¿El gas natural es el futuro en el mercado mexicano?
A diferencia de otros países del continente, como Brasil y Argentina, en México el rezago en infraestructura y explotación de los yacimientos de gas natural es muy alto, pese a que el presidente López Obrador dijo que impulsará dicho mercado
Rubén ZermeñoEn la batalla de los precios del gas lp y la entrada del Gobierno federal como competidor para regular los precios, surge una nueva alternativa que incluso podría ser más barata: el gas natural.
Para convertir la opción del hidrocarburo en una realidad, autoridades y empresas privadas deberán de trabajar juntos para satisfacer la demanda de la sociedad y combatir el rezago que tiene México respecto a otros países de América Latina, principalmente en inversión y proyectos.
Hace unas semanas el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que en su proyecto energético se encontraba la instalación en algunas colonias de una red de gas natural para aprovechar el hidrocarburo excedente de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que asciende a más del 40 por ciento de todo el gas que se adquirió durante la administración pasada.
“No lo podemos usar porque no hay ni en la Comisión Federal ni en la industria capacidad para consumir todo ese gas. Podemos construir instalaciones para gas natural en ciudades.
Al respecto, especialistas señalan que es necesaria una política de producción de gas natural en México, para aprovechar los recursos que tiene el norte del país y no depender más del gas natural que se compra, principalmente a Estados Unidos.
Si bien en teoría el Gobierno federal habla de explotar y aprovechar el hidrocarburo, en los hechos la realidad es muy distinta.
Inversión insuficiente para gas natural
A nivel América Latina, México perdió el liderazgo con el que contaba en años anteriores en materia energética. De acuerdo con un seminario realizado por Industrial Info (IIR Energía) sugiere que en el país, no hay nuevos proyectos que puedan asegurar una estrategia dentro del mercado energético a corto plazo.
En la región, de acuerdo con las conclusiones del seminario, existen alrededor de mil 807 proyectos por un monto superior a los 106 mil millones de dólares que se llevarán a cabo entre 2021 y 2023, de estos, 219 (por un monto de 29 mil millones de dólares), están en construcción y mil 122 (que costarán 69 mil millones de dólares) arrancarán en 2022.
La principal actividad que se detonará en América Latina en materia energética será la extracción de gas natural ya que la mayoría de los países lo utilizarán como materia prima para la generación de electricidad.
Debido a esto tanto gobiernos como empresas privadas invertirán miles de millones de dólares en este mercado para cubrir la demanda en el largo plazo.
Utilizando el parámetro de inversión de acuerdo a la demanda que se tendrá, Brasil encabeza la lista de los países que están haciendo mejor las cosas al respecto con una inversión de 44.5 mil millones de dólares; en la lista le sigue Argentina con más de 14 mil millones de dólares, después Ecuador con 6.9 y Colombia con 4.2.
México se encuentra por debajo de Perú, Guayana, Trinidad y Tobago en la posición número 8 ya que aunque invertirá 17.3 mil millones de dólares en los próximos dos años para la extracción de gas natural, su demanda para ese entonces será mayor.
El éxito de Brasil, señalaron los expertos en energía, radica en que al vender gran parte de sus activos como refinerías y ductos, están permitiendo la entrada de capital privado, aumentando la productividad.
“Brasil se está concentrando en su estructura de gas natural para el futuro, su objetivo será incrementar las reservas y mantener una producción a mediano plazo de crudo, y en el largo plazo de gas natural, para poder acercar el gas para la generación de electricidad, y uso en los hogares.
En Argentina bajo el programa Gas Cuatro, autoridades y privados buscan reactivar la zona conocida como Cuenca de Vaca Muerta para incrementar la extracción de gas natural para satisfacer la demanda interna y exportar en un futuro próximo a Brasil y a Chile.
La importancia de la certidumbre
Respecto a México, advierte IIR Energía que todo dependerá del presupuesto e inversiones que asignen a Petróleos Mexicanos (PEMEX) y la certidumbre que generará el Gobierno mexicano a la inversión privada.
“En el mayor proyecto del mercado mexicano, Dos Bocas, está debajo la empresa productiva del Estado, de ahí en fuera no hay otro. El mercado no es atractivo para invertir por privados por la incertidumbre ligada a las restricciones del gobierno actual a la inversión privada, y porque se tiene que litigar en algún momento de la vida de cada proyecto”.
Ejemplo de esto, es que el 37 por ciento de los proyectos energéticos en México tienen demoras de más de dos años para el inicio de su construcción, principalmente en ductos.
“En almacenamiento algunos proyectos se están cancelando o están en espera de las modificaciones que vaya a haber por la nueva ley de importación lo que podría desalentar las inversiones en el sector”, agregan las conclusiones del estudio.
Pese a este escenario, IIR Energía, señala que los privados continúan interesados en México debido a que la demanda de gas natural está incrementando.
“Todo dependerá de la certidumbre que dé el mercado y que no todo esté ligado a la inversión de Pemex, debido a que la empresa productiva del Estado está perdiendo atracción”, concluyen.
El ‘freno’ de la CRE
Al igual que en el almacenamiento, distribución y comercialización de otros hidrocarburos, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) se encuentra frenando el mercado del gas natural.
Un ejemplo es la parálisis de la Ciudad de México, en donde la CRE tiene frenados desde hace varios meses los permisos para que empresas construyan la infraestructura y ductos para llevar el gas natural a zonas residenciales.
De los nueve permisos que se le han solicitado a la CRE para la distribución de gas natural por ductos, cinco se encuentran frenados desde 2019 y los otros cuatro desde el año pasado.