Crean ZEE para mejorar la inversión
Por unanimidad, la Cámara de Diputados aprobó la creación de la Ley Federal de Zonas Económicas Especiales.
La finalidad principal de crear Zonas Económicas Especiales (ZEE) es equilibrar el desarrollo regional y especificar las características que debe tener una región en la que pretendan ubicarse estos polos de desarrollo.
Una ZEE será un complejo industrial y de servicios que ayude a dar empleo a las comunidades cercanas a él, por lo que serán ubicados cerca de centros poblacionales a los que pueda impulsar.
Imelda García
Por unanimidad, la Cámara de Diputados aprobó la creación de la Ley Federal de Zonas Económicas Especiales.
La finalidad principal de crear Zonas Económicas Especiales (ZEE) es equilibrar el desarrollo regional y especificar las características que debe tener una región en la que pretendan ubicarse estos polos de desarrollo.
Una ZEE será un complejo industrial y de servicios que ayude a dar empleo a las comunidades cercanas a él, por lo que serán ubicados cerca de centros poblacionales a los que pueda impulsar.
En estas ZEE habrá estímulos e incentivos económicos, con la idea de que haya mayor inversión que potencie el crecimiento de las regiones.
Estos estímulos serán en favor de las empresas o inversionistas que vayan a trabajar a esos lugares.
Las facilidades no serán menores. Los empresarios que entren en dicho esquema tendrán estímulos fiscales, aduaneros y financieros, aunados a facilidades administrativas y de infraestructura.
La principal intención de estas ZEE es instalarlas en el sur del país, en partes que pueden convertirse en polos de desarrollo para las comunidades.
La idea es beneficiar, sobre todo, a comunidades indígenas y zonas marginadas.
La pobreza del Sur
Para declarar una ZEE, es fundamental que se encuentre en un núcleo poblacional marginado, donde deba potenciarse el desarrollo.
En el sur del país, las condiciones de marginación y atraso son más evidentes que en el resto del territorio nacional.
Ahí, el 27 por ciento de la población es indígena –en todo el país el promedio es del 10 por ciento-. El Producto Interno Bruto (PIB) per cápita, creció solo una séptima parte de lo que se incrementó en el norte y el Bajío.
En esas últimas zonas, el PIB creció un 47 por ciento entre 1980 y el 2013; en el sur, en cambio, el crecimiento fue solo del 7 por ciento, en el mismo periodo.
La productividad laboral en la región norte del país es 2.6 veces más la del sur.
“El rezago en la región Sur se explica en gran medida a que se realizan actividades de baja productividad y a que su desarrollo industrial todavía es limitado.
“En Chiapas, Guerrero y Oaxaca, la mitad de la población ocupada se concentra en sectores tradicionales poco productivos, mientras que alrededor del 8 por ciento se dedica a actividades manufactureras, de mayor productividad”, sostiene el dictamen aprobado.
Las ZEE se deberán establecer en una región, conformada por uno o más municipios, cuya población conjunta sea de entre 50 mil y 500 mil habitantes.
Solo se podrán establecer en las 10 entidades federativas que tengan mayor incidencia de pobreza multidimensional y donde existan más personas en situación de pobreza.
Su ubicación debe ser estratégica; debe conectar con carreteras, aeropuertos, ferrocarriles, puertos o corredores interoceánicos.
La práctica de establecer ZEE no es nueva. En el mundo, existen más de 3 mil 500 Zonas Económicas Especiales. Países como China, Corea, India, Malasia, Irlanda o Polonia han hecho uso de este esquema.
El crecimiento de estas zonas fue exponencial entre 1975 y el 2006, al pasar de 79 ZEE en 29 países, a 3 mil 500 en 130 naciones.
En México, el presidente Enrique Peña Nieto ha expresado su intención de lanzar tres nuevas zonas especiales.
Nuevas Zonas Especiales
Al presentar la iniciativa de la Ley de Zonas Económicas Especiales, en septiembre pasado, el Ejecutivo hizo pública su intención de crear tres nuevas ZEE que potenciarían el desarrollo de zonas marginadas del país.
La primera de ellas es el Corredor Industrial Interoceánico, en el Istmo de Tehuantepec. Conectará al Golfo de México con el Océano Pacífico.
Esta ZEE tendrá influencia en los estados de Veracruz y Oaxaca, pues sus polos de desarrollo estarán en las ciudades de Coatzacoalcos y Salina Cruz.
La segunda se ubicará en los municipios de Michoacán y Guerrero que colindan con el puerto de Lázaro Cárdenas.
La tercera estará en Puerto Chiapas, ubicado en la localidad de Puerto Madero, Chiapas.
El Ejecutivo apuesta a que con estas nuevas tres ZEE, se crearán 115 mil empleos directos en los próximos 10 años.
Una vez aprobada la Ley por el Senado, el Ejecutivo podrá crear las Zonas Especiales por decreto.
La intención del Gobierno federal es que en los siguientes dos años se comience la construcción de infraestructura de estas tres ZEE.
“La visión es que para el 2018 se establezca al menos una empresa ancla o tractora en cada Zona planteada, con sus respectivas empresas proveedoras”, expone el proyecto presidencial.
A estas ZEE podrán sumarse otras, por tratarse de un proyecto transexenal que comenzará en el 2016.