En los próximos años, quien beba tequila no solo disfrutará de la bebida más representativa de México, sino que tendrá la certeza que la producción tequilera ayudó a mejorar su huella ambiental.
Preocupados por el medio ambiente, la agroindustria tequilera, el Consejo Regulador del Tequila (CRT) y los gobiernos de Jalisco y Guanajuato pusieron en marcha la certificación de Agave Responsable Ambiental (ARA).
El objetivo es que para 2027 en estas dos entidades el abastecimiento de Agave tequilana Weber, variedad azul destinada a la producción de tequila, no ocasione deforestación de bosques naturales y sea plantado únicamente en terrenos con vocación agrícola.
La certificación aplicará para la mayoría de los municipios que forman parte del territorio protegido por la Denominación de Origen Tequila (DOT). En una primera fase entrarán los 125 municipios de Jalisco y Abasolo, Cuerámaro, Huanímaro, Manuel Doblado, Pénjamo, Purísima del Rincón y Romita del estado de Guanajuato.
Además, ya se trabaja para incluir en el corto plazo a los municipios restantes de la DOT para alcanzar el 100 por ciento y anexar a las regiones de Michoacán, Nayarit y Tamaulipas.
La certificación ARA fue registrada hace unas semanas ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) en copropiedad entre el Gobierno del Estado de Jalisco y el Consejo Regulador del Tequila, convirtiéndose en la primera certificación sobre deforestación en bebidas alcohólicas a nivel mundial, al utilizar una materia prima cultivada en suelos que no causaron deforestación.
El impacto de la implementación de ARA en Jalisco y Guanajuato será de gran magnitud ya que abarca el 87 por ciento del agave registrado para la producción de tequila.
Otros esfuerzos de la industria tequilera
Además, el compromiso con el medio ambiente incluye una colaboración para que estos procesos contribuyan también a la conservación y restauración de los bosques con la instrumentación de medidas de responsabilidad socio ambiental corporativa, asistencia técnica y promoción de buenas prácticas agroambientales.
En este sentido, agroindustria, autoridades y el Consejo Regulador del Tequila trabajarán a través de una mesa técnica para la revisión de la Norma Oficial Mexicana NOM-006-SCFI-2012 que establece la implementación de estas prácticas.
También, en los próximos meses, la agroindustria tequilera y el Consejo Regulador del Tequila implementarán, a manera de donativo al Gobierno del Estado de Jalisco a través de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (SEMADET), un vivero forestal de alta tecnología en donde se generarán 50 mil plantas anuales, esto con la intención de mitigar el impacto ambiental de los incendios forestales en Jalisco.
Actualmente en la entidad se tiene registro de una afectación de 64 mil 226 hectáreas por 318 incendios no forestales. De ahí la importancia del establecimiento de viveros forestales que permitan la producción de plantas de distintas especies tanto arbóreas, arbustivas y herbáceas, cumpliendo en el terreno con distintas funciones, como es la fijación y retención de suelos, infiltración de agua y captura de carbono.
Manejo de residuos
La certificación ARA implementada por el Consejo Regulador del Tequila y la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial de Jalisco y la Secretaría de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial de Guanajuato, es el último esfuerzo realizado por la agroindustria tequilera en temas de sustentabilidad.
En el pasado, la agroindustria tequilera ya había invertido en plantas de tratamiento de vinazas (desecho industrial que se genera al producir alcohol), composteo de bagazo y uso de biogás.
Además, la agroindustria firmó compromisos junto con el Centro Mario Molina para reducir sus emisiones de carbono, de energía eléctrica y aumentar su tratamiento de aguas para 2030.
Actualmente son 168 empresas productoras, y 21 mil agaveros que se han comprometido en fortalecer las buenas prácticas en sus procesos, estableciendo esquemas que contribuyan a la sustentabilidad del sector tequilero.