Doblan al PRI en ley laboral
No le quedó opción. El PRI tuvo que rendirse, doblar las manos. La presión ejercida por una alianza entre el PAN y los partidos de izquierda para implementar criterios de transparencia en los sindicatos triunfó.
A tan solo un par de días de que dos de los más grandes sindicatos del país, el petrolero y el magisterial, eligieran por seis años más a sus líderes con una votación de mano alzada, el PRI buscó perpetuar este método de elección.
Armando Estrop
No le quedó opción. El PRI tuvo que rendirse, doblar las manos. La presión ejercida por una alianza entre el PAN y los partidos de izquierda para implementar criterios de transparencia en los sindicatos triunfó.
A tan solo un par de días de que dos de los más grandes sindicatos del país, el petrolero y el magisterial, eligieran por seis años más a sus líderes con una votación de mano alzada, el PRI buscó perpetuar este método de elección.
Se resistió durante semanas con el argumento de que era inconstitucional y se tenía que respetar la autonomía de los sindicatos pero finalmente no quiso pagar el costo político de esta defensa.
Así, aceptó que el gasto administrativo sea transparentado. Y aunque no quiso apoyar la elección democrática no le alcanzaron los números. Tuvo una probada del chocolate que en muchas ocasiones ha dado a sus adversarios.
La minuta será regresada a la Cámara de Diputados.
El acuerdo priista para aceptar la transparencia sindical se dio cuando ya se discutían los artículos reservados.
Todavía en el posicionamiento que hizo el senador David Penchyna se mantuvieron en su dicho de respetar la autonomía sindical.
En la bancada priista hay al menos tres claros representantes de estos intereses: Carlos Romero Deschamps, líder de los petroleros; Isaías González Cuevas, líder de la CROC y Armando Neyra, Secretario de Finanazas de la CTM.
Los dos últimos estuvieron en la Comisión del Trabajo defendiendo a ultranza que no se tocara para nada los ocho artículos en esta materia.
González Cuevas incluso dijo que si ya se había aprobado en la Cámara en esos términos no había ni siquiera razones para volver a revisar el tema.
Sin embargo ante las presiones y la efectividad que vieron en la alianza del PAN con los partidos de izquierda, el PRI retrocedió en su intentona. El costo político incluiría no solo a las bancadas sino al propio presidente electo Enrique Peña Nieto.
Paradojicamente en los posicionamientos de los partidos, Mónica Arriola, hija de la líder del sindicato magisterial, Elba Esther Gordillo, defendió la transparencia y la democracia sindical.
Luego de una tensa calma se llegó a las reservas. El PRI no lo hizo al principio.
Hubo reservas a 59 artículos. Solo en ocho hubo coincidencias entre el bloque opositor al PRI.
Fue entonces, luego de varias horas de sesión, cuando el Senador Arturo Zamora, quien antes había pedido que se aclarara que las solicitudes del PRI no eran para hacer adiciones sino para el uso de la palabra, dio la sorpresa.
Pasó a la tribuna luego su homólogo perredista Zoé Robledo para pedir que se agregara a su bancada en la reforma al artículo 364 bis y se inscribiera a la hora del registro de un sindicato la obligación de transparencia en su actuar.
“Estamos de acuerdo en la transparencia sindical, porque finalmente, sabemos que todos los líderes sindicales y todas las agrupaciones han venido cumpliendo de manera puntual con el proceso de información que está reglamentado en la norma secundaria.
“Por esa razón nosotros decimos no a reformas decorativas o a reformas sin efectividad en su aplicación. El PRI está de acuerdo en reformas que finalmente sean para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y que modernicen las relaciones laborales”, lanzó desde la tribuna.
La votación tuvo los 128 votos. Unanimidad. Algo que pocas veces se ve en la Cámara alta. Lo mismo sucedió con la modificación del artículo 365 Bis, la votación fue con la totalidad de la integración de la Cámara alta.
En este artículo la argumentación priista la dio Arely Gómez, hermana de Leopoldo Gómez, presidente de noticieros Televisa. La panista Laura Rojas también presentó la modificación de otro artículo relativo a transparencia.
El 373 pidió se modificara para entregar informes detallados cada seis meses con el destino del dinero de las cuotas sindicales. Los priistas ya se habían echado para adelante, y se mantuvieron. Se aprobaron que estos informes semestrales se entreguen de manera individualizada a cada uno de los agremiados.
Y además el artículo establece que si hay inconformidad por parte de los trabajadores en el uso del dinero, o en la entrega de la información, podrán iniciar un procedimiento interno por incumplimiento con esta norma.
