Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, marcó en 2015 un hecho sin precedente en la política nacional de México: se convirtió en el primer gobernador independiente de Nuevo León.
Con un estilo desafiante, dicharachero y con su frase “la raza paga, la raza manda”, cautivó a la ciudadanía no sólo de este estado, sino a nivel nacional, incluso hasta de la prensa internacional.
Contra todos los pronósticos, “El Bronco” por primera vez derrotó al bipartidismo.
Y es que los candidatos de los dos partidos dominantes, Ivonne Álvarez del PRI y Felipe de Jesús Cantú del PAN, se vieron superados por el fenómeno independiente.
A través de una promoción en redes sociales, su alto grado de popularidad fue creciendo como la espuma durante sus 90 días de campaña rumbo a la gubernatura.
El fenómeno “Bronco” tomó fuerza, su victoria era inminente. Y así fue. Ganó con casi un millón de votos.
Llegó con el respaldo de la mayoría de los nuevoleoneses cabalgando a pasos fuertes a la silla gubernamental.
El clamor de justicia de la ciudadanía por un estado en ruinas financiera, que dejó el exgobernador Rodrigo Medina, pareciera que llegaría en la figura de “El Bronco”.
“Si robó, claro que lo voy a meter a la cárcel”, declaró públicamente a un televisora el pasado mes de junio en ese entonces el aún virtual gobernador independiente.
La investigación contra el exgobernador Medina y su padre Humberto Medina Ainslie sólo era cuestión de tiempo.
“Se le acabó la fiesta a los bandidos”, fueron sus primeras declaraciones ya como gobernador en la toma de protesta el pasado 4 de octubre en Congreso del Estado.
El posible castigo por el inexplicable enriquecimiento de “Los Medina” era alentador.
Sin embargo, en casi tres meses como gobernador pareciera que sólo ha quedado en el discurso, pues no se vislumbra una investigación de su Gobierno contra “Los Medina”.
Esto ha ocasionado que la confianza de la ciudadanía, que lo llevó a Palacio de Gobierno, se vaya diluyendo cada que su administración se hace vieja, y en cuanto a su popularidad, también se va deteriorando poco a poco.
Sólo una jugada jurídica perfecta contra “Los Medina”, podría recuperar la confianza de los nuevoleoneses.
El choque con el Congreso
La intención de crear un cobro por la verificación vehicular en la elaboración del Paquete Fiscal 2016 por la administración de Jaime Rodríguez Calderón, desató un choque llenó de críticas con el Congreso local.
El Gobierno independiente propuso el aumento del refrendo, revivir la Verificación Vehicular y eliminar la tenencia de manera gradual.
Este último impuesto, “El Bronco” en campaña electoral prometió quitarlo de manera total.
Pero la falta de operación política del gobierno de Rodríguez, terminó por empeorar la relación entre los dos poderes.
Esto causó severos roces entre el Gobierno con el diputado panista Arturo Salinas y el legislador priista Marco González, ambos líderes de bancadas de su partido en el Congreso.
Los dos diputados acusaron a Manuel González, secretario general de Gobierno, de no llevar un mensaje político correcto al gobernador.
Esto desató que los diputados tuvieron que mostrar una postura desafiante de no aprobar el paquete económico, mientras que “El Bronco” amagó con vetar el presupuesto.
La relación estaba deteriorada.
Pero el mandatario al sentir que tener una relación ríspida con el Congreso no era el camino correcto, por lo que decidió poner en marcha un plan “B”
El gobernador Jaime Rodríguez Calderón tuvo que negociar con los grupos de poder del PAN que controlan el Congreso como el Grupo San Nicolás de Zeferino Salgado y Raúl Gracia, así como con el líder de la CTM, Ismael Flores.
Fue así que se logró que la tenencia tuviera un descuento del 20 por ciento este 2016, dar marcha atrás el aumento en el refrendo y retirar la creación de la Verificación Vehicular.
La cordialidad duró poco.
El tesorero estatal Carlos Garza Ibarra, personaje ligado Fernando Elizondo, jefe de la Ejecutiva del Gabinete, propuso un aumento en el gasto corriente en el Paquete Fiscal 2016.
Argumento que el compromiso con el magisterio y seguridad era mucho.
Esto provocó que el Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo se enfrascaran otra vez en una serie de discusiones en la mesas de análisis del presupuesto de egresos.
Esto fue calificado como un “plan con maña” por Arturo Salinas, coordinador de la bancada del PAN en el Congreso.
Para los diputados el gasto corriente de 64 mil 793 millones de pesos, 3.5 por ciento más en comparación con los 61 mil 902 millones de pesos del ejercicio 2015, es sumamente excesivo.
Así, como el desembolso en servicios personales subirá en un 6.2 por ciento, ya que el gobernador solicitó la aprobación al Congreso local 16 mil 814 millones de pesos.
