Corregir el rumbo del sector energético mexicano
México debe encaminarse a las tendencias energéticas que fomentan las mejores prácticas y se aplican a nivel internacional, de lo contrario podría quedarse estancado y perder relevancia como nación
Ernesto Santillán e Yvonne ReyesSi queremos que México sea un mejor país necesitamos un sector energético más competitivo, afirma Valeria Moy, directora general del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
“Yo lo veo de forma sencilla: necesitamos un sector energético que nos dé energía buena, bonita y barata.
“Buena es que sea amigable con el medio ambiente. Bonita en el sentido de cómo la generamos y si se respeta a la competencia, hay Estado de Derecho y se cuentan con finanzas públicas ordenadas. Y barata no en el sentido de que el gobierno la subsidie, sino que sea el mejor precio disponible dada la competencia que haya”.
Como país, Moy opina que estamos parados en un mal lugar.
“Ahorita estamos por debajo de la tabla y considero que es muy importante no perder relevancia internacional. Y si no mejoramos el sector energético del país, hay que recordar que el mundo no se sienta a esperarnos.
“Creo que se tendrían que hacer muchas inversiones en el sector eléctrico, cambiar ciertos esquemas de generación y de distribución para poder ocupar un mejor lugar en materia de competencia internacional”.
La directora general del IMCO considera que si no avanzamos en esa dirección, nos vamos a enfrentar a una serie de situaciones muy complicadas como precios más caros, finanzas públicas más ajustadas y daños al medio ambiente, entre otras.
Con esto coincide Gonzalo Monroy, director general de GMEC, quien comenta que México salió mal de la pandemia.
“Hoy tenemos 8 millones nuevos de pobres, la economía está debilitada y las políticas de inversión que se han aplicado están inhibiendo la creación de inversión a largo plazo”.
El experto en la materia considera que máximo tenemos un margen de cinco años para solucionar nuestros problemas energéticos y avanzar con la tendencia internacional.
“Cuando esta tendencia nacionalista pro-energías fósiles termine, podría ser muy rápida la irrupción de CFE a través de subastas eléctricas. El recurso solar sigue siendo muy bueno en México, también el eólico y el potencial que tenemos en geotermia sigue siendo muy importante”, concluye.