¿Quién ocupará la silla de ‘El Chapo’?

Con la extradición de Joaquín “El Chapo” Guzmán, y su evidente anulación como el narcotraficante más importante de México de los últimos 20 años, el que se alza como sucesor en la sede vacante del capo de las drogas en el país es Alfredo Beltrán Guzmán, “El Mochomito”.

A la fecha tiene el control de la mayor parte de la estructura del Cártel de Sinaloa.

La lucha al interior del cártel que fue fundado por Joaquín Guzmán Loera ha entrado en una espiral ascendente desde la recaptura de “El Chapo” Guzmán.

El Cártel de Sinaloa se fraccionó en dos partes: la que quedó al mando de Aureliano Guzmán Loera, hermano de “El Chapo”, y la controlada por Alfredo Beltrán Guzmán, hijo de Alfredo Beltrán Leyva y sobrino del propio “Chapo”.

De acuerdo a fuentes extraoficiales del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), la reciente captura de Juan José Esparragoza Monzón, hijo de Juan José Esparragoza Moreno, “El Azul”, uno de los fundadores del Cártel de Sinaloa, que mantenía el control de una parte importante de esa estructura criminal, podría ser uno de los indicios más evidentes sobre la concentración de poder en la persona de Alfredo Beltrán Guzmán.
Juan José Esparragoza Monzón era uno de los socios más importantes de Alfredo Beltrán Guzmán.

“Era el único que le podría disputar el control del cártel al ‘Mochomito’”, dijo una fuente de la PGR, quien aseguró que todo el mando de la estructura criminal del cártel fundado por “El Azul”, había recaído en la persona de su hijo.

En base a esa hipótesis, en el CISEN se estima que la que fue la estructura del cártel de “El Azul”, ahora podría ser asumida por “El Mochomito”.

De acuerdo a estimaciones extraoficiales de funcionarios de la PGR desplegados en Sinaloa, desde la recaptura de “El Chapo” Guzmán, “El Mochomito” se lanzó por el control de la parte del cártel que le heredaron a su tío Aureliano Guzmán Loera.

La disputa por el control del cártel tuvo su punto de quiebre en abril del 2015, cuando fue asesinado Ernesto Guzmán Hidalgo, abuelo paterno de “El Mochomito” y medio hermano de Aureliano y Joaquín Guzmán Loera; el asesinato fue atribuido a Aureliano Guzmán.

Alfredo Beltrán Guzmán se alió con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para terminar de arrebatar el control del Cártel de Sinaloa a Joaquín Guzmán, quien ya había cedido la estructura criminal a su hermano Aureliano.

“El Mochomito”, también conocido como “El Alfredito” o “El Junior”, tras pactar la alianza con el CJNG se hizo del mando de la fracción del Cártel de Los Beltrán Leyva que su padre, Alfredo, había cedido a su hermano Héctor.

Al ser capturado Héctor, su esposa Clara Elena Laborín tomó las riendas, y “El Mochomito” se lanzó en una guerra sin cuartel contra su tía, valiéndose de alianzas con células locales en Guerrero, como “Los Pelones”, y en Sinaloa, “Los Güeros” y “Los Mazatlecos”, esta última dirigida por Fausto Meza, “El Chapito”.

La alianza entre “El Chapito” y “El Mochomito” permitió mandarle un mensaje de poder al propio “Chapo” Guzmán, en prisión, cuando en junio del 2016 fue asaltada la casa de su madre, María Consuelo Loera, y en agosto fueron secuestrados dos hijos del “Chapo”, Jesús Alfredo Guzmán Salazar e Iván Archivaldo Guzmán.

La red de ‘El Mochomito’

Alfredo Beltrán Guzmán ha expandido su presencia en el país, de acuerdo a datos extraoficiales del CISEN:

> Baja California y Sonora. Va en alianza con el Cártel de los Arellano Félix

> Chihuahua. Con fuerza propia, enfrenta al Cártel de Juárez.

>Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Pelea contra Los Zetas apoyado por el Cártel del Golfo.

> Querétaro, San Luis Potosí y Guanajuato. Incursiona en sociedad con células del Cártel del Golfo.

> Chiapas. Disputa el cobro de peaje a los migrantes centroamericanos.

> Puebla, Tlaxcala, Veracruz y Oaxaca. Confronta a Los Zetas por la extracción ilícita de combustible de los ductos de Pemex.

El dominio del ‘Mochomito’

De acuerdo a fuentes del CISEN, la influencia de Alfredo Beltrán Guzmán alcanza a tres cárteles:  el de Sinaloa, Hermanos Beltrán Leyva y Cártel Jalisco Nueva Generación, lo que lo que lo convierte en el narco más poderoso del país.
 
“También tiene alianzas con algunas células del Cártel del Golfo, principalmente en los estados de Querétaro, San Luis Potosí y Guanajuato”, refirió un fiscal estatal del país en referencia a “El Mochomito”.

A decir del Fiscal, la intención de Alfredo es arrebatar el control del Cártel de Los Zetas, principalmente en la zona centro del país.

Datos extraoficiales del CISEN apuntan a la presencia de “El Mochomito” en Baja California y Sonora, en alianza con el Cártel de los Arellano Félix; en Chihuahua, con fuerzas propia, estaría enfrentando al Cártel de Juárez.

En tanto que en Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, con el apoyo del Cártel del Golfo, estaría en guerra abierta contra Los Zetas.

Con el respaldo del CJNG, “El Mochomito”, mantendría el control de gran parte de las rutas del narcotráfico en Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Colima, Morelos, Michoacán, Quintana Roo, Yucatán, Guerrero y Ciudad de México.

Según fuentes de la PGR, también es importante en Puebla, Tlaxcala, Veracruz y Oaxaca, donde mantiene una violenta confrontación con Los Zetas por la extracción ilícita de combustible de los ductos de Pemex; y en Chiapas, por el cobro de peaje a los migrantes centroamericanos.

El beneficio  de la duda

La reciente captura de Juan José Esparragoza Monzón, jefe principal del Cártel de “El Azul”, le brinda a Alfredo Beltrán Guzmán la posibilidad de hacerse del control de la estructura que alguna vez dirigió Joaquín Guzmán.

Es posible que “El Mochomito” intervino para ubicar el paradero de Esparragoza Monzón, el objetivo 122 en la lista de capturas prioritarias del Gobierno federal.

Fuentes extraoficiales no descartan que la detención del hijo de “El Azul” haya sido producto de una venganza, de quien pudiera intentar quedarse con el control de ese grupo, que podría ser Alfredo Beltrán Guzmán o Aureliano Guzmán Loera, ambos con la necesidad de asumir el control total del Cártel del Chapo.

Entre traiciones

La ubicación “y puesta” de enemigos, para que sean capturados por las fuerzas federales, es común entre los cárteles:

> La captura de Héctor y Alfredo Beltrán Leyva fue atribuida a una traición de Joaquín Guzmán Loera.

> La ubicación que llevó a la aprehensión del “Chapo” Guzmán fue atribuida al Cártel de los Beltrán Leyva.

> La información para detener a Servando Gómez Martínez se le achacó a Nemesio Oseguera, del Cártel de Jalisco.

> A Servando Gómez lo ligan a la captura de Jesús Méndez Vargas, del Cártel de La Familia.

> La ubicación de Miguel Ángel Treviño Morales fue atribuida al Cártel de los Arellano Félix.

> Tras la captura de Juan José Esparragoza Monzón podrían estar Alfredo Beltrán Guzmán o Aureliano Guzmán Loera, ambos luchando por el control total del Cártel de Sinaloa.