No son los hermanos Wright. Son Jesús y Rafael Guajardo Briones. Dos funcionarios del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
Hermanos y parte de las denuncias que personal del aeropuerto han hecho a raíz de una serie de serie de nuevos nombramientos que se han dado en la terminal aérea desde principios de agosto.
Jesús Guajardo Briones es director general adjunto de Operaciones y su hermano Rafael recién fue nombrado como subgerente de Desarrollo de la Gerencia de Desarrollo Informático.
Si bien no existe un impedimento legal por este tipo de contrataciones el personal que ha hecho las denuncias, incluso a la Secretaría de la Función Pública, asegura que es parte de una red de complicidades que se ha estado tejiendo en el AICM.
Rafael tiene un puesto nada despreciable. Gana al menos un salario bruto de 19 mil 432 pesos, además de contar con un seguro de gastos médicos mayores, prima vacacional, aguinaldo y otras prestaciones.
En el organigrama depende directamente del gerente de su área David Flores y este a su vez del director general adjunto de Administración, Miguel Ángel Marcos Morales.
Todo indica que los cargos en el AICM no están sujetos al servicio profesional de carrera y por eso entre familiares pueden ayudarse a conseguir un empleo. Por esto y también por el nombramiento de Rafael Castro González como director general adjunto Comercial es que el Senador del Partido del Trabajo, David Monreal prepara un punto de acuerdo.
Castro González estuvo involucrado en un caso de presunta corrupción entre los laboratorios Novartis y el IMSS, además de que ya fue denunciado de manera anónima ante la Secretaría de la Función Pública por una serie de irregularidades, entre ellas pedir que se saque licor de las tiendas Duty Free a través de uno de sus subalternos.
El legislador presentará la siguiente semana el punto de acuerdo para que tanto el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México así como la Secretaría de Comunicaciones y Transportes informen cuáles son los criterio de contratación de sus funcionarios.
El objetivo es saber si responde a criterios del perfil del trabajo o simplemente se les contrata por sus relaciones de amistad con los altos directivos.
Se pedirá además a ambas dependencias que expliquen cuáles son candados que se ponen a los aspirantes a puestos del aeropuerto para que no lleguen personas con pasados de corrupción o proclives a realizar una mala acción.
Próxima denuncia
Fuentes allegadas a la terminal aérea confirmaron que los representantes de las tiendas libres de impuestos (Duty Free) están preparando una denuncia pública por la actuación de otro funcionario de nombre José Felipe Espínola Castro, que es parte del equipo de Rafael Castro González y que también es mencionado en el expediente DE-0033/2013-SACM que la Secretaría de la Función Pública investiga desde finales de septiembre.
Y es que el personal de estas tiendas asegura que hay un establecimiento privilegiado por Castro González porque lograron un presunto arreglo económico. Indicaron que en septiembre se cerró el acceso a las últimas salas de espera a través de la puerta G de la Terminal 1 obligando a los pasajeros a estar más tiempo en el área del comercio al que está beneficiando.
Se publicó copia del expediente en contra del funcionario y tampoco el AICM salió en su defensa.
Fue Rafael Castro quien aseguró en entrevista que no estaba notificado de la investigación que hacía la Función Pública desde el 24 de septiembre y de la que el director general del AICM, Alfonso Sarabia recibió oficialmente.
