Como parte de las investigaciones en contra de José Luis Abarca y su esposa María de los Ángeles Pineda por delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita, la Procuraduría General de la República (PGR) aseguró sus cuentas bancarias.
Autoridades de la dependencia federal confirmaron que desde hace algunos días, a través de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, lograron congelar las cuentas del exalcalde de Iguala, así como de su cónyuge. Asimismo, aclararon que se siguen rastreando otras cuentas bancarias que pudieran estar a nombre de otras personas relacionadas con la pareja.
Aunque no precisaron el número de cuentas que fueron aseguradas, informaron que el congelamiento de las mismas se debe a un trámite que “ya tiene tiempo” de iniciado.
Además, la PGR indicó que están analizando el rastreo de otros bienes e inmuebles ante la sospecha de que pudieran ser producto de sus presuntos vínculos con el cártel de los Beltrán Leyva.
Múltiples propiedades
José Luis Abarca y María de los Ángeles Pineda son propietarios de un centro comercial en Iguala, seis locales que venden oro, así como de ferreterías y restaurantes.
En las investigaciones de la Procuraduría General de la República, Pineda ha sido señalada como la principal operadora en Iguala del grupo criminal Guerreros Unidos, organización que recibía un pago de dos millones de pesos al mes por parte de José Luis Abarca para tener controlada a la policía municipal, detalló Milenio.
