“En Twitter definitivamente hay mensajes de odio, pero también hay gente que se engancha, se enoja y empieza a contestarles más, a contestarles a otros usuarios y otros hashtags. Hay más conversación y, en términos numéricos, Twitter dice ‘esto está funcionando, ¿por qué tendría que quitarlo?’ Ese es el gran problema”, dice Enrique Ortega, CEO de Lata de Ideas.
Ortega destaca que los bots han evolucionado desde el avatar de “huevito” y el arroba “juan12345678” y ahora generan más conversación a favor o en contra de determinados temas, si bien siguen siendo cuentas automatizadas. A la vez que existen trolls que, siendo usuarios reales, se dedican exclusivamente a atacar a otros.
“La famosa ‘Red AMLOVE’, que es de las más fuertes, claramente son granjas de bots que están buscando conversaciones de gente que, en algún momento, comente algo contra el Presidente o la 4T. Automáticamente le responden, pero cuando ves las respuestas de estos bots resulta que es un ‘copiar y pegar’ que le dan a muchos otros”, explica.
Por su parte, Alejandro Rosas Marín, director de Disruptio, menciona que los bots utilizados por la oposición suelen utilizar hashtags como #LigaDeGuerreros, #X1MxUnido o #Valquirias para buscar posicionar sus mensajes. Aunque las etiquetas tengan poco o nada que ver con los contenidos de los twitts o las conversaciones a las que se suman.
“Un #Valquirias’ cuando están hablando de la Reforma Energética o un #LigaDeGuerreros ahora que están criticando al Presidente por el tema del COVID-19, no tiene sentido, no se entiende qué tiene que ver. El trasfondo es una evaluación interna, ponen el hashtag para identificarse y saber qué cuenta sí lo está usando”, explica Rosas Marín.