No a democracia sindical
El panista Javier Corral fue quien subió la reserva al artículo 371 para elegir democráticamente a los líderes sindicales y ahí ya no llegó el PRI. Se notó que sabía que el compromiso del tricolor era limitado.
“Vamos a ver hasta dónde llega el PRI”, soltó como introducción de su discurso al presentar la propuesta de redacción.
El discurso de la transparencia es una cosa, pero poner el peligro la elección de sus compañeros diputados y senadores como líderes sindicales es otra. Tema intocable.
Ahí, el PRI ya no quiso entrarle. Sin embargo la unión de los partidos de izquierda con el PAN les alcanzó con votos para modificar ese artículo.
El coordinador de los senadores del PRD, Miguel Barbosa, solicitó que para la votación de este artículo se hiciera de manera nominal y de esa forma obligar a que cada uno de los priistas de manera individual y con su nombre diera su voto.
Para ponerlos en evidencia pues. Los priistas votaron a favor de que se discutiera el tema, pero en contra de que se reformara el artículo.
Hubo discusión y el Partido Verde en voz de Pablo Escudero fue el primero en subir a la tribuna para hablar en contra. Su argumento fue que la redacción propuesta por Corral violaba el instrumento internacional de agrupación sindical firmado por México.
El priista Humberto Mayans Canabal dijo que modificar la vida sindical podría generar una violación constitucional que pondría en riesgo toda la reforma. Además de que ahuyentaría la inversión internacional. Su discurso cerró entre aplausos y gritos de sus compañeros de partido.
Llamó la atención que a tribuna no subió ni Romero Deschamps ni González Cuevas ni Neyra. La defensa a ultranza ya no la hicieron ellos.
Luisa María Calderón, la hermana del presidente, reprochó al PRI cerrarse en este tema.
Les pidió que se arriesgaran, que les dieran la oportunidad por primera vez en su vida a los trabajadores sindicalizados de ser libres y escoger a sus líderes sin miedo.
“Nosotros no tenemos que decirnos renovados”, lanzó Roberto Gil.
Mónica Arriola, la hija de Elba Esther, sorprendió nuevamente. Habló a favor de la democracia sindical, y claro, su mamá ya logró seis años más en el SNTE y la ley no es retroactiva.
Fue luego de ese extraño discurso donde la coalición de votos del PAN, PRD, PT y Movimiento Ciudadano mostró su músculo. 67 votos a favor y 61 en contra.
Gritos y un largo aplauso precedieron a esta votación que ya puede ser considerada histórica y que romperá con el paradigma de que los sindicatos aliados al PRI son intocables.
Los priistas no pudieron esconder su desconcierto. Es la primera elección perdida de esa forma a pesar de que lograron ser grupo mayor en ambas cámaras y su regreso a la Presidencia de la República.
Desde el inicio de la sesión las cosas no iban bien para el PRI. Se tocaron algunos temas antes de entrar a la discusión de la reforma laboral, pero al llegar a ese punto no estaban todos los priistas.
Layda Sansores de Movimiento Ciudadano, dijo que con su ausencia demostraban la importancia que le daban al tema. Desde esas horas se veían los rostros de nerviosismo.
Días antes, el PRI tenía claro que solo juntaban, con su aliado el PRI y la única senadora del PANAL, 62 votos, contra los 66 de la unión que logró la izquierda con Acción Nacional.
Ahora solo quedaban dos caminos. Un acuerdo para que se envíe al Ejecutivo todo lo ya aprobado regresando a la Cámara solo los artículos modificados o que se envíe toda la minuta.
En ambos casos quedará en el PRI cerrar este tema, pues la reglamentación de la iniciativa preferente ya no regula el seguimiento que ahora se le tiene que dar. Por eso corre el riesgo de que duerma el sueño de los justos.
Elba Esther Gordillo
— Presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación
— Asumió el cargo en 1989
— Va por otros seis años para cumplir 29
Inició su carrera política en el PRI en 1970, partido por el que fue Senadora así como Presidenta de la Cámara de Diputados. También fue Secretaria General de la CNOP del PRI de 1996 al 2002, cuando rindió protesta como secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional del partido. En el 2005 rompió con su partido tras diferencias con el candidato a la presidencia, Roberto Madrazo.
Carlos Romero Deschamps
— Líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros
— Asumió el cargo en 1993
— Va por seis años más, serán 25 años en total
Llegó al poder en 1992 tras ser promovido por el presidente en turno, Carlos Salinas de Gortari, a quien le juró “jamás haremos ninguna alianza con los enemigos de nuestro partido ni con los adversarios del señor presidente”.
