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El fallido intento de las autoridades mexicanas por enviar a Estados Unidos un primer cargamento de aguacate jalisciense, y que terminó rechazado en su frontera, se olvidó entre el desconcierto de las declaraciones contradictorias y sin que ninguna instancia asumiera la responsabilidad del fiasco.
Ni la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder) de Jalisco, de Héctor Padilla Gutiérrez, ni a nivel federal, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), de José Calzada Rovirosa, clarificaron de quién había sido el error que impidió el ingreso del aguacate jalisciense en enero pasado.
Ahora, sin embargo, nuevos informes obtenidos por Reporte Indigo esclarecen que el área que no resolvió los trámites que habrían permitido la recepción exitosa de ese envío fue el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), de Enrique Sánchez Cruz.
En efecto, el Senasica, un órgano desconcentrado de Sagarpa, era el único facultado para firmar por México el Plan de Trabajo Operativo que regularía la exportación del aguacate de Jalisco, y cuya falta causó que Estados Unidos cerrara su frontera al producto local.
Según la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria, cada país debe tener una Organización Nacional de Protección Fitosanitaria: la de México es el Senasica y su Dirección General de Sanidad Vegetal (DGSV); y la de EU, el Departamento de Agricultura (USDA) y su Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal (APHIS), y solo estas pueden firmar un Plan de este tipo.
El mismo Senasica acepta: “No se completó el trámite administrativo para la puesta en marcha del Plan de Trabajo Operativo. El trámite consiste en que al firmar un Plan de Trabajo, se acuerdan las condiciones fitosanitarias específicas que se deben cumplir para poder llevar a cabo la exportación”.
Dicho Plan “es elaborado y firmado por las Organizaciones Nacionales de Protección Fitosanitaria de los países firmantes; en este caso el Senasica-DGSV y el USDA-APHIS-PPQ”, indicó vía Transparencia (recurso RRA 2022/17).
Aquel fracaso en la exportación de aguacate se leyó, incluso, como un primer golpe del presidente Donald Trump a los productos de México
La premura
El 16 de enero, cuando las autoridades federales y estatales celebraban el que debía ser el primer envío de aguacate jalisciense a EU en 83 años, los camiones con 120 toneladas partieron sin que el Plan de Trabajo estuviera firmado por Senasica y el USDA.
Es evidente la premura que imperó en ese evento, pues ese mismo día el Senasica emitió los cinco Certificados Fitosanitarios Internacionales (CFI) para los huertos de Jalisco, un requisito ineludible para exportar, pero inútil sin un Plan de Trabajo vigente.
Así lo reconoce el Senasica: “En la propuesta de Plan, el cual entrará en vigor una vez firmado por ambos países, se contempla que el trámite para la exportación es la obtención del CFI (…) Los CFI se obtuvieron, sin embargo, como ya se mencionó, no se completó el trámite administrativo para la puesta en marcha del Plan”.
Aquel fiasco se leyó, incluso, como un primer golpe de Donald Trump; luego vinieron explicaciones como la del titular de Seder, quien aseguró que mientras México no aceptara la papa de Estados Unidos, este no recibiría el aguacate local, lo que sería desmentido por el titular de Sagarpa.
El ganar-ganar
Actualmente solo el aguacate de Michoacán puede ingresar a EU, sin embargo, el 27 de mayo de 2016 el USDA publicó el acuerdo que autoriza la importación de ese fruto de todo México, siempre y cuando cumpla con sus controles.
Ese acuerdo puede beneficiar a Jalisco, pero no mientras carezca de un Plan de Trabajo Operativo. Se prevé que la autorización para nuevos estados será gradual.
“Creemos que Jalisco será el primer nuevo estado mexicano que cumplirá con los requisitos descritos en esta regla, y por ende, el primer estado mexicano además de Michoacán, que será autorizado para exportar aguacate Hass fresco a EU”, detalla la USDA.
Estima en Jalisco 2 mil 653 hectáreas (ha) calificadas para exportar aguacate a EU, aunque en el primer año solo provendría de la mitad -mil 326.5 ha-, por ello prevé que Jalisco envíe 13 mil 265 toneladas (t) el primer año.
“Si EU importara entre 13 mil 265 y 26 mil 530 t de aguacate desde Jalisco, y no hubiera un desplazamiento de importaciones de otras fuentes, la disminución en los precios del aguacate oscilarían entre 1.7 a 3 por ciento”, considera la USDA.
“No se completó el trámite administrativo para la puesta en marcha del Plan de Trabajo Operativo (en el que) se acuerdan las condiciones fitosanitarias específicas que se deben cumplir para poder llevar a cabo la exportación”
Enfrenta resistencia
El acuerdo del USDA evidencia, empero, que la importación de más aguacate de México enfrenta resistencias que van desde la desconfianza al gobierno mexicano por su corrupción, hasta un daño a los productores de EU y la pérdida de empleos.
El USDA recibió comentarios durante la consulta de la regla, como estos:
“Dos comentadores dijeron que APHIS depende de las autoridades locales de México para hacer valer los requisitos descritos en las regulaciones y el Plan de Trabajo Operativo. Citaron al Índice de Percepción de Corrupción de Transparencia Internacional como una prueba de que la corrupción en México sin duda alguna ocurrirá en relación con la exportación del aguacate”.
El USDA respondió que México se ha comprometido internacionalmente a respetar las medidas fitosanitarias acordadas, y que, en todo caso, APHIS va a “monitorear y auditar” la supervisión que haga México.
Fruto codiciado
Cifras del Departamento de Agricultura (USDA) sobre el mercado de aguacate entre México y Estados Unidos:
141,067
498,951
191,869
87.5
