La mayoría de los libros en versión digital se encuentran en inglés, problema que dificulta el incremento del consumo de eBooks en Latinoamérica
España generó en 2011 un 3 por ciento de descargas de eBook e incrementó su producción en un 38 por ciento, lo equivalente a 18 mil títulos
Guadalajara es la sede del Noveno Congreso Iberoamericano de Editores, que comenzó el pasado 21 de noviembre y finalizará la noche de hoy.
En este congreso participan 150 empresas editoriales de toda América Latina, España y Portugal. Durante este año, los trabajos corren bajo el título “El libro en Iberoamérica: una empresa cultural en transición” .
Durante el congreso se plantearán temas de derechos de autor, promoción de la lectura y las nuevas tecnologías en torno al libro.
“Nos encontramos listos para enfrentar el desafío de las tecnologías de la información como lo que son: una amplísima ventana de oportunidad para seguir llevando contenidos de la mejor calidad a un mayor número de personas”, destacó Victórico Albores Santiago, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM).
Los libros digitales se han dejado de percibir como una amenaza, y se ven como una puerta nueva para la difusión de la lectura, así como una forma distinta del negocio editorial.
Y es que el modelo de negocio tradicional basado en los mercados territoriales, en el mercado de los eBooks se ve sustituido por un modelo más global.
El panorama de los libros electrónicos en México comienza apenas a tomar forma.
Y es que en 2010 aún no se tenían datos registrados de la venta de eBooks en el país.
En 2011, el promedio de facturación de eBooks en España, alcanzó el 3 por ciento del total del mercado editorial, cifra aún baja.
Durante la FIL se darán a conocer los resultados de la industria editorial de Latinoamérica al 2011, así como los resultados de la nueva encuesta de lectores que realizó la Fundación Mexicana para el Fomento de la Lectura, donde se espera que figuren cifras de los libros digitales por primera vez.
Según datos del 2010, obtenidos por el Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlalc), sólo el uno por ciento de las editoriales en América Latina han publicado más de 40 libros electrónicos.
Además,casi un 80 por ciento de las casas editoriales aún no han experimentado el formato digital en los países latinoamericanos.
Mientras en Latinoamérica comienza con lentitud la inclusión de los libros digitales, éstos van a la alza en sus ventas en otras partes del mundo.
Este año la gigante del comercio electrónico, Amazon, reportó que en el Reino Unido se vendieron 100 libros impresos por cada 114 eBooks para Kindle, lo que implica que el mercado para los eBooks está en crecimiento.
Cada vez más personas se suman a la lectura por medio de una tableta digital.
Amazon señala que las ventas de eBooks han aumentado el número de lectores.
La biblioteca Kindle de Amazon cuenta con más de 900 mil libros, y el vicepresidente de Kindle en la Unión Europea, Jorrit Van der Meulen, ha señalado que el éxito de la tableta les ha generado un aumento significativo en sus ventas de libros en lo que va del año.
Aunque apenas el pasado mes de septiembre comenzó la venta del dispositivo Kindle Fire en España, por lo que solo el uno por ciento de su oferta literaria está en español.
La mayoría de los libros en versión digital se encuentran en inglés, problema que dificulta el incremento del consumo de eBooks en Latinoamérica.
En los últimos dos años comenzaron a surgir plataformas que ayudan a facilitar el uso de los dispositivos electrónicos de lectura.
La empresa española Libranda es un ejemplo, ha trabajado en la promoción de libros y es la mayor plataforma de distribución y difusión de eBooks en lengua española. Tiene convenios con más de 130 sellos editoriales.
Ante este inminente surgimiento de una nueva oferta que afecta el consumo de libros aparentemente de manera positiva, las editoriales tienen la necesidad de reinventarse como industria.
Hoy cualquier persona puede publicar un libro digital sin tener que pasar por una casa editorial.
Tal fue el caso de Amanda Hocking, que vendió más de un millón de libros a través de la librería Kindle, en Amazon.
Publicar en digital es distinto que en papel, pues a pesar de ser el mismo contenido de lectura, el formato responde a formas distintas en su edición, diseño, distribución, formas de venta y promoción.
Las casas editoriales tendrán que adaptarse con gente capacitada para esos procesos.
Ventajas del eBook
Para las casas editoriales, la versión de eBook resulta más económica de producir y comercializar con títulos de libros agotados, así como al generar nuevas versiones digitales de sus publicaciones anteriores.
El eBook presenta la posibilidad de comercializar la publicación por partes, ofreciendo al lector la opción de comprar sólo lo que necesite; como en el caso de los libros jurídicos o técnicos.
Los usuarios de dispositivos electrónicos de lectura pueden acceder a los libros a cualquier hora y desde cualquier sitio para descargar el material en línea.
Una de las grandes ventajas del eBook es que podemos almacenar miles de libros en un mismo dispositivo, por lo que tiene un efecto muy práctico en relación a la portabilidad de los materiales.
El eBook permite que el lector interactúe con el texto de forma distinta, permitiendo colocar notas, marcadores, buscar documentos y enlazar partes del texto de un sitio a otro, entre otras acciones que el usuario requiera.
Por las ventajas que presenta el eBook, por su crecimiento en los últimos dos años y por los cambios que han surgido en las casas editoriales a raíz de su aparición, los libros electrónicos están en boca de todos en el mundo literario.
Siendo la FIL la feria del libro más importante de Hispanoamérica, el tema no se podía dejar sin discusión.
La industria del libro digital en México
México tiene una industria del libro que genera 15 mil puestos de trabajo, con operaciones comerciales por 9 mil millones de pesos, que representa un 0.7 por ciento del producto interno bruto, lo que la convierte en una industria con una gran oportunidad de crecimiento y desarrollo.
Concientes de que la industria del libro se encuentra en una transición por el cambio en el consumo de contenidos que ha impulsado la revolución tecnológica, la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, la CANIEM, estudia cuál será la mejor plataforma digital para que los editores mexicanos puedan colocar sus libros digitalizados.
Por otro lado, el Presidente de la CANIEM resaltó la importancia de buscar apoyos en la Secretaria de Economía para poder digitalizar su catálogo y que pueda estar al alcance de la sociedad. Se espera que dentro de cinco años se cuente con todos sus títulos en formato digital.