Le debe su carrera política a Joaquín Hernández Galicia “La Quina” quien fue arrestado en 1989.
Francisco Hernández Juárez
— Dirigente del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana
— Asumió en 1976
— 28 años como líder sindical
Comenzó su carrera a los 16 años en Teléfonos de México y 10 años más tarde, en 1976, fue electo Secretario General del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana. Un año más tarde, en 1987, fue electo presidente del Congreso de Trabajo.
En el 2002 fue designado presidente de los sindicatos de telecomunicaciones del continente americano para el sindicato mundial Union Work International.
Joaquín Gamboa Pascoe
— Secretario General de la Confederación de Trabajadores de México
— Asumió el cargo en 2005
— 7 años en el poder
Dirige la Federación de Trabajadores del Distrito Federal y la Confederación de Trabajadores de México desde el mismo año.
Ha representado al PRI como legislador federal en diferentes ocasiones, recientemente como diputado federal en la legislatura 2009-2012
En el 2010 fue reelecto para desempeñar su cargo como líder sindical hasta el 2016.
Beltrones bien librado
La presión que recibió el PRI por defender a los líderes sindicales recayó totalmente sobre el líder de los senadores, Emilio Gamboa. Experimentado en los intríngulis políticos esta vez no tuvo salida. Los números no le alcanzaron.
Asumir el costo político antes de que su partido regrese a Los Pinos con Enrique Peña Nieto era muy alto.
Y es que primero, en la Cámara de Diputados, el PRI mutiló estos conceptos de transparencia. Ahí Manlio Fabio Beltrones logró un acuerdo con el PAN para quitar esos temas, aprobarlos y enviarlos a la Cámara revisora.
De pronto el tema creció. Los propios empresarios iniciaron una presión mediante desplegados en periódicos para que se aprobara en sus términos el proyecto de reforma laboral.
Y finalmente Gamboa tuvo que ceder sin cumplir con la solicitud de los empresarios. Dio un golpe de timón. Echó abajo los días de defensa de sus compañeros sindicalistas.
De esos que incluso amenazaron, con una carta del líder cetemista, Joaquín Gamboa Pascoe, que si se modificaba la reforma la enviarían a la congeladora legislativa en la Cámara de Diputados.
Por eso ganó la partida Beltrones. Se la ganó a su colega en el Senado y el propio Enrique Peña Nieto pues no tuvo la presión que hubo en el Senado y no hizo modificaciones en contra de los de su propio partido.
Tampoco dejó colgados a los integrantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
La reforma laboral fue la última de las llamadas reformas estructurales que presentó Felipe Calderón, desde un principio incluía el meter en orden a los sindicatos. Pero los diputados lo cortaron.
Fue hasta que llegó al Senado y a través de uno de sus más cercanos colaboradores, hoy Senador, Javier Lozano, como Calderón logró que este tópico reviviera.
Esta reforma demostró que la alianza de los partidos de izquierda y el PAN puede tener frutos, que pueden doblar al PRI, con todo y su larga experiencia. Sin tomas de tribuna y sin bloqueos en avenidas, solo con votos.
Lo que dice el artículo 72
E. Si un proyecto de ley o decreto fuese desechado en parte, o modificado, o adicionado por la Cámara revisora, la nueva discusión de laCámara de su origen versará únicamente sobre lo desechado o sobre las reformas o adiciones, sin poder alterarse en manera alguna los artículos aprobados. Si las adiciones o reformas hechas por la Cámara revisora fuesen aprobadas por la mayoría absoluta de los votos presentes en la Cámara de su origen, se pasará todo el proyecto al Ejecutivo, para los efectos de la fracción A. Si las adiciones o reformas hechas por la Cámara revisora fueren reprobadas por lamayoría de votos en la Cámara de su origen, volverán a aquella para que tome en consideración las razones de ésta, y si por mayoría absoluta de votos presentes se desecharen en esta segunda revisión dichas adiciones o reformas, el proyecto, en lo que haya sido aprobado por ambas Cámaras, se pasará al Ejecutivo para los efectos de la fracción A. Si la Cámara revisora insistiere, por la mayoría absoluta de votos presentes, en dichas adiciones o reformas,todo el proyecto no volverá a presentarse sino hasta el siguiente período de sesiones, a no ser que ambas Cámaras acuerden, por la mayoría absoluta de sus miembros presentes, que se expida la ley o decreto sólo con los artículos aprobados, y que se reserven los adicionados o reformados para su examen y votación en las sesiones siguientes.