Constituyentes al rescate
Después de dos meses de haber concluido el histórico documento, diputados de la Asamblea Constituyente se reencontraron en la casona de Xicoténcatl para emprender la defensa legal de la primera Constitución de la Ciudad de México, impugnada por el Gobierno de la República.
Con la convicción de ganar la batalla a “quienes pretenden regresar al pasado”, Alejandro Encinas en calidad de presidente convocó a los Constituyentes para trazar la ruta que de manera paralela emprendió el gobierno capitalino a través de la Consejería Jurídico y un grupo de especialistas.
Icela Lagunas
Después de dos meses de haber concluido el histórico documento, diputados de la Asamblea Constituyente se reencontraron en la casona de Xicoténcatl para emprender la defensa legal de la primera Constitución de la Ciudad de México, impugnada por el Gobierno de la República.
Con la convicción de ganar la batalla a “quienes pretenden regresar al pasado”, Alejandro Encinas en calidad de presidente convocó a los Constituyentes para trazar la ruta que de manera paralela emprendió el gobierno capitalino a través de la Consejería Jurídico y un grupo de especialistas.
Desde que se presentaron las controversias constitucionales se hizo evidente que a quien correspondía defender la Constitución de la CDMX es a la Asamblea Constituyente como parte demandada.
“Al presidente (de la República) no le gusta que los capitalinos tengan el derecho a vivir y morir con dignidad, llegando al absurdo de afirmar que nuestra Constitución, al reconocer todas las formas de convivencias familiar, alienta la poligamia”, soltó Encinas a través de un mensaje en el que se comprometió a la defensa.
“Le causa escozor que se establezca el derecho de todas las personas a vivir en libertad de pensamiento…qué es lo que está impugnando el Ejecutivo Federal, que la dignidad humana y el reconocimiento de los derechos humanos sean los principios de la Constitución de la CDMX…Todos estos cambios, por absurdo que parezca, es lo que está cuestionando Peña Nieto”, dijo.
Además de la Asamblea Constituyente, por separado diversos actores comenzaron la defensa de la primera Carta Magna desde sus trincheras.
Por ejemplo, el Gobierno de la Ciudad de México, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el PAN.
Aunque ayer corrió la versión de que los llamados constituyentes presidenciales, a los que nombró el presidente Enrique Peña Nieto, también se sumarían a la defensa, hasta el cierre de esta edición no había un pronunciamiento oficial.
La defensa blanquiazul
La convocatoria para traer al ruedo a los constituyentes es legítima, consideró el Partido Acción Nacional en la Ciudad de México.
Mauricio Tabe Echartea, presidente de ese partido en la capital, señaló que es a la Asamblea Constituyente a quien le corresponde la defensa legal de la Carta Magna local porque fue el órgano que elaboró el documento.
“También será legítima la defensa que hagan los Constituyentes de la Constitución Política de la Ciudad de México, como es legítimo todo el proceso de discusión de la misma y absolutamente todo su contenido”, enfatizó.
El PAN en la Ciudad de México fijó como postura que el proceso deliberativo y democrático no debe ser menospreciado por la Suprema Corte, como lo ha hecho el Gobierno Federal y demás detractores del documento.
La estrategia de Mancera
Un día antes de la reunión de la Asamblea Constituyente, el Gobierno de la Ciudad de México emprendió la respectiva defensa de la Carta Magna ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno, se lanzó a la batalla arropado jurídicamente por integrantes del grupo redactor, asesores externos y doctores en Derecho de la UNAM.
El punto central de la defensa es que las controversias e impugnaciones intentan limitar los derechos; y que en el caso de la Procuraduría General de la República (PGR) argumenta artículos inexistente en la Constitución, además de que ésta solo puede interponer controversias en materia penal.
Sumado a lo anterior, el gobierno local sostiene que no se pueden impugnar la Carta de Derechos o la totalidad de los derechos que se hacen visibles en la Constitución, toda vez que la propia Corte en su jurisprudencia ha señalado que los derechos deben ser progresivos, ir en aumento y nunca disminuirse.
Además de la PGR y la Presidencia de la República, también impugnaron el documento los partidos Morena y Nueva Alianza, así como la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Sin embargo estos últimos órganos solo tienen atribución para objetar lo relacionado en materia electoral y en temas que versan sobre derechos humanos, respectivamente.
Como parte de esta ruta de defensa para el proceso ante la Suprema Corte se acreditaron más de 60 delegados, cuya cabeza de grupo es Porfirio Muñoz Ledo.
A la defensa
Diversos actores de la vida política y académica en la CDMX en pro de la Constitución local:
Asamblea Constituyente
> Porfirio Muñoz Ledo
> Ifigenia Martínez
> Humberto Lozano
> Ana Laura Magaloni
> Clara Jusidman
> Lol Kin Castañeda.
Equipos de redactores y asesores externos de la Constitución
> Cuauhtémoc Cárdenas
> Carlos Cruz
> Enrique Ortiz
> Rogelio Muñiz
> Juan Luis González Alcántara
> Juan Ramón de la Fuente
> Xóchitl Mejía
> Ariel Rodríguez Kuri
> Santiago Corcuera
> Loretta Ortiz
> Guadalupe Loaeza
> Mauricio Merino
> Leoba Castañeda.
Doctores en Derecho por la UNAM
> Eduardo López Betancourt
> Carlos Daza Gómez
> Raúl Carranca y Rivas
> Elías Polanco Braga
> Pedro Hernández Gaona.