Comienza la cacería

¿Confía usted en Enrique Horcasitas?, se le preguntó de frente a Marcelo Ebrard Casaubón, luego de que la Línea 12 suspendiera el servicio.

“En este momento no confío en nadie”, respondió el ex jefe de Gobierno en sus oficinas de la Condesa, donde revisaba la documentación referente a la Línea Dorada, su orgullo.

Una semana después, el jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa, destituyó a Enrique Horcasitas como director de Proyecto Metro, luego de que, como lo adelantó Reporte Indigo, aseguró las oficinas del organismo que se ubican en avenida Universidad, en la delegación Benito Juárez.

Para algunos, Mancera Espinosa reaccionó tarde, pues Horcasitas Manjarrez representó desde siempre un conflicto de interés evidente entre sus acciones como funcionario del GDF y como hermano de Luis Horcasitas, directivo de ICA, la constructora en conflicto con la administración local.

Como lo anunció Reporte Indigo en la edición del pasado martes 18 de marzo “Sellan oficinas de Proyecto Metro”, esta semana sería clave para el ingeniero Horcasitas, a quien Marcelo Ebrard designó como responsable para desahogar los procesos de licitación, contrato, obra, mantenimiento y estudios relacionados con Línea 12.

Horcasitas hasta ayer fue juez y parte en la investigación de las irregularidades de la Línea Dorada.

Desde que se hicieron públicos los informes que advertían del riesgo de un posible descarrilamiento en algunas estaciones de la Línea 12 que obligaron al cierre, Horcasitas se negó a formular una denuncia por mil 700 millones de pesos por daños en contra del Consorcio constructor de Línea 12.

Por eso es que su destitución era inminente.

Desde el viernes 14 de marzo, día que el Gobierno del Distrito Federal aseguró, a través de la Contraloría General, las oficinas de Proyecto Metro, Enrique Horcasitas tenía conocimiento de que sus horas estaban contadas al frente del organismo.

Sus oficinas fueron selladas y el gobierno local montó un discreto operativo en las inmediaciones para vigilar los movimientos de Enrique Horcasitas y su equipo de ingenieros más cercanos.

Agresiva respuesta de constructoras

Como respuesta a esa acción, las empresas ICA, Carso y Alstom que conforman el Consorcio Línea 12 publicaron un desplegado en el que se van a la cabeza de Joel Ortega Cuevas, director del Metro, pues aseguran que desde el 8 de julio del 2013, él y Enrique Horcasitas firmaron el acta recepción definitiva de la Línea 12.

Especifican que el GDF utilizó trenes con características diferentes a las que se habían planeado para todas las vías señalas, pues varían en dimensiones, peso, número de carros, distancias entre ejes y perfil de los comboyes, todo basado en la Línea A, que sirvió de base para la Línea 12.

También hacen alusión a la certificación internacional que otorgó 

ILF Beratende Ingeniure, Tüv Sül Rail, Deutsch Bahn International, el mismo que alude Marcelo Ebrard, y que sospechosamente está fechado el 30 de octubre del 2013, el mismo día de la inauguración de la Línea 12.

Después de esa arremetida, Mancera continuó su plan y ayer miércoles anunció la destitución de Horcasitas. Salió ante los medios por algunos minutos y leyó un comunicado breve. 

“Quiero señalar que lo anterior no representa de ninguna manera un juicio de su desempeño, sino que busca dar garantía a todas las partes involucradas y por supuesto a la Ciudad, que esta indagatoria se llevará a cabo con absoluta transparencia e imparcialidad”, señaló Mancera sobre la decisión de remover a Horcasitas.

La casa en llamas que representa ahora el Proyecto Metro es dirigida desde ayer por Marco Antonio Ciriaco, un funcionario menor que se desempeñaba como contador público en la Contraloría General del DF bajo las órdenes de Hiram Almeida.

Lo que leyó ayer miércoles el jefe de Gobierno fue un hecho consumado desde el pasado viernes 14 de marzo, pues desde ese día, los archivos que contienen toda la información relacionada con la licitación, construcción, costos, materiales y demás de la mega obra, fueron asegurados.

Ya rodó la primera cabeza por el caso de presunta corrupción en la Línea 12… y a todo esto, el ex director del Metro en el sexenio de Marcelo Brard, Francisco Bojorquez, no ha dicho esta boca es mía.