CNDH, sin pies ni cabeza y bajo cuestionamientos
El organismo autónomo se enfrenta a la peor crisis de credibilidad desde su existencia, prueba de ello son las protestas de los colectivos feministas que han tomado algunas de sus oficinas para exigir acciones concretas y las débiles recomendaciones que ha hecho al Gobierno de la República debido a la cercanía entre su titular y el presidente
Julio Ramírez e Yvonne ReyesLa Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) atraviesa por la peor crisis de legitimidad de sus últimos tiempos.
Ante la pública amistad de su titular Rosario Piedra con el presidente Andrés Manuel López Obrador y el consecuente buen trato con débiles recomendaciones a su Gobierno, el organismo es cuestionado por no dar prioridad a la defensa de las víctimas.
Organizaciones civiles y legisladores federales aseguran que Rosario Piedra debe renunciar por su irregular nombramiento en el Senado, el hecho de que llegó al cargo cuando era militante activa de Morena y por su profunda cercanía personal con el presidente
Actualmente, se han presentado tomas y clausuras simbólicas de algunas de sus oficinas en sitios como Ecatepec, Aguascalientes, Morelia y en las instalaciones de República de Cuba 60 en la CDMX, donde manifestantes mantienen un plantón y han declarado que el edificio será una “casa okupa” para dar refugio a víctimas de violencia.
En el contexto de la lucha feminista en el país, la organización “Ni una menos” tomó una de las sedes de la CNDH en el Centro Histórico de la CDMX y sacaron algunos muebles a la calle.
Sin embargo, el bloqueo de las instalaciones en Ecatepec devino en hechos de violencia en donde un grupo de mujeres que protestaba fue reprimido durante la madrugada por oficiales del Estado de México a solicitud del titular del organismo autónomo local, Jorge Olvera García.
En Internet se viralizaron los videos de madres de mujeres asesinadas y desaparecidas que ingresaron a la cocina del inmueble y encontraron cortes de carne tipo gourmet y demandaron que ese gasto bien se pudo aplicar en atención de víctimas.
En estos tiempos de pandemia en donde los órganos autónomos van perdiendo peso y reciben menos presupuesto, la CNDH ha padecido una reducción del 3.7 por ciento de sus recursos con respecto al año pasado.
La CNDH se enfrenta también a una demanda por violencia de género por parte de su extitular de Comunicación Social, quien afirma que no le han dado además la parte correspondiente a su finiquito.
Hay directores de organizaciones civiles que consideran que esta crisis institucional es inducida desde Palacio Nacional con el ánimo de debilitar a los órganos autónomos, castigados ya desde la propia solicitud de presupuesto.
“Esto no es un tema accidental. Esto está planeado. El más feliz con esto que está sucediendo es el presidente de la República porque está cumpliendo su visión, está quitándole toda la legitimidad a un organismo público autónomo, algo que cuando llegó no podía hacer. Ahora, con una militante de su partido está destruyendo la poca legitimidad que le quedaba después de ese proceso de elección”, considera Juan Martín Pérez, director de la Red por los derechos de la Infancia en México (Redim).
La organización encabeza una campaña denominada #3razoneséticas en la que explica que Rosario Piedra debe renunciar por su irregular nombramiento en el Senado, el hecho de que llegó al cargo cuando era militante activa de Morena en Nuevo León -al que renunció estando en funciones y su profunda cercanía personal con el presidente.
Cuestionan desempeño de Rosario Piedra al frente de CNDH
Hasta los diputados federales de Morena critican el desempeño de Rosario Piedra Ibarra al frente de la CNDH.
Durante una reunión virtual, algunas legisladoras exigieron la renuncia de Rosario Piedra por incompetente y le echaron en cara la comida “gourmet” que se encontró en la cocina de las instalaciones de República de Cuba 60, donde se mantiene un plantón de colectivos feministas.
Al respecto, la titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos denunció ser víctima de una campaña de desprestigio y de mentiras y considera que la autonomía de la CNDH está garantizada.
“Hemos sido y estamos siendo sujetos a una formidable campaña mediática de desprestigio y de mentiras, pero puedo decir que la CNDH hoy se maneja con absoluta honestidad y transparencia. Se ha pretendido difundir versiones escandalosas y calumniosas. Ejerzo a plenitud mis facultades alejada de presiones e influenzas”, mencionó.
Sobre los cuestionamientos por la comida gourmet, Piedra Ibarra rechazó que haya comida de este tipo.
“Es falso lo que se ha dicho acerca del comedor. Se servían diariamente entre 30 y 40 comidas, algunas de las cuales se ofrecían también a quienes acudían por algún trámite o petición.
“El menú era como el de cualquier hogar de clase media: sopa de pasta, arroz, frijoles y guisado, aguas frescas, nada de comidas ‘gourmet’ y lo que se presentó como cortes finos no eran más que bistec de res, cerdo y chambarete, lo que se exhibió como exceso no era más que el total de alimentos de un mes”, defiende.
La morenista Graciela Zavaleta Sánchez asegura que la CNDH no goza de cabal credibilidad ante la opinión pública y durante la pandemia la percepción empeoró. A la andanada de críticas se suma Lorena Villavicencio, también de Morena.
“Me parece que estamos frente a una crisis de una institución que se deriva no solo del origen de cómo su titular fue electa, lo que vemos ahora es una enorme debilidad de parte de la institución”, dice Villavicencio.
Por su parte, la diputada sin partido, Ana Lucía Riojas, tras hacer severas críticas a la gestión de Rosario Piedra, le exigió su renuncia.