Menos cajones ¿más viviendas?

Con las recientes crisis de contaminación a cuestas, el Gobierno de la Ciudad de México promulgó la Norma Técnica para la Reducción de Estacionamientos para Automóviles que busca frenar la construcción de cajones, bajarle al uso del automóvil e impulsar el transporte público.

La autoridades locales, con el apoyo de expertos en movilidad, buscan darle la vuelta a la idea de que más cajones de estacionamiento ayudan a mitigar la congestión vial cuando es al contrario, ya que representa un subsidio al automóvil e incentiva su uso masivo.

La proliferación de cajones para estacionamiento ha propiciado, entre otros factores, que aumente en millones el parque vehicular particular, mientras el 71 por ciento de las personas que se mueven en transporte público de la Ciudad de México son relegadas.

De acuerdo con cifras oficiales, el 71.3 por ciento de quienes se trasladan en la capital se mueven en transporte público, el 21.5 por ciento en automóvil particular, el 5.4 por ciento en taxi, mientras que sólo un 0.8 por ciento en bicicleta.

Para la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), la regulación actual de construcciones en materia de estacionamientos está basada en información falsa que explica que entre más estacionamiento haya en la ciudad, mayor es el beneficio público.

Se piensa que el estacionamiento mitiga los impactos viales, cuando en realidad hace todo lo contrario y propicia que los lugares de estacionamiento encarezcan drásticamente el costo de los inmuebles cercanos al transporte público, fomenta el uso del automóvil y generan contaminación.

Por la sustentabilidad

La Norma Técnica que se presentó ayer está basada en estudios del Instituto de Políticas para el Transporte y Desarrollo (ITDP) y el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), documento denominado “Menos Cajones, Más Ciudad” que concluye entre otras cosas que los cajones de estacionamiento sólo encarecen el precio de las viviendas.

Ambas organizaciones estudian la problemática desde hace años y hasta ayer se promulgó la Ley para frenar la proliferación de cajones, pues en la capital hay más de éstos que oficinas y viviendas.

Según estimaciones del IMCO, por ejemplo, en la capital de la República existen casi 7 millones de cajones de estacionamiento, de los cuales, casi 2 millones se concentran en zonas centrales de la ciudad, a pesar de que estas cuentan con una alta cobertura de transporte público como Metro, Metrobús y microbuses.

La nueva Norma no prohíbe sino que minimiza la construcción de cajones para así impulsar más biciestacionamientos y no autos, resumió Felipe de Jesús Gutiérrez, secretario de Desarrollo Urbano en la ciudad.

Este marco reglamentario establece a los desarrolladores un máximo de cajones de estacionamiento que podrán incluir en sus construcciones, al tiempo que elimina los requerimientos mínimos de estos espacios.

Si los constructores decidieran o requieran hacer más espacios de lo permitido, pagarán una multa destinada al Fondo de Movilidad local.

En la presentación el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, explicó que habrá “un costo para el desarrollador que se va a ir directamente a un Fondo de Movilidad para mejorar aquí en nuestra capital y en dicho fondo entra la parte peatonal, las ciclovías y el transporte público, que son una exigencia en esta ciudad”.

Mancera Espinosa, a quien le ha tocado lidiar con las contingencias ambientales, detalló que se trata de una transformación que beneficiará de manera integral a los habitantes de la CDMX, ante la necesidad de viviendas cercanas a los espacios de trabajo y comercios.

“Es algo que ya hay en otros países desarrollados y hoy tenemos que aprovechar lo que nos está demostrando que se ha probado en otros lugares”.

El Jefe de Gobierno exhortó a los propietarios de los principales edificios de Avenida Paseo de la Reforma: Torre Reforma, Torre Bancomer y Torre Mayor, las cuales suman alrededor de 10 mil cajones de estacionamiento, a aprovechar los espacios, convirtiéndolos en oficinas virtuales,  gimnasios y centros de convivencia para los empleados.

Sostuvo que la CDMX impulsará estas acciones a fin de continuar en la ruta de cambio hacia la sustentabilidad.

“Vamos a tener mayor número de viviendas, le vamos a exigir menos a los desarrolladores en cajones de estacionamiento y va a ser un cambio total; estamos en la ruta correcta, la Ciudad de México será mucho más sustentable si esta demanda de 70 mil viviendas la atendemos y sustituimos los cajones de estacionamiento”.

La citada Norma se revisará y actualizará con una periodicidad de tres años y será una de las propuestas que llevará el jefe de Gobierno ante la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) para buscar que se replique a nivel nacional.