El dragón y el cristal
Las metanfetaminas que se siguen sintetizando a gran escala en Jalisco ya no tienen como destinatarios únicos a los consumidores locales y estadounidenses, ahora la producción del estado se está enviando también hasta la región Asia-Pacífico, y en concreto, a China.
Justo en estos momentos que se le recomienda a México diversificar su mercado de exportaciones y mirar a China para aminorar su dependencia con Estados Unidos, hay indicios claros de que las organizaciones delictivas como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) hace tiempo que llevaron a la práctica esa idea.
Luis Herrera
Las metanfetaminas que se siguen sintetizando a gran escala en Jalisco ya no tienen como destinatarios únicos a los consumidores locales y estadounidenses, ahora la producción del estado se está enviando también hasta la región Asia-Pacífico, y en concreto, a China.
Justo en estos momentos que se le recomienda a México diversificar su mercado de exportaciones y mirar a China para aminorar su dependencia con Estados Unidos, hay indicios claros de que las organizaciones delictivas como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) hace tiempo que llevaron a la práctica esa idea.
La conexión específica que se ha establecido entre las metanfetaminas que se producen en el estado de Jalisco, bajo el dominio del CJNG, con el mercado chino, fue identificada desde abril de 2016 por investigadores de la Universidad Nacional Australiana.
Por esas mismas fechas –el 28 de abril- pero a un océano de distancia, la Procuraduría General de la República (PGR) difundía precisamente “el desmantelamiento de uno de los más grandes laboratorios destinados a la elaboración y distribución de metanfetamina” en Zapopan, con 90 kilos de la droga, y atribuido al CJNG.
Lo que hay detrás de estos laboratorios que continúan hallándose por decenas en Jalisco, según esa universidad y su Centro de Estudios Estratégicos y de Defensa, es algo muy similar a una cadena productiva integrada entre México y China, como las que hoy fabrican los autos con componentes de múltiples países.
Es decir, que los grupos delictivos mexicanos y chinos han logrado ensamblar un proceso único de producción de metanfetaminas, donde cada quien hace su parte, como se indicó en el informe “Cárteles mexicanos de la droga y las redes oscuras: una amenaza emergente para la seguridad nacional de Australia”, de Anthea McCarthy-Jones:
“Reportes han identificado vínculos crecientes entre grupos del crimen organizado chino y cárteles mexicanos. Estas conexiones están relacionadas con la importación (que hacen cárteles de México de grupos del crimen organizado chino) de precursores para la producción de metanfetaminas”.
Ya con los precursores chinos en territorio mexicano: “el producto terminado es enviado luego desde México (principalmente del estado de Jalisco) de vuelta a tierra firme china.
“Estas conexiones muestran las relaciones coordinadas que los cárteles mexicanos tienden a establecer con los grupos del crimen organizado en la región, y aporta más información sobre la compleja red oscura y de gran escala que alcanza al Pacífico”.
Producción local
Durante el actual gobierno de Aristóteles Sandoval Díaz, en que el CJNG ha apuntalado su predominio tanto en Jalisco como en buena parte del país, el Ejército ha detectado y desmantelado 46 laboratorios en el estado entre marzo de 2013 y 2016, todos exclusivamente de metanfetaminas.
Apenas el 24 de febrero pasado la Fiscalía dio a conocer que en un solo operativo encontró cuatro laboratorios de metanfetaminas que atribuyó al CJNG: un par en Chapala, los otros en Ixtlahuacán de los Membrillos y Acatic.
De cierta forma, la PGR advirtió desde aquel golpe en Zapopan del 28 de abril de 2016, que la producción jalisciense de metanfetaminas tiene un mercado internacional, cuando el titular de la Unidad Especializada en Investigación de Terrorismo, Acopio y Tráfico de Armas, José Arturo López Ibarra, dijo:
“Se desarticuló una operación de gran importancia en el trasiego de drogas, evitando la distribución y consumo de millones de dosis que pudieran haber sido comercializadas al narcomenudeo, tanto en el país como en el extranjero”.
El reporte del Centro australiano advirtió: “recientemente el cártel de Sinaloa y otros como Los Zetas y el CJNG se han estado desplazando hacia mercados extranjeros en un intento por incrementar su tajada del comercio global de drogas ilícitas. Este esfuerzo está principalmente relacionado con la distribución de cocaína y metanfetaminas”.
El CJNG y China
De acuerdo con el informe australiano, un grupo delictivo como el CJNG que se ha especializado en la producción y tráfico de metanfetaminas, tiene varios y poderosos incentivos para seguir ampliando su presencia en la región Asia-Pacífico.
Para comenzar, el apetito de China por las drogas que sintetiza el CJNG se ha vuelto voraz: “La demanda creciente de China por la metanfetamina en forma de cristal y en tabletas, se muestra por el hecho de que suma el 50 por ciento de los decomisos anuales de esa región.
“El factor clave que está impulsando a los cárteles a buscar nuevos mercados ha sido el declive en la demanda en los EEUU. Esta disminución ha significado que el mercado de EEUU por sí solo ya no pueda sostener el ritmo del flujo de suministro del Sur hacia el Norte”.
No solo es China, otros países de esa región como Corea, Japón, Indonesia y la misma Australia han vivido un crecimiento económico y de riqueza en las últimas dos décadas, que “ha producido una demanda más grande de drogas ilícitas como nunca antes”.
Desmantelados
Detección de laboratorios en Jalisco realizada por el Ejército entre 2013-2016:
Región Labs.
Sur 22
Altos Sur 7
Sureste 4
Costa Sierra Occid. 3
Sierra De Amula 3
Centro 2
Costa Sur 2
Lagunas 2
Valles 1
Total 46
Mina de oro
La región que conforma Asia (Este y Sureste) y Oceanía es donde vive la mayor cantidad de usuarios de Estimulantes Tipo Anfetaminas, o ATS, por sus siglas en inglés, donde se incluye a las metanfetaminas en forma de tableta y cristal.
Esa región suma 9.5 millones de usuarios de los ATS. De ahí que señale el informe: “Los cárteles mexicanos han expandido drásticamente su producción y distribución de ATS en años recientes, haciendo del Asia-Pacífico una región lucrativa y lógica para extender sus operaciones”.
Los altos precios que alcanzan las drogas en esa región bien valen los costos que implica el trasiego hasta ella: por ejemplo, si el kilo de sales de cocaína tiene en Estados Unidos un precio aproximado de 54 mil dólares, y en Reino Unido de 87 mil dólares, en la región Asia-Pacífico y en Australia en particular, se dispara a no menos de 228 mil dólares y hasta los 259 mil dólares.