La movilidad en la Ciudad de México padece las secuelas de la pandemia de COVID-19 y el modo de traslado más importante, el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, no ha podido recuperarse.
Datos de operación del STC señalan que el Metro, al término de 2021, no transportó al mismo número de personas que movía en 2019, previo al inicio de la contingencia sanitaria.
En contraste con lo anterior, el uso del automóvil ha ido en aumento; expertos afirman que la capital del país cada día está más saturada de coches.
Las cifras del Metro
El 60 por ciento de las líneas del Metro en funcionamiento durante 2021 registraron una afluencia de usuarios menor a la de 2019, a pesar de que para el año pasado las actividades económicas en la capital del país ya se habían reactivado, revelan Estadísticas de Operación del Metro que se pueden consultar en su portal electrónico.
La contingencia sanitaria por COVID-19 provocó que de marzo de 2020 a julio de 2020, las actividades económicas no esenciales fueran suspendidas como medida para evitar contagios. A partir de agosto de dicho año, los negocios fueron reabriendo y, para 2021, la gran parte de las actividades ya estaban otra vez en funcionamiento, incluidas las escuelas.
Los datos consultados revelan que las líneas 2, 3, 4, 6, 7 y B son las que tienen números rojos en 2021 en comparación de 2019.
La Línea 2 transportó en 2019 un total de 269 millones 149 mil 446 usuarios, mientras que para el 2021 fueron 113 millones 653 mil 415 personas, 57 por ciento menos.
Por otra parte, la Línea 3 tuvo una afluencia total de 222 millones 368 mil personas en 2019; y para 2021 fueron 107 millones 534 mil 584 usuarios, 51 por ciento menos.
Mientras que la Línea 4 movilizó en 2019 a 29 millones 13 mil 32 personas; y en el 2021 a 15 millones 932 mil 642, lo que representa una reducción de 45 por ciento.
En cuarto lugar está la Línea 6, que durante 2019 tuvo una afluencia de 49 millones 945 mil usuarios, cifra que se redujo en 2021 a 23 millones 533 mil 445, 52 por ciento menos.
A su vez, la Línea 7 transportó en 2019 a 108 millones 152 mil 51 personas; y en 2021 a 51 millones 915 mil 97, lo que significa una disminución de 52 por ciento.
Por último, en 2019, la Línea B tuvo 152 millones 545 mil 958 usuarios; mientras que en 2021 hubo 87 millones 519 mil, 42.6 por ciento menos.
Las demás líneas, excepto la 12 que no está funcionando, tienen una variación porcentual positiva de usuarios en 2021 respecto a 2019, del 1 al 6 por ciento.
En contraste a la baja de usuarios, el tránsito vehicular en la capital va en aumento.
Según el Reporte Trimestral de Hechos de Tránsito Octubre-Diciembre de 2021, elaborado por la Secretaría de Movilidad (Semovi) de la Ciudad de México, para el cierre de ese año, el tránsito vehicular aumentó casi al mismo nivel que la etapa prepandemia.
“Para el cuarto trimestre de 2021 (semáforo epidemiológico verde), el tránsito vehicular se recuperó (…) representando 97 por ciento de la movilidad previa a la pandemia”, detalla el documento.
#Entérate | Esta mañana, trabajadores de limpieza demandan el pago atrasado de sus salarios y el respeto sus derechos laborales frente a las oficinas centrales del Metrohttps://t.co/nsGlUU6Uul pic.twitter.com/VFByDiXIr6
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) May 11, 2022
Miedo al transporte público
Son 2 factores que provocan principalmente a que la afluencia en el Metro no alcance los niveles prepandemia: el estigma de que es un lugar donde hay muchos contagios de COVID-19; y que el sistema no tiene la misma oferta de servicio que en 2019, dice Manuel Suárez Lastra, especialista en movilidad y director del Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Respecto al primer punto, Suárez Lastra menciona que el estigma que padece el transporte público ha hecho que más personas usen el automóvil como modo de traslado libre de contagio.
Por otra parte, señala Suárez Lastra, el Metro no se ha recuperado porque 5 de sus 12 líneas operan al 50 por ciento de su capacidad debido al incendio del 3 de mayo de 2021 que padeció el Puesto de Control Central (PCC) y que hasta la fecha sigue sin operar.
“Ese puesto de control era el que controlaba el flujo de trenes de manera automática; y actualmente opera al 50 por ciento de su capacidad porque el control de trenes es manual”, dice.
Dicho puesto de control era el que supervisaba el tránsito de trenes de las líneas 1, 2, 3, 4 y 5.
El especialista considera que el Metro recuperará su afluencia cuando vuelva a operar al 100 por ciento.
“Cuando la oferta se recupere, gradualmente la demanda irá en aumento y se recuperará, independientemente del otro factor”, comenta.
En mayo pasado, las autoridades de la Ciudad de México dieron a conocer que el nuevo PCC estará en las instalaciones del C5 de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la capital; sin embargo, no informaron la fecha de la conclusión de los trabajos.