El 68 es un pendiente que retoma el YoSoy132
Para Alberto del Castillo Troncoso, investigador del Instituto Mora del Conacyt, el 68 y el YoSoy132 son movimientos juveniles que surgen en una coyuntura política. Ambos “no tienen ninguna demanda estudiantil; sus demandas son políticas”.
En el caso del 68, explica el autor del libro “Ensayo sobre el movimiento estudiantil de 1968.
Georgina Howard
Para Alberto del Castillo Troncoso, investigador del Instituto Mora del Conacyt, el 68 y el YoSoy132 son movimientos juveniles que surgen en una coyuntura política. Ambos “no tienen ninguna demanda estudiantil; sus demandas son políticas”.
En el caso del 68, explica el autor del libro “Ensayo sobre el movimiento estudiantil de 1968.
La fotografía y la construcción de un imaginario”, sus demandas son la reivindicación del estado de derecho, el diálogo público y su pliego petitiorio. En cambio, el YoSoy132 surge en la campaña política de Enrique Peña Nieto, como una necesidad de revindicar la democracia y de abrir los medios de comunicación.
“Como el punto más vulnerable de ausencia de un proyecto democrático para el país”. En este sentido, ambos movimientos están “emparentados” y tienen continuidad.
“Que el 132 haya surgido con esas propuestas y haya tenido esa resonancia a nivel nacional, nos indica que hay un punto que no se logró en el 68”.
Es decir, explica, el 68 no logró en lo inmediato ese cambio en la lucha cultural y política de esa generación.
Para entenderlo, hay que ver lo que sucedió en las siguientes décadas, porque en lo inmediato no lo logró, se quedó detenido, sostiene.
De manera que “es una cuenta pendiente que arrastra el país desde el 68 y con el 132 se está rescatando esta parte”.
Las diferencias, agrega, es que el 68 se levantó contra un Estado centralizado, muy poderoso, que tenía la capacidad de controlar los medios y muchos intereses económicos y politicos hacia el interior del país.
“Esto ha cambiado en las últimas cuatro décadas porque hoy tenemos una figura presidencial muy débil, muy vulnerable”.
Y va más allá: “tenemos un Estado feudalizado donde los los gobernadores son los señores feudales (…)
De manera que el de hoy nace en un contexto político muy distinto al del 68, dice.
El YoSoy132 ha mostrado, obviamente por la coyuntura que le ha tocado vivir, una capacidad enorme de despliegue tecnológico a su favor, a través de redes sociales y donde la capacidad de réplica es inmediata.
Si lo comparamos con el 68, es como irnos a la prehistoria pues el despliegue tecnológico que tenía aquél a su alcance era artesanal.
De ahí que la capacidad de enfrentamiento tecnológico del YoSoy132 y el del 68 tengan años luz de diferencia.