El calvario que viene

El Gobierno del Distrito Federal aún no termina de resolver el conflicto por los daños que causó la construcción de la Línea 12 del Metro y ya se proyecta un listado de  nuevas afectaciones por la ampliación que tendrá la llamada “Línea Dorada” de Mixcoac a Observatorio.

Muchos de los afectados por la Línea 12 que corre de Tlahuac a Mixcoac aún continúan su peregrinar en busca de que el gobierno capitalino y las empresas constructoras les paguen los daños ocasionados a sus casas o comercios.

La Secretaría del Medio Ambiente del DF no ve problema en la ampliación, pues el impacto ambiental ya ocurrió
De Mixcoac a Observatorio se afectarán camellones, banquetas e inmuebles de propiedad privada
La Línea 12 se ampliará 2.6 kilómetros a los ya 25.1 que comprenden 20 estaciones de Tláhuac a Mixcoac
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El Gobierno del Distrito Federal aún no termina de resolver el conflicto por los daños que causó la construcción de la Línea 12 del Metro y ya se proyecta un listado de  nuevas afectaciones por la ampliación que tendrá la llamada “Línea Dorada” de Mixcoac a Observatorio.

Muchos de los afectados por la Línea 12 que corre de Tlahuac a Mixcoac aún continúan su peregrinar en busca de que el gobierno capitalino y las empresas constructoras les paguen los daños ocasionados a sus casas o comercios.

Pese a ello, ya se cuenta con una propuesta de afectaciones que ocasionará la ampliación de la ruta a fin de que el servicio llegue hasta la zona de Observatorio en la delegación Álvaro Obregón.

De acuerdo con estas proyecciones, las afectaciones se derivan en su mayoría por las lumbreras que se requieren para la construcción de los túneles para los accesos de las estaciones, salidas de emergencia y para la ventilación del sistema.

Más allá de los inconvenientes y molestias que una obra de esta magnitud ocasiona, la Línea 12 se ampliará 2.6 kilómetros adicionales a los 25.1 kilómetros que actualmente comprenden las 20 estaciones que dan el servicio de Tláhuac a Mixcoac.

Como parte de los trabajos proyectados para la extensión de la polémica Línea Dorada del metro se prevén afectaciones en parques, camellones, banquetas, negocios y vías federales propiedad de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), estacionamientos y también inmuebles propiedad privada.

La megaobra que inició y culminó Marcelo Ebrard Casaubón como jefe de Gobierno del Distrito Federal dejó deudas a vecinos que a más de cinco años reclaman el pago.

Hoy, la obra para ampliar el metro en esta zona abre la puerta para que, en su caso, se repitan los casos de daños a vivienda y negocios ocasionados por la maquinaria pesada. Este es el calvario que viene:

Los daños que se proyectan

Resultado de algunas visitas de campo efectuadas por la empresa Ingeniería y Procesos Industriales S.A. (IPISA), el proyecto estima afectación total en el predio que se ubica en Avenida Alta Tensión y Río Becerra,  que colinda con el terreno de una sucursal de la cadena McDonald’s.

Asimismo, el predio que ocupa la delegación Álvaro Obregón en la zona conocida como “Parque de la Juventud” en la colonia Cristo Rey, donde se estima resultará afectado un espacio de mil metros cuadrados debido a la construcción de una lumbrera de 21 metros de profundidad.

También de la misma delegación Álvaro Obregón, se afectará el predio que ésta utiliza como estacionamiento para sus vehículos de servicio.

En cuanto a los negocios impactados se enumera el predio que utiliza un Home Depot como bodega exterior, que se localiza en las calles de Rosa Blanca y  avenida Santa Lucía en la colonia Alfonso XIII.

La misma suerte correrá el espacio que utiliza como estacionamiento el negocio El Surtidor, que se encuentra en Sur 120, colonia Cove.

Así como el terreno que ocupa Semex en avenida San Antonio casi esquina con Alta Tensión.

Respecto a espacios públicos se enlista el camellón que se localiza en el bajopuente vehicular de avenida Central, que pasa por Río Becerra y San Antonio, donde se alojará una rejilla de ventilación natural.

La misma suerte para el andador peatonal Manuel Escandón; el camellón central de avenida Sur 122 y el camellón de avenida Jardón esquina Camino Real a Toluca, de la colonia José María Pino Suarez.

Las proyecciones arriba mencionadas son algunas de las afectaciones que la empresa que labore el proyecto definitivo de la ampliación de Línea 12 de Mixcoac a Observatorio podría agregar a la lista de impactos que causará la obra.

Desde hace poco más de tres meses, la Secretaría del Medio Ambiente del gobierno capitalino evalúa el impacto que tendrá la obra de ampliación de Línea 12 en este zona de la capital.

Para dicha dependencia, que encabeza Tanya Müller, los mayores estragos al medio ambiente ya ocurrieron cuando se construyó el actual tramo de la línea 12 que corre de Tláhuac a Mixcoac.

“Que de acuerdo a la ingeniería básica del tramo de Línea 12 entre Mixcoac y Observatorio, que se anexa, con este tramo de Línea, por ser en túnel profundo, las afectaciones al medio ambiente que ocurrirán para su construcción resultarán ser considerablemente de menor envergadura que las causadas por el tramo Tláhuac-Mixcoac”, detalla un documento de la secretaría del Medio Ambiente local.

Por lo tanto, la nueva ampliación que se pretende de Mixcoac a Observatorio es considerado propiamente como un complemento al mega proyecto que se trazó en el sexenio de Marcelo Ebrard y que ahora el gobierno de Miguel Ángel Mancera pretende completar.

Empieza el peregrinar

De concretarse el listado de daños que se proyectan con esta obra de ampliación, el gobierno de la ciudad tendría que resarcir a los propietarios de inmuebles afectados.

En la última fase del peregrinar de afectados por la Línea 12, el diputado federal del PAN, Jorge Francisco Sotomayor, presentó a la Secretaría de Gobierno capitalina el listado con los nombres de afectados que reclaman el pago al jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera.

De los 116 inmuebles cuyos propietarios  presentaron su queja para el reclamo de pago, al menos siete estaban repetidos en la lista que presentó el diputado Sotomayor.

Contiene a los afectados de las colonias: Ermita, Miravalle, Prado Churubusco, Conchita Zapotitlán y Santiago Zapotitlán, todas de las delegaciones Benito Juárez, Tláhuac y Xochimilco.

Sin embargo, no todos los pagos proceden, pues a decir de las autoridades del gobierno de la Ciudad de México, algunos de los daños que se reclaman a las constructoras no fueron ocasionados por las obras de Línea 12 sino que, de acuerdo con los análisis, son más viejos.

En otros casos aún están pendientes los resultados de los dictámenes practicados a los inmuebles para determinar si procede o no el pago correspondiente.

A cinco años de que se inició la construcción de la Línea 12 el peregrinar de oficina en oficina en reclamo de su pago, para muchos no termina. Y ya se anuncian nuevos daños… para muchos el calvario apenas comenzará. 

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