Diputados, buenos para faltar
Los diputados de la 64 Legislatura pueden faltar varias veces sin que haya repercusiones en sus salarios que superan los 90 mil pesos al mes con sólo solicitar el permiso de la Mesa Directiva o con una justificación
Eduardo BuendiaPara la mayoría de los ciudadanos no presentarse en el trabajo o ausentarse durante la jornada laboral es motivo de llamadas de atención por parte de los patrones o de descuentos que se ven reflejados en los pagos de nómina.
Pero esto no es así para los diputados. Estos legisladores con el permiso de la Mesa Directiva o con una justificación pueden faltar varias veces sin que haya repercusiones en sus salarios que superan al mes los 90 mil pesos.
Lo anterior es evidente en la 64 Legislatura, la cual inició apenas en septiembre pasado y en la que hay diputados que constantemente se apartan de su curul bajo cualquier pretexto o encargo y no se presentan o se retiran.
También hay congresistas que llegan a pasar lista, pero al momento de votar reformas no están. Es decir, salen del pleno de sesiones a atender otros asuntos sin poner atención a su principal labor que es legislar.
Reporte Indigo revisó las listas de asistencia de 14 sesiones ordinarias en San Lázaro entre el 1 de septiembre y el 11 de octubre, mismas que se encuentran de manera pública en el portal web de la Cámara baja.
En dichos reportes se constató que 206 de los 500 diputados se han ausentado en al menos una ocasión y que los de la bancada de Morena resultan ser los más faltistas. También se comprobó que en promedio 21 diputados faltaron por sesión.
Lo anterior difiere con la encomienda máxima que ha impuesto el presidente de la Mesa Directiva en San Lázaro, el diputado también integrante de Morena, Porfirio Muñoz Ledo, quien ha buscado que los diputados “dignifiquen el Congreso”.
Los legisladores no han guardado la compostura y cometen actos como llegar tarde o faltar.
Como muestra, está el video publicado en Twitter por el mismo Muñoz Ledo, de la sesión ordinaria del 30 de octubre, en la que lamentó que no hubo quórum suficiente para iniciar el ejercicio.
Además de las casi 300 faltas, en las listas hay registros de 38 “asistencias por cédula” que quiere decir que los diputados llegaron después de que dio inicio la sesión.
Los más faltistas
Aún cuando una falta sin justificación puede derivar en un descuento a su salario, los diputados tienen precaución para que eso no suceda y excusan sus ausencias o piden permiso para no ver una disminución en sus dietas mensuales.
Pese a que la Cámara de Diputados publica periódicamente las listas de asistencia, en estas no se explica a detalle el motivo por el cual los legisladores no acuden a las sesiones. Solamente el listado cuenta con los nombres y a un lado se leen las leyendas: inasistencia, permiso de la Mesa Directiva, falta justificada, “no presente en la mitad de las votaciones” o señala cuando acuden a algún acto oficial de sus comisiones.
La diputada de Morena por Quintana Roo, Carmen Patricia Palma Olvera, es la que más ausencias reunió entre septiembre y el 11 de octubre.
De 14 sesiones revisadas en ese periodo, la diputada sólo estuvo presente en siete; reúne seis faltas con permiso de la Mesa Directiva y una más justificada.
El segundo y el tercer lugar también son para los diputados de Morena, Gabriela Cuevas Barrón y Zoé Robledo Aburto.
Gabriela Cuevas se ha ausentado en seis ocasiones de las sesiones de la Cámara de Diputados; cinco de ellas fueron entre el 18 y 27 de septiembre. En ese periodo, la expanista realizó una gira de trabajo por Europa en donde acudió al evento “Mujeres de países del G20”. La falta restante tuvo permiso de la Mesa Directiva para justificar sus inasistencias.
Por su parte, Zoé Robledo Aburto, quien recientemente solicitó licencia para desempeñarse como subsecretario de Gobernación en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, faltó a seis sesiones, de las cuales cuatro fueron inasistencias injustificadas, una más estuvo justificada y en la restante tuvo que realizar labores de su comisión.
La diputada de Morena por Tabasco, Laura Patricia Ávalos Magaña, tampoco asistió al Pleno en seis ocasiones, en su caso obtuvo los seis permisos por parte de la Mesa Directiva.
En una situación similar está la legisladora del PAN Antonia Natividad Díaz Jiménez, quien faltó a cinco sesiones entre el 1 de septiembre y el 2 de octubre, con el aval de la Mesa Directiva. El 5 de octubre, el Pleno le otorgó licencia para despegarse de su cargo como diputada federal.
Con permiso para ausentarse
De acuerdo con el análisis de los datos, entre septiembre y el 11 de octubre se han registrado 295 faltas en el Pleno de San Lázaro, de las cuales 179 se justificaron, en 82 los legisladores recibieron el permiso de la Mesa Directiva para ausentarse, 27 fueron inasistencias sin justificación y en 7 los congresistas no estaban a la hora de votar.
El reglamento de la Cámara de Diputados señala en su artículo 45 que los diputados deberán registrar su asistencia al inicio de las sesiones mediante el sistema electrónico. No obstante, hay diversas maneras para no quedarse a trabajar o para salir a realizar otras tareas.
Una manera para justificar faltas es entregando una constancia de enfermedad u otros motivos de salud avalada por los servicios médicos de la Cámara baja; por maternidad o paternidad; o por el cumplimiento de encomiendas autorizadas previamente por el Pleno, la Junta de Coordinación Política o la Mesa Directiva.
Pero los diputados pueden ausentarse si obtienen el permiso de su coordinador parlamentario o de un representante de la Mesa Directiva, según el artículo 48 del reglamento del órgano legislativo.
En la normativa también se detalla que “en ningún caso podrán justificarse más de seis inasistencias en un mismo periodo de Sesiones ordinarias”, por lo que hasta el 11 de octubre, algunos diputados ya estaban por extinguir su número permitido de faltas.
En febrero pasado, la Cámara baja informó mediante un oficio que había descontado 372 mil 335 pesos a 57 diputados federales de la 63 Legislatura por haber faltado entre septiembre de 2015 y diciembre de 2017. En ese momento, el descuento por ausencia de los diputados rondaba los 3 mil 500 por día.
Los diputados acordaron en septiembre ganar un salario mensual de 91 mil 507 mensuales, por lo que una falta significaría un descuento cercano a los 3 mil 50 pesos.