“(…) la política ambiental para combatir los contaminantes de la atmósfera, no existe por parte del Gobierno de la Ciudad de México, no existe en el federal ni en el Estado de México”
A pesar de que llovió hasta inundarse en la capital de la República, la nata grisácea se mantiene en el espacio aéreo como señal inequívoca de la contaminación que ha detonado las contingencias ambientales por ozono.
Dice la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came) que el sistema de alta presión que afecta la región central no cede y no se sabe de medidas emergentes nuevas por parte del gobierno central.
Sin querer reactivar abiertamente la polémica de si es o no un tema político, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, se refirió al problema como un fenómeno climático inusual.
“No hay condiciones de dispersión de la contaminación en los próximos días”, lanzó en una especie de advertencia de que la contaminación seguiría igual.
No obstante, corresponde a la Came determinar qué labor o acción cumple cada una de las entidades para hacer frente a la contingencia.
“Si se rebasan los niveles tendríamos que entrar en contingencia fase dos y eso limitaría mucho más la circulación de vehículos, pero las condiciones atmosféricas no permiten que haya dispersión”, declaró ayer en plena contingencia.
Abandonaron el tema: Sheinbaum
“Más que la contingencia lo que hay que discutir es la política ambiental para combatir los contaminantes de la atmósfera, no existe por parte del Gobierno de la Ciudad de México, no existe en el federal ni en el Estado de México”, asegura Claudia Sheinbaum Pardo, exsecretaria del Medio Ambiente de la capital.
Advierte que la tendencia de reducción de contaminantes en la capital, que por años iba a la baja, se ha estancado pues se abandonaron los temas centrales para combatir el problema, como las fugas de gas LP, las quemas agrícolas y la inversión en nuevas tecnologías.
La hoy delegada en Tlalpan explica que en materia de medio ambiente se han tomado una serie de medidas que, lejos de ayudar, generan más problemas que repercuten directamente en afectaciones a la salud de millones de habitantes.
“Creo que más bien el tema está abandonado”, acusa al mismo tiempo de que conmina a la toma de medidas de emergencia, más allá de las que marca como obligatorias el Programa de Contingencias, en estos días en los que la crisis se prolongó.
Sheinbaum Pardo reconoce que en esta época se presentan invariablemente dificultades, sin embargo no sólo el ozono es el generador del problema, pues los IMECAS también están por arriba.
Se han detectado diversos contaminantes que preocupan porque durante varios días se han registrado por encima de las normas de salud; además del ozono, las partículas suspendidas menores a diez micrómetros, conocidas como PM10 y las PM2.5.
“Sí se bajaron los niveles en la Came para decretar una contingencia, es verdad, pero el tema central es que la calidad del aire es mala y es un daño para la salud de los habitantes”, subraya.
“El tema de las fugas de gas LP, que hace mucho tiempo se abandonó y está representando contaminantes que son promoventes de la formación de ozono; el tema de las quemas agrícolas, en fin.
“Evidentemente los tiempos de las temperaturas son mayores, les ayuda a que forme más ozono, pero el tema es que no conocemos cuál es el programa para mejorar la calidad de aire en la Zona Metropolitana del Valle de México”, detalla Sheinbaum Pardo.
La especialista reconoce que hay ciudades en el mundo con mayores niveles de contaminación, como China e India, pero el tema no es decir si hay peores, si no lo que se ha avanzado.
La reducción de la concentración de contaminantes en la Ciudad de México que venía en una tendencia se ha estancado e incluso, va en aumento, se atreve a decir Sheinbaum.
Entre emergencia y la elección
Mientras las autoridades advierten que la crisis no se resolverá de inmediato, en el Estado de México el gobierno anunció que debido a la contingencia ambiental decretada por la Comisión Ambiental de la Megalópolis, será gratuito el servicio de Mexicable y Mexibús.
La medida es para promover estas modalidades de transporte e inhibir el uso de automóviles particulares.
Aplicará para las tres líneas de Mexibús: Ciudad Azteca a Ojo de Agua, La Quebrada a Las Américas y Chimalhuacán a Pantitlán; así como para el sistema Mexicable, ubicado en el municipio de Ecatepec de Morelos.
El Gobierno del Estado de México ya había decretado esta medida emergente durante las contingencias ambientales decretadas el año pasado.
El anuncio generó de inmediato críticas respecto a si la medida es resultado de la crisis ambiental o de la campaña electoral que transcurre en la entidad, en la que se disputa la gubernatura